En el 2020 fallecieron 492.930 personas en España, la cifra más alta desde que existen registros

MELCHOR SÁIZ-PARDO / ÁLVARO SOTO / LA VOZ REDACCIÓN

SOCIEDAD

Martina Miser

Las muertes se incrementaron un 17,7 % con respecto al año anterior en el conjunto del país, Galicia es la segunda comunidad con un menor exceso de mortalidad (un 5 %)

17 jun 2021 . Actualizado a las 16:53 h.

Las estadísticas de «Movimiento Natural de la Población» del INE del 2020, probablemente la recopilación de cifras más precisas sobre la situación demográfica del país, apuntan a que la pandemia habría provocado en España 75.305 muertos en el 2020, una cifra muy superior a los 50.837 fallecidos oficiales contabilizados a 31 de diciembre en las tablas del Ministerio de Sanidad.

De acuerdo con los datos publicados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística, el pasado año fallecieron en el país 492.930 personas (la cifra más alta del último siglo) frente a las 417.625 que murieron en 2019. Aunque el INE no especifica la causa de este aumento interanual del 17,7%, la única catástrofe que puede explicar esa sobre mortalidad es, obviamente, el coronavirus. Según reconoce de forma prácticamente unánime la comunidad científica, que desde el inicio ha venido denunciando que las cifras de fallecidos ofrecidas por el Gobierno central estaban claramente subestimadas, sobre todo por falta de datos del inicio de la pandemia.

El aumento del 17,7 % de la mortalidad es todavía más importante si se compara con la trayectoria que llevaba España, que entre el 2018 y el 2019 había reducido este parámetro en un 2,4%.

Que la sobremortalidad es debida prácticamente al 100% al virus lo demuestran las tablas del INE que destacan que los aumentos de las defunciones más fuertes tuvieron lugar respectivamente en la primera y segunda ola (la tercera y la cuarta ola ya tuvieron lugar en este 2021). Así las cosas, los aumentos de defunciones en marzo y abril fueron récords, con incrementos del 56,8% y 78,2%, respecto a los mismos meses del año anterior. Las tasas de mortalidad, revelan las estadísticas, volvieron a crecer lentamente a partir de agosto y, de nuevo se dispararon en octubre y noviembre, cuando el número de defunciones se incrementó un 21,0% y un 21,6%, respectivamente, respecto a lo ocurrido un año antes.

Como era de esperar, el mayor incremento de la mortalidad en ese ‘maldito' 2020 estuvo en los grupos de más edad y, particularmente, en términos porcentuales, en el grupo de 75 a 79 años, tanto en hombres (con un incremento del 25,0%) como en mujeres (+22,4%). Y aunque el covid no se ensañó, ni mucho menos, con los más pequeños, sus efectos incluso han llegado hasta la parte más baja de la tabla. Y es que la tasa de mortalidad infantil aumentó una centésima en el año 2020 y se situó en 2,66 defunciones por cada 1.000 nacidos vivos.

Las estadísticas publicadas hoy dan buena cuenta de los efectos devastadores del virus en la demografía española, hasta el punto de que por primera vez en décadas la esperanza de vida cayó en el 2020. El aumento de la mortalidad provocó que la esperanza de vida al nacimiento disminuyera en 1,24 años en el 2020; se situó en 82,34 años. Por sexo, el descenso fue mayor en los hombres (la esperanza de vida al nacimiento bajó 1,26 años hasta 79,60), que en las mujeres (con una reducción de 1,15 años, hasta 85,07).

Ningún territorio se salvó del fortísimo incremento de la mortalidad por el paso del virus, pero hubo diferencias. Los mayores incrementos se dieron en Comunidad de Madrid (41,2%), Castilla-La Mancha (32,3%), Castilla y León (26,0%) y Cataluña (23,5%). Galicia, en cambio, se sitúa al final de la tabla como la segunda comunidad (tras Canarias) con un menor exceso de mortalidad ya que solo aumentaron un 5 %. La tasa bruta de mortalidad se situó en el caso gallego en 12,2 defunciones por cada 1.000 habitantes, lo que deja a la comunidad con el sexto mayor dato

Natalidad

Al margen del efecto de la pandemia y como viene ocurriendo ya desde hace años, durante el 2020 cayó la natalidad: se registraron 339.206 nacimientos en España, lo que supuso un descenso del 5,9% respecto al año anterior (21.411 nacimientos menos). El indicador coyuntural de fecundidad (o número medio de hijos por mujer) se situó en 1,18 en 2020, en Galicia esta cifra baja hasta el 1,02. Es el valor más bajo desde el año 2000. La edad media a la maternidad se situó en 32,3 años en 2020, una décima más que el año anterior. En los últimos años se observa que la disminución del número de nacimientos se ve acompañada de un retraso en la edad de maternidad. Otro indicador que refleja el retraso en la maternidad es el número de nacimientos de madres de 40 o más años, que ha crecido un 41,1% en 10 años.

Crecimiento vegetativo

Como resultado del aumento fortísimo en el número de defunciones y de la disminución en el número de nacimientos, el crecimiento vegetativo de la población residente en España (es decir, la diferencia entre nacimientos de madre residente en España y defunciones de residentes en el país), fue negativo en 153.167 personas en el año 2020. Fue la mayor caída anual desde hace décadas.

Los saldos vegetativos más negativos se dieron en Castilla y León (22.543), Cataluña (21.659) y Galicia (17.610).

Matrimonios

El número de matrimonios se desplomó el 45,7 % en 2020 hasta los 90.416 como consecuencia de la pandemia de covid-19 y las uniones cayeron a la mitad en abril y mayo debido al confinamiento.

Según la encuesta del INE, en 2020 se celebraron 1,9 matrimonios por cada 1.000 habitantes, la tasa más baja desde 1976, y solo en abril y mayo los descensos en el número de uniones fueron superiores al 90 %.

La edad media al matrimonio mantuvo su tendencia creciente en 2020. En los hombres superó por primera vez los 40 años (40,4 años) y en las mujeres se situó en 37,4 años. Además, nueve de cada 10 matrimonios celebrados en 2020 fueron civiles (hubo 80.774).