Así reaccionan los jóvenes a la vacuna

Gabriela Consuegra / M. F. REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Vacunación de menores de 40 y estudiantes Erasmus en Pontevedra
Vacunación de menores de 40 y estudiantes Erasmus en Pontevedra ADRIÁN BAÚLDE

Las personas de 30 a 40 años reportan efectos secundarios más potentes

18 jul 2021 . Actualizado a las 22:59 h.

La vacuna ha llegado a las personas de entre 30 y 40 años y ha traído consigo una cartera amplia de efectos secundarios, algunos menos conocidos que otros. Lo mínimo que puede esperar quien reciba el antígeno es un dolor en el brazo, pero la fiebre, el malestar, los ganglios inflamados e incluso menstruaciones más dolorosas y abundantes también son reacciones frecuentes. Aunque no todas las personas las experimentan, las que lo hacen pueden llegar a sentirse muy preocupadas, pero todo tiene una explicación. Hablan los expertos.

Vicente Larraga, investigador del CSIC, cree conveniente advertir que «todas las vacunas suelen tener efectos secundarios de mayor o menor intensidad». Sin embargo, las reacciones dependerán de la respuesta del sistema inmunitario de cada persona, porque «no todo el mundo experimenta lo mismo y los efectos pueden ser variados», señala.

«En la gente joven el sistema inmunitario es más potente y eso provoca que muchas veces la reacción también lo sea», explica el virólogo Mariano Esteban, jefe del Grupo de Poxvirus y Vacunas del Centro Nacional de Biotecnología del CSIC. «Las molestias habituales, como el dolor en el lugar del pinchazo, dolor de cabeza, fiebre, escalofríos o malestar general, serán más intensas», añade.

Pero la perspectiva de género, muchas veces olvidada en el campo de la salud, también influye en los efectos secundarios que se pueden experimentar. «La mayoría de las mujeres en edad fértil están recibiendo la vacuna en la actualidad», explica Laura Baena García, investigadora del Departamento de Enfermería de la Universidad de Granada. ¿Qué pasa con ellas? Aunque aún no hay estudios definitivos, Baena lidera en la actualidad una investigación para describir las reacciones que pueden sentir, que ya arroja datos preliminares, y conocer el porqué.

¿Cuándo consultar al médico? En todo caso, lo importante es que cuando se experimente una reacción, esta remita: «Si hay un efecto duradero, que persista mucho tiempo, entonces sí se debe acudir al centro de salud. Pero no deben preocupar los síntomas transitorios», puntualiza Mariano Esteban, y explica que «la mayoría no durarán más de 48 horas». «Si una fiebre te dura 48 horas, hay que llamar al médico. Entre otras cosas porque puede ser algo más que coincida con la vacuna, pero que no tenga nada que ver con ella», añade Vicente Larraga.

¿Es normal la inflamación de ganglios? «El efecto más típico siempre es una reacción inflamatoria en el lugar donde se administra la dosis, y esto conlleva un ligero dolor en ese punto del brazo», recuerda Esteban. Pero esto explica también otro de los síntomas que pueden llegar a generar mucha intranquilidad: la inflamación de ganglios. Al respecto, Larraga dice que «los ganglios linfáticos son centros de activación del sistema inmunitario, por eso, si se está generando una reacción, es totalmente normal que ahí se produzca una inflamación».

¿Puede afectar a la menstruación? Sí. Es lo que ha descubierto la investigadora Laura Baena, gracias a su proyecto EVA, que intenta entender las alteraciones menstruales que pueden experimentar las mujeres al recibir la vacuna. La investigación se encuentra en desarrollo, pero cuenta con datos preliminares: «Se realizó una encuesta a la que contestaron más de 5.000 mujeres y un alto porcentaje de ellas manifestaron haber percibido trastornos». Se notifican reacciones como un aumento del sangrado, alteraciones en la duración del ciclo e incluso el sangrado en mujeres que ya tenían una menopausia establecida. «Seguramente se trate de un efecto secundario más, pero el problema es que muchas están acudiendo al médico por la preocupación. A algunas les hacen pruebas y a otras se las pone en duda. Todo esto es lo que se quiere evitar», manifiesta la investigadora.

¿Pone en riesgo el embarazo y la fertilidad? No. Baena afirma que «no debe ser una preocupación, no hay ninguna evidencia, por lo menos en la actualidad, de que pueda ser cierto». Efectivamente, «las vacunas se han tenido que implantar con mucha rapidez y esto no ha permitido que se describan todos los efectos secundarios», pero insiste en que «al menos los más graves están descritos». Los abortos espontáneos o la infertilidad no están incluidos, de lo contrario «no se estarían administrando y en este momento se administra incluso a mujeres embarazadas», aclara la investigadora. Por su parte, Larraga es contundente sobre la supuesta esterilización: «Ni hablar. Son vías fisiológicas distintas y no tiene por qué afectar a las células germinales de los varones, y a las de las mujeres sería más improbable todavía».

¿Es peor el segundo pinchazo? Por otra parte, se ha observado que, en general, el segundo pinchazo de las vacunas de ARN suele producir una reacción más potente. «La primera dosis es la primera vez que el sistema de una persona detecta el antígeno, que tiene una función buena, pero que al mismo tiempo es una molécula extraña y produce una reacción en el cuerpo. La segunda vez que la detecte, la reacción del sistema será siempre más intensa», explica Larraga.

¿Qué pasa si no se detecta ninguna reacción? ¿Significa que la vacuna no ha hecho efecto o que la protección es menor? Larraga explica que en ningún caso experimentar más efectos secundarios está asociado con desarrollar una mayor respuesta inmunitaria: «Una reacción intensa del sistema no significa que los efectos secundarios vayan a ser potentes. A algunas personas no les pasará». De manera que «nadie se tiene que preocupar si no tiene síntomas. Depende de cada persona», aclara el investigador.