Galicia alcanza el pico de incidencia, paso previo a la caída de hospitalizados

Tamara Montero
tamara montero SANTIAGO / LA VOZ

SOCIEDAD

Santi M. Amil

Por primera vez en dos semanas ha habido menos de mil positivos diarios, pero se han notificado diez fallecimientos. El área de Ourense encabeza la salida de la quinta ola

03 ago 2021 . Actualizado a las 04:45 h.

Ourense está ya en tendencia ala baja, Pontevedra sigue el mismo camino y probablemente se las siguientes en iniciar el descenso sean Vigo y Santiago. Galicia encara ya el pico de incidencia de una quinta ola marcada por la irrupción de la variante delta. Este lunes, por primera vez en dos semanas se han notificado menos de mil nuevos diagnósticos en 24 horas, un total de 939, aunque la tasa de positividad sigue triplicando el máximo que marca la OMS para mantener un brote bajo control.

El panel de expertos que asesora a la Xunta volverá a reunirse hoy en un comité en el que principalmente se hará un análisis de los datos para adecuar las restricciones a la situación epidemiológica de cada concello. La mayoría de las ciudades entraron en nivel alto la semana pasada, por lo que en principio no se prevén cambios en ninguna de ellas, a pesar de que Pontevedra y especialmente Ourense muestran una favorable evolución. Hay que esperar al menos diez días para que las tendencias se consoliden y pensar en un cambio de nivel.

En cualquier caso, el pico de la ola ha llegado a Galicia y las gráficas muestran ya la situación de meseta previa al descenso de la transmisión. La razón de tasas decrece (y por ejemplo en Ourense es menor al 0,8, lo que indica esa clara tendencia al descenso) y la comparación entre la incidencia acumulada a siete días (292 casos por cien mil habitantes, según la última actualización del ministerio) y a 14 días (665 casos por cien mil) también indica que la transmisión empieza a frenarse.

Previsiblemente, el área sanitaria de Ferrol será la última en iniciar el descenso de esta quinta ola. Lo adelanta Tato Vázquez Lima, miembro del comité clínico: las previsiones apuntan a que la próxima semana se alcanzará el pico de hospitalizaciones, tras lo que llegará el de pacientes críticos.

Aunque tanto en los datos de transmisión como en los de presión asistencial hay que tener en cuenta los efectos del fin de semana (en los que se dan menos altas y se enlentece la capacidad diagnóstica), este lunes hay una docena más de personas ingresadas que el día anterior. Un total de 43 están en la uci (una menos que el día anterior) y hay 285 camas de agudos ocupadas por pacientes con coronavirus, trece más que la jornada anterior.

Esta quinta ola ha sido distinta a las demás precisamente porque la presión asistencial ha sido menor que en las anteriores. Aunque la tasa de personas infectadas con covid-19 que requieren hospitalización (del 0,2 % en uci y del 1,7 % en planta en estos momentos), es mucho menor que en la tercera ola, por ejemplo -llegó a alcanzar el 10 % en agudos y el 3 % en críticos- sigue siendo un motivo de preocupación. El sistema no corre riesgo de colapso como en las olas precedentes, pero la época de verano también merma la capacidad, según recuerda Sergio Vázquez, miembro del comité clínico.

Diez muertes en cuatro días

El dato más negativo de la jornada es el de fallecimientos. El Sergas notificó diez nuevas víctimas entre el viernes y ayer, con lo que desde el inicio de la pandemia han muerto por el momento en Galicia 2.474 personas. Tres se produjeron en el hospital de Lugo, dos en el de Ferrol, otras dos en el de Pontevedra, dos más en el de O Salnés y una en Santiago. Todos eran mayores de 75 años.