La primera máscara en desvelar la identidad del famoso que se ocultaba debajo fue Ángel, y bajo el disfraz emergió Paloma San Basilio. Ninguno de los investigadores acertó.
Pero sí lo hizo Ana Obregón en la siguiente, que se trató de Cactus. Bajo el disfraz estaba Eva Hache, como ella había asegurado.
Mask Singer consiguió ayer el récord de la segunda edición con una cuota de pantalla de 17,7 % rozan los 1,9 millones de espectadores.