¿Qué cambiará cuando la próxima semana se levante la situación de emergencia sanitaria en Galicia?

Elisa Álvarez González
Elisa Álvarez SANTIAGO

SOCIEDAD

Terrazas en la plaza de Méndez Núñez, en Pontevedra
Terrazas en la plaza de Méndez Núñez, en Pontevedra CAPOTILLO

En la práctica, la Xunta podrá utilizar la Lei de Saúde para establecer restricciones en aforos y horarios

12 oct 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Este miércoles arranca en el Parlamento de Galicia el estado sobre el estado de la autonomía y en la primera jornada el presidente de la Xunta, Núñez Feijoo, hará un anuncio importante relacionado con la pandemia de coronavirus, el fin de la situación de emergencia sanitaria en Galicia, tras diecinueve meses activa. El 13 de marzo del 2020 entró en vigor esta medida extraordinaria que acabó extendiéndose año y medio debido a la gravedad de la crisis del covid. La semana que viene se levantará esta emergencia, lo que no implica que desaparezcan todas las restricciones impuestas por el Gobierno gallego.

Y es que la Xunta tiene ahora otra herramienta, por lo que tal y como informan desde Sanidade, la nueva normalidad, ya sin emergencia sanitaria, tendrá como marco la reforma de la Lei de Saúde, en la que se recoge la posibilidad de limitar aforos, horarios e incluso agrupaciones de personas. Es decir, que aunque finalice esta situación extraordinaria, el Gobierno gallego sigue teniendo instrumentos para controlar la pandemia en los términos en los que lo está haciendo actualmente.

La reforma de la Lei de Saúde fue recurrida por el Gobierno central al Tribunal Constitucional, pero tras un acuerdo con la Xunta, el Ejecutivo de Sánchez retiró el recurso. Solo queda anulada la vacunación obligatoria que recogía este texto, al comprometerse el equipo de Núñez Feijoo a modificar este punto y hacer que sea voluntaria.

¿Qué cambiará entonces en Galicia cuando la semana que viene se ponga fin a la emergencia sanitaria? Parece que en la práctica puede haber pocos cambios. De hecho, es más probable que la relajación de medidas venga por la decisión clínica de los expertos y las autoridades sanitarias tras analizar la incidencia del virus en la comunidad, que porque no haya emergencia. De momento se mantiene la limitación de aforos -al 90 % en la mayoría de los sectores-; de horarios en la hostelería y el ocio nocturno; y de grupos de personas en este sector. Y esto podrá mantenerse si la Xunta así lo decide porque lo permite la ley. La reforma del artículo 38 recoge que ante un riesgo inminente y grave para la salud de la población podrán limitarse aforos, horarios de apertura y cierre de establecimientos o actividades. También obligar al uso de mascarilla y a mantener distancias en las terrazas, limitar agrupaciones de personas e incluso forzar a que aquellos que han estado en contacto con enfermos deban hacer cuarentena en su domicilio. Eso sí, en todo caso serán medidas proporcionales, temporales, necesarias, y si limitan derechos fundamentales y libertades, «requerirán la necesaria garantía judicial».

La ley, por ejemplo, no habla del pasaporte covid, en vigor para acceder a los locales de ocio nocturno y a los albergues, pero sí recoge que se podrán tomar «cualesquiera otras medidas ajustadas a la legalidad vigente y sanitariamente justificadas».

Reunión en una semana

En la práctica el comité clínico ya comenzó una desescalada que la semana que viene podrá dar un nuevo paso. Los expertos se han dado quince días para estudiar la evaluación de la incidencia del virus, y una vez transcurridos podrán aumentar aforos -ya al 90 %- y horarios. Por lo tanto la semana que viene podría llegar la nueva normalidad, aunque mascarillas, distancia social e higiene seguirán estando en vigor.