El CSIC desarrolla un ecógrafo pulmonar para diagnosticar el covid

La Voz REDACCIÓN

SOCIEDAD

César Hernández | CSIC

El prototipo combina tecnología de ultrasonidos con procesamiento de imagen e inteligencia artificial para detectar y cuantificar los signos típicos de la neumonía bilateral

27 jul 2021 . Actualizado a las 17:34 h.

La experiencia de un médico experto asimilada por un algoritmo. Es la tecnología que ha desarrollado el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y que servirá como una prueba de diagnóstico altamente eficiente para detectar el coronavirus. Se trata de un ecógrafo pulmonar que combina tecnología de ultrasonidos con procesamiento de imagen e inteligencia, para ofrecer una interpretación de los resultados que se observen. Tratándose de una técnica compleja, será de mucha ayuda porque acelerará los tiempos y mejorará la eficiencia.

«La ecografía de pulmón es relativamente compleja y tiene que evaluar todo el tórax, por tanto, lleva bastante tiempo. La idea principal de Ultracov es simplificar al máximo el procedimiento, hacerlo más rápido y más eficiente, para que esté al alcance de más profesionales y en más sectores asistenciales, como en atención primaria y domiciliaria o en residencias», explica el investigador del CSIC Jorge Camacho, del Instituto de Tecnologías Físicas y de la Información Leonardo Torres Quevedo.

Así funciona el prototipo. Para evaluar el pulmón es necesario registrar hasta 12 regiones en la parte anterior, lateral y posterior del tórax. Un primer algoritmo analiza en tiempo real las imágenes para saber si la sonda está bien colocada en la región correspondiente y si la imagen es válida. Una vez que lo confirma, guarda de forma automática un vídeo, que es procesado por un segundo algoritmo de ayuda al diagnóstico, capaz de detectar y cuantificar los signos característicos de la neumonía causada por la covid-19. Finalmente, con los hallazgos de las 12 regiones, se calcula una puntuación que mide el grado de afectación del pulmón y se genera un informe del examen. Este resultado da una imagen completa de la intensidad con la que el coronavirus ha afectado a los pulmones del paciente.

Pero no solo es útil para el diagnóstico. Con esta prueba, que puede repetirse las veces que sea necesaria, el personal médico también será capaz de realizar un seguimiento del estado de los pulmones del paciente y decidir si es necesario o no intensificar el tratamiento. 

«Lo que se ha visto en estudios durante este último año es que la ecografía puede tener una sensibilidad de alrededor del 85-90 % para detectar las alteraciones pulmonares que causa el covid-19. Esto está prácticamente al mismo nivel que un TAC. Con este ecógrafo intentamos que las herramientas de la inteligencia artificial nos permitan ver allá donde no llega el ojo humano y que la máquina nos ayude a interpretar la escala de alteraciones que produce el virus», señala Yale Tung Chen, médico internista del Hospital Puerta de Hierro de Majadahonda.

Este dispositivo también puede ayudar en el diagnóstico y manejo de otras patologías, como por ejemplo las neumonías, víricas o bacterianas, y la insuficiencia cardíaca.