Jorge Lis, el piloto antivacunas y negacionista del covid-19 que acabó en la uci a los 46 años

La Voz REDACCIÓN

SOCIEDAD

Familia de Lis | EFE

Su hermana, Elena Lis, cuenta la historia del deportista que, poco antes de ingresar al hospital, «se arrepintió» de no vacunarse

05 ago 2021 . Actualizado a las 20:59 h.

La enfermedad que negó podría costarle la vida. Su hermana, en un acto de apabullante solidaridad, comparte la historia de Jorge Lis con la esperanza de que sirva para abrir los ojos de alguien que todavía esté a tiempo. «El virus mata y la vacuna salva vidas» es el mensaje que envía Elena Lis a los negacionistas del covid-19. Mientras tanto, su hermano, expiloto de motociclismo de 46 años, se encuentra ingresado en la unidad de cuidados intensivos del hospital La Fe de Valencia tras haberse negado a recibir la vacuna y contraer el virus.

«Estoy segura de que con una sola dosis Jorge no estaría en la uci», afirma Elena en una entrevista con la Agencia EFE. Decidió hacer pública la historia de su hermano para intentar «sacar algo positivo de todo este horror» y convertirse en la voz de Jorge para servir de ejemplo, porque «si él sale bien, seguro que también lo compartiría».

Al principio de la pandemia estaba confinado en casa de su madre, recuerda Elena. «No me dejaba que me acercara ni a cinco kilómetros, estaba muy concienciado». Sin embargo, luego «dio un cambio, empezó a abrazar teorías más negacionistas y a última hora era antivacuna covid, no recomendaba que nos la pusiéramos».

En el último momento, antes de ingresar en el hospital, «se arrepintió» de esa decisión, cuenta su hermana. Relata que Jorge envió un mensaje a la familia «diciendo que sentía mucho haber sido un cafre y haber estado muy contaminado por las redes sociales en general y por todo lo que leía». «Se da cuenta del error, lo reconoce y envía también audios a algún amigo más íntimo diciendo: lo siento mucho, rezad por mí, esto se me va de las manos», detalla.

Elena asegura que su hermano es «una persona sana». Nunca ha fumado, «superdeportista, que hacía natación abierta con neopreno, bicicleta de montaña». «Nada hacía presagiar que fuera de esos casos que se pueden complicar». Pero, pese a todo, Jorge ingresó a mediados del mes de julio en el hospital La Fe de Valencia.

En estos momentos permanece en la unidad de críticos, en estado de «extrema gravedad», conectado a una máquina ECMO, muy agresiva, que oxigena la sangre fuera del cuerpo para intentar dar tiempo a los pulmones de que se recuperen. «Mucha gente minimiza los efectos y ahora hay un poco la idea de que las personas mayores están vacunadas, y los jóvenes pasan si pena ni gloria, y no es así. Las uci están llenas de gente joven», lamenta.

Elena, que vive estos días con gran incertidumbre y pegada al teléfono las 24 horas, asegura que decidió hacer pública la historia de Jorge, «tomar el relevo» a su hermano, para que otras personas y familias eviten pasar por esta situación. «Si algún hijo no se quiere vacunar o un familiar, es su elección, pero que insistan», pide, ya que en su caso lamenta no haber podido convencer a Jorge en las discusiones que mantuvieron sobre la vacunación.

Considera que los políticos y los médicos pueden hacer campañas, «todo suma», pero contar la situación de los ciudadanos reales puede hacer cambiar de opinión a las personas más escépticas. Al hacer pública la historia de Jorge ha querido también «dar voz» a las personas que están sufriendo la enfermedad de la covid-19 tras negarse a recibir la vacuna.

«No es propaganda política, es real, la gente está muriendo, lo pasa fatal, para las familias es horroroso, es estar 24 horas pendiente del teléfono porque se puede complicar más, es una pesadilla y hay gente fuera que lo puede evitar todavía», insiste.

Elena considera que hay «demasiada información, desinformación en realidad», y que es bueno «alejarse y ver las cosas de forma más sencilla. Hay un virus ahí fuera que es real y que mata, y lo contrario es desprestigiar a la gente que está en primera fila y jugándose la vida».

«El virus mata y la vacuna salva vidas, es una estadística pura, es ciencia, realidad, no es una opinión y la gente lo tiene que ver», reitera y pide a las personas que dudan sobre la vacuna covid que «se vacunen» porque se muestra convencida de que «con una sola dosis Jorge no estaría en la UCI». «Lo único que podemos hacer es que no le pase a otros, que este sufrimiento nuestro le pueda servir a alguien», concluye.