España, preparada para administrar la vacuna a los menores de 12 años en cuanto lo autorice Europa

La Voz SANTIAGO

SOCIEDAD

XOAN A. SOLER

Sanidad y consejeros se reunieron sin avanzar en la administración de la tercera dosis a los mayores de 70

13 oct 2021 . Actualizado a las 20:48 h.

Con la pandemia bajo control en estos momentos y una incidencia de 41,4 casos por cien mil habitantes a 14 días, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, aseguró tras la reunión del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud que España está preparada ya para vacunar a los menores de 12 años cuando lo autorice la Agencia Europea del Medicamento. Darias espera esta autorización y confía en que las comunidades sigan realizando el excelente trabajo que han hecho hasta ahora con la vacunación de los mayores de 12.

De hecho, además de completar aquellos grupos etarios en los que todavía falta un porcentaje de personas por proteger, las comunidades iniciarán también la vacunación con la tercera dosis de los mayores de 70 años, aunque en la reunión entre Sanidad y consejeros no se avanzó cómo y cuándo se hará. Sí se aprobó hace días que esta dosis de recuerdo se administre a finales de octubre a los mayores de 70, siempre y cuando hayan pasado seis meses desde la inoculación. La propuesta, que no contó con el beneplácito de la Xunta, es inocular esta dosis al mismo tiempo que se lleva a cabo la campaña de vacunación de la gripe. Según los últimos datos de Sanidad, el 87,8 % de la población diana tiene la pauta completa, un porcentaje que en Galicia sube al 92,8 %.

Siguen las mascarillas

Como ya había anunciado hace días, la llegada de la nueva normalidad y el fin de las restricciones en muchas comunidades -en Galicia la próxima semana finaliza la situación de emergencia sanitaria- no pondrán fin al uso de la mascarilla. La ministra de Sanidad aseguró tras el Consejo Interterritorial que estas protecciones han llegado para quedarse, al menos durante este otoño ante la incertidumbre de la gripe. El Consejo aprobó también distribuir 13 millones de euros a las comunidades para la mejora de la red de vigilancia en salud pública, y poder así prevenir y afrontar mejor posibles amenazas sanitarias globales.