Así funcionará en Francia el certificado sanitario obligatorio para acceder a lugares públicos

La Voz REDACCIÓN

SOCIEDAD

BORJA SUAREZ | REUTERS

A partir de agosto los franceses necesitarán una pauta de vacunación completa, un test negativo de las 48 horas anteriores o una prueba de haber pasado el virus en los seis meses previos para acceder a la mayoría de espacios

26 jul 2021 . Actualizado a las 13:28 h.

La nueva normalidad está a la vuelta de la esquina en Francia, pero con condiciones. A partir de agosto, los ciudadanos tendrán que hacer un espacio en sus carteras para un certificado sanitario que acredite una pauta de vacunación completa, un test negativo de las 48 horas anteriores o una prueba de haber pasado el covid en los seis meses previos. La medida será obligatoria para acceder a casi cualquier espacio público y ya ha sido aprobada por el Parlamento francés.

En cualquier caso, Francia no es el único país que quiere aplicar la medida. La última en adoptarla ha sido la República de Irlanda, que comienza este lunes a servir en interiores a clientes vacunados con la pauta completa, una decisión que permitirá a muchos bares y restaurantes reabrir sus puertas por primera vez desde marzo del 2020. Los responsables de los establecimientos deberán comprobar que los presentes tengan el certificado digital covid de la Unión Europea. 

También lo ha hecho Italia. Desde el 6 de agosto, será necesario contar con la pauta completa de vacunación o con un test con resultado negativo para acceder al interior de bares y restaurantes, de museos, gimnasios y piscinas, entre otros espacios públicos del país.

Conviene recordar también que 36 concellos gallegos ya han puesto en marcha el mismo protocolo. La hostelería de los municipios que se encuentren en nivel máximo o alto deberán solicitar a sus clientes el certificado de vacunación que acrediten haber recibido la pauta completa.

En todo caso, Francia está a un paso de oficializar la medida. Bares, cafeterías y restaurantes, tanto en terrazas como interiores; medios de transporte públicos de largo recorrido así como los lugares donde ya era obligatorio desde el 21 de julio: museos, teatros, monumentos, salas de deporte y espectáculo. Todo quedará fuera del alcance de aquellos que no cuenten con el comprobante.

¿Y si se incumple? El texto prevé multas de 135 euros para los infractores y hasta seis meses de prisión y 3.750 euros de multa en caso de una tercera reincidencia en 30 días. Para los profesionales, las sanciones por no controlar irán desde multas hasta cierres administrativos.

Los centros comerciales han quedado exentos de la medida, aunque corresponderá a las autoridades locales imponer el uso del certificado sanitario en ellos si lo consideran necesario.

Por su parte, los adolescentes de entre 12 y 17 años no tendrán que presentarlo hasta el 30 de septiembre, pues empezaron a vacunarse más tarde. Este grupo solo requerirá la autorización de uno de los padres para vacunarse y los menores con 16 y 17 años podrán hacerlo por su cuenta.

Asimismo, la ley contempla que todo el personal sanitario tiene obligación de vacunarse. Deberán tener al menos una dosis el 15 de septiembre y la pauta completa como muy tarde el 15 de octubre. De no ser así podrán ser suspendidos de empleo y sueldo, pero no despedidos, una introducción que aportaron los senadores.

Aunque el Gobierno francés había solicitado que la medida se mantuviera en vigencia hasta el 31 de diciembre, senadores y diputados acordaron en comisión mixta paritaria que la aplicación se condiciona a la prolongación del estado de emergencia sanitaria, hasta el 15 de noviembre. Cualquier nueva extensión debe ser aprobada por los parlamentarios.

El Gobierno ha acudido al Consejo Constitucional para que revise las medidas antes de la promulgación del texto, que esperan poner en marcha como muy tarde durante los primeros días de agosto.