El escándalo de los crueles experimentos en cachorros de raza beagle realizados por el doctor Fauci
SOCIEDAD
Bajo el nombre de «BeagleGate», The White Coat Waste Project hizo públicos documentos e imágenes de los maltratos extremos a los que han sido sometidos los perros en al menos seis laboratorios de Estados Unidos y África
11 nov 2021 . Actualizado a las 18:43 h.Torturados y asesinados en el nombre de la ciencia. Cachorros de raza beagle con las cuerdas vocales seccionadas y las cabezas enjauladas en cajas llenas de jejenes (cuya picadura es muy dolorosa) que se los comían vivos, o con el cuerpo devorado por más de 200 garrapatas simultáneamente durante dos meses. Solo escribirlo es atroz. Estos son algunos de los experimentos llevados a cabo por el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID) de Estados Unidos, un grupo adherido al Departamento de Salud y Servicios Humanos. Es decir, que la crueldad animal estaba, además, financiada por el Estado. Por si fuera poco, la entidad está dirigida por el doctor Anthony Fauci, asesor médico del Gobierno estadounidense y la cara más visible de la pandemia.
El caso, que se ha denominado BeagleGate, en un guiño al famoso escándalo Watergate, fue documentado y expuesto por The White Coat Waste Project (WCW), un grupo de activistas que trabajan para evitar que los fondos públicos se destinen a investigaciones que impliquen maltrato animal. A través de documentos e imágenes, han demostrado cómo los perros fueron utilizados para probar todo tipo de fármacos, tras infectarlos con innumerables enfermedades, para luego asesinarlos o dejarlos morir. Hasta el momento, han denunciado que seis laboratorios en Kansas, Georgia, California, Maryland y África han llevado a cabo experimentos de extrema crueldad en perros beagle, algunos de los cuales aún siguen en marcha.
Organizaciones como People for the Ethical Treatment of Animals (PETA) ya han pedido que Fauci dimita de su actual puesto después de que estas investigaciones hayan sido expuestas. En las redes sociales, donde este escándalo ha tenido mucho impacto, se ha llegado a pedir su arresto.
De los ensayos que se conocen, hay dos especialmente despiadados. En uno, del cual se desconoce el propósito (si acaso importa), las cabezas de los perros vivos eran enjauladas en cajas llenas de jejenes que se alimentaban de los animales durante un tiempo indeterminado, hasta que los canes morían. En otro, los perros eran infectados con una bacteria y luego les llenaban el cuerpo de garrapatas para analizar la transmisión a través de estos parásitos y para probar un fármaco experimental. En ambos, las cuerdas vocales de los animales eran seccionadas para que no pudieran ladrar. El motivo científico era «disminuir la ansiedad de los perros» y «resguardar la audición de los investigadores».
Según los datos que pudo obtener el WCW, el NIAID gastó 1.68 millones de dólares en fondos de los contribuyentes para probar fármacos en beagles. La extrema crueldad de los experimentos a los que han sido sometidos los animales ha ocasionado un revuelo en la prensa, pero también en en la Cámara de representantes de Estados Unidos.
En una carta al director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, 24 representantes, mayoritariamente republicanos, pero también demócratas, hicieron pública su «gran preocupación sobre los informes de experimentos costosos, crueles e innecesarios con perros, financiados por los contribuyentes». «Es particularmente preocupante el hecho de que la factura al NIAID incluía una línea para cordectomía. Como probablemente sepa, una cordectomía, también conocida como desvocalización, implica cortar las cuerdas vocales de un perro para evitar que ladre, aúlle o llore», consta en la carta.
Miembros del Congreso también se han pronunciado al respecto en las redes sociales, la mayoría de ellos republicanos. Pero no solo lo hacen en contra de los estudios, sino directamente en contra del doctor Fauci. El partido que hizo presidente a Donald Trump es el que más antivacunas tiene en su seno y el que más ha cuestionado las restricciones derivadas de la crisis del coronavirus, de manera que no han dejado correr el escándalo de la cara más visible de la pandemia en el país.
El último día para que Fauci dé explicaciones y responda a la carta es el próximo 19 de noviembre de 2021. Hasta el momento, el experto no se ha pronunciado aunque ha hecho varias apariciones públicas. En cambio, el NIAID, la agencia que él lidera, sí ha reconocido que se han financiado estos experimentos, aunque solamente en Estados Unidos. Esto significa a su vez que niegan haber formado parte de las investigaciones en África, donde se habría empleado la mayor crueldad con los animales.
Por la gran repercusión que ha tenido la noticia, la WCW insiste en la campaña #GiveThemBack (#Devolvedlos), que promueve que aquellos animales que sobreviven a los experimentos no sean asesinados, sino liberados y recatados en hogares o en santuarios de animales. Esperan que próximamente se aprueben leyes contundentes al respecto.