El Reino Unido despide el confinamiento entre fiestas y protestas en las calles

juan alonso LONDRES / CORRESPONSAL

SOCIEDAD

Protestas contra las restricciones en el denominado Día de la Libertad en Londres
Protestas contra las restricciones en el denominado Día de la Libertad en Londres FACUNDO ARRIZABALAGA

Johnson mantuvo la reapertura pese a las fuertes críticas y un continuo aumento de nuevos casos que ha hecho que EE.UU. pida que no se viaje al país

19 jul 2021 . Actualizado a las 21:10 h.

Entre fiestas y protestas, los británicos dijeron adiós ayer al tercer confinamiento impuesto por el Gobierno de Boris Johnson para frenar la pandemia del covid-19. A medianoche de este lunes, 19 de julio, cientos de jóvenes se lanzaron a las discotecas londinenses para celebrar su reapertura, tras 16 meses cerradas. Pero cuando unos apenas pasaban la resaca, varios cientos de personas se congregaban ante el Parlamento para exigirle que rechace la posibilidad de nuevas restricciones sociales en el futuro debido al coronavirus.

Las imágenes de cientos de jóvenes haciendo fila y luego bebiendo y bailando sin respetar ninguna distancia social y, por supuesto, sin mascarillas alarmaron a más de uno de los críticos del llamado Freedom Day (Día de la Libertad). El propio primer ministro, Boris Johnson, dejó ayer abierta la posibilidad de ordenar a estos establecimientos que exijan a sus clientes, a más tardar en septiembre, que se sometan a pruebas rápidas para detectar el virus o que demuestren que están vacunados.

Johnson hizo el anuncio desde su residencia de descanso de Chequers, donde está aislado, después de que el fin de semana el ministro de Salud, Sajid Javid, diera positivo. El primer ministro, sin embargo, dio negativo. Los expertos ven en las discotecas, clubes nocturnos y eventos masivos como conciertos, partidos de fútbol o protestas el ambiente perfecto para que se propague la enfermedad.

Demasiado pronto

El fin de las restricciones, en particular la de mantener dos metros de distancia con otra persona y la de utilizar obligatoriamente las mascarillas en sitios públicos cerrados, ha sentado mal a responsables sanitarios, a científicos y a la oposición, los cuales consideran que ha llegado muy pronto.

«Los laboristas no apoyan el plan del Gobierno. Levantar todas las medidas a la vez es imprudente y más hacerlo cuando la variante de Johnson (por la delta aparecida en la India) está fuera de control nos asoma a un verano de caos», afirmó ayer el líder laborista, Keir Starmer, en el Parlamento. «Apoyamos la creación de trabajo y el bienestar, pero la imprudencia de Johnson nos aboca a nuevas restricciones», concluyó.

Esta opinión es compartida por los ciudadanos de a pie. El 56 % consideran un error que el Gobierno deje al libre arbitrio el uso de las mascarillas en el transporte público o las tiendas, según una encuesta de la empresa Yougov.

Los datos sanitarios sustentan las críticas. Ayer el país registró otras 39.950 infecciones, con lo cual el total en los últimos siete días ya alcanza 322.170, casi el doble de la semana anterior. Por su parte, otras 742 personas fueron ingresadas en los hospitales por culpa del covid-19, el 60 % de ellas vacunadas con la pauta completa, admitió el jefe del grupo de científicos que asesora al Gobierno, Patrick Vallance.

La admisión de Vallance refuerza las dudas sobre la efectividad de las vacunas. Por cierto, el plan de inmunización continúa mostrando datos de agotamiento. Así, este domingo apenas 18.000 personas recibieron su primera dosis.

Pero no fue hasta el final de la tarde del Día de la Libertad cuando Johnson recibió su gran varapalo desde la otra orilla del Atlántico. Estados Unidos recomendó a sus ciudadanos que no visiten el Reino Unido debido a la elevada incidencia del covid-19.