Este julio, el menos cálido desde el 2012

óscar lópez, I. c. SANTIAGO / LA VOZ

SOCIEDAD

ANA GARCIA

El mes fue seco pero la menor cantidad de radiación solar explica la percepción generalizada de que el tiempo ha sido malo

05 ago 2021 . Actualizado a las 16:02 h.

El pasado mes de julio fue el más frío desde el año 2012, con una media de hasta dos grados menos en relación a su temperatura habitual, pero no tan lluvioso como podría parecer. Esta es una de las principales conclusiones del informe mensual de Meteogalicia presentado ayer por la conselleira de Medio Ambiente, Ánxeles Vázquez, y las especialistas del servicio María Jesús Souto y Nuria Gallego, que se ocupan, respectivamente, de la observación y predicción y de la calidad del aire.

«Foi un mes de xullo inestable onde faltaron moitas horas de radiación solar, sobre todo nas zonas de costa. Iso fai que teñamos a sensación de que foi un mes chuvioso, pero en realidade foi bastante seco. Con poucos días solleiros, iso si», explicó Ánxeles Vázquez haciendo un balance general. María Souto añadió, a su vez, que «a sensación de mal tempo débese, máis que ás poucas precipitacións, á presenza de nubes baixas e brétemas causadas polos ventos do oeste, os da Galicia atlántica, que nos trouxeron a humidade cara a terra e nos taparon o sol impedindo que nos chegasen as fortes vagas de calor que houbo no resto da península». Como ejemplo de las escasas precipitaciones puso el caso de Ourense, que habitualmente registra en julio tres o cuatro días de lluvia, a consecuencia de las tormentas generadas por las altas temperaturas, y este año, con temperaturas más suaves, se quedó «co pluviómetro a cero». Tampoco en Santiago, pese a su fama de ciudad lluviosa, se produjeron grandes precipitaciones. Si habitualmente los compostelanos tienen que sacar el paraguas durante seis días del mes de julio, este año solo lo necesitaron un día más, hasta un total de siete.

¿A qué se debe entonces esa sensación de mal tiempo generalizada? Pues a la falta de radiación solar, especialmente si se compara con la registrada en julio del 2020, «que presentou valores anormalmente altos», apunta María Souto. Esta situación, no obstante, tiene aspectos positivos, según aseguró Nuria Gallego, puesto que «evita que se forme tanto ozono e, polo tanto, as persoas especialmente sensibles non ven afectada a súa saúde nin teñen que protexerse máis».

Aunque resulta difícil hacer predicciones a largo plazo, quizás aún no sea tarde para los más entusiastas del buen tiempo. «A partir da próxima semana parece que se anima a vir o anticiclón e pode que haxa un tempo máis seco con predominio do vento do norte, o que produciría un aumento das temperaturas e, polo tanto, un tempo un pouco máis de verán», explicó María Souto.