Con miedo y cambio de planes, los turistas llegan a cuentagotas a Lisboa y el Algarve
SOCIEDAD
En la frontera con Salamanca no se ven aquellas largas colas de coches que se agolpaban en las zonas fronterizas en el mes de julio, con emigrantes y viajeros
10 jul 2021 . Actualizado a las 22:23 h.«Ahora tenemos un poco de miedo, porque escuchamos en las noticias que la situación empeoraba», dice Paula Valente tras cruzar la frontera y llegar este sábado a Portugal procedente de Francia por la frontera con Salamanca. Ella y su familia habían anulado hasta cuatro veces el viaje a Portugal en el último año. Ahora, con Portugal en toque de queda entre las 23.00 y las 5.00 horas y con fuertes restricciones como la necesidad de presentar un test negativo o un certificado covid para reservar hotel, muchos turistas cambian sus planes y algunos emigrantes reconocen que, tras mucho tiempo sin ver a su familia, ya no aguantan más y han decidido acudir al país luso para permanecer alguna semana.
En el puesto de turismo de la frontera hispanolusa de Vilar Formoso y Fuentes de Oñoro casi no llegan turistas para pedir información porque apenas hay tráfico. Nada que ver con aquellas largas colas de coches que se agolpaban en las zonas fronterizas en el mes de julio, sobre todo de emigrantes y turistas que se dirigían a Portugal.
«Esta zona de la frontera no tiene nada que ver con los otros años, menos personas y menos tránsito», reconoce Valente, que se dirige con su familia a la zona costera de Figueira da Foz para estar dos semanas.
Anulación de reservas
La alta incidencia de covid registrada en el último mes, sobre todo en el Algarve y en Lisboa, ha sido un duro golpe al turismo luso, que ha provocado un aluvión de anulaciones de reservas en estas áreas eminentemente turísticas.
Es el caso del emigrante portugués Jorge Amaral, que después de un largo viaje desde Suiza, país donde reside, acaba de llegar a la frontera de Vilar Formoso. Reconoce que ha anulado la reserva de una semana que tenía en un hotel de Portimão, en la región sureña del Algarve, debido a la situación epidemiológica de la zona sur. «Vamos a buscar otra cosa que no tenga incidencia tan elevada para pasar una semana más tranquila, porque tenía un hotel reservado en Portimão y lo tuve que anular», explica.
Necesidad de ver a la familia
Pedro Chaves, por contra, llegó a Portugal y, tras salir este sábado desde Suiza, se dirige con su familia a Lisboa porque necesita ver a los suyos. «Hace dos años que no estoy con mi familia en Portugal», reconoce, y, «aunque la situación está complicada, queremos ir».
Portugal ha endurecido las restricciones y exige ahora un test negativo o un certificado digital de vacunación para todos los que se alojen en cualquier hotel o alojamiento turístico del país y, además, será necesario mostrar estas pruebas durante el fin de semana en los restaurantes de las 60 zonas del país con mayor incidencia, entre ellas Lisboa, Oporto y Faro.
Los únicos que no tendrán que presentar ninguna prueba de este tipo serán los menores de 12 años y los propios empleados de los establecimientos referidos. El test, que, incluso, podrá ser adquirido en los supermercados portugueses, se lo podrán hacer los que se alojen en el hotel en el mismo momento de formalizar el ingreso.
Teletrabajo y otras medidas
En las zonas más afectadas por el covid, el teletrabajo ha vuelto a ser obligatorio y los espectáculos culturales, cafeterías y restaurantes cerrarán a las 22. 30 horas, mientras que el aforo máximo de celebraciones como bodas y bautizos será de un máximo del 25 %.
Como ocurre en España, los últimos datos no son tranquilizadores. El sábado, por cuarta jornada consecutiva, Portugal superó los 3.000 contagios diarios con un registro de 3.162 nuevos positivos, de los que el 44 % corresponden a la región de Lisboa y el 33 % se registraron en la región Norte.
Además, se incrementa la presión sanitaria, según los datos aportados por el Ejecutivo luso, puesto que continúan al alza los hospitalizados, hasta los 632 (15 más que ayer), de los que 144 se encuentran en cuidados intensivos (3 más).
La incidencia a catorce días permanece desde este sábado en los 272 contagiados por cada cien mil habitantes y el índice Rt., que mide el número de personas que contagia cada infectado, ahora es de 1,18.
El Gobierno de Portugal notificó este sábado seis nuevos muertos, por lo que desde que estalló la pandemia han fallecido en Portugal a causa de la covid 17.148 personas.