Así te afectará la nueva ley de residuos

SOCIEDAD

CAPOTILLO

Habrá que pagar el plástico de la comida a domicilio y la hostelería deberá ofrecer a los clientes agua del grifo y no embotellada

18 may 2021 . Actualizado a las 21:20 h.

España afronta la década del Desarrollo Sostenible con un suspenso en materia de gestión residuos. De las 22 millones de toneladas de desechos que se generan cada año se reciclan alrededor de 8 millones. Confiar en la buena voluntad de los ciudadanos, las instituciones y las empresas ya no es una opción. El tiempo de la concienciación se ha agotado y comienza una nueva etapa basada en una estrategia que orbitará sobre dos ejes: la prohibición y la penalización.

El Consejo de Ministros aprobó ayer la ley de Residuos y Suelos Contaminados, una de las reformas más relevantes del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Esta legislación supone una declaración de guerra al plástico que se librará en todos los frentes. También en el terreno de lo económico ya que incluye dos nuevos impuestos con los que el Gobierno recaudará unos 1.300 millones de euros anualmente. Además, se penalizará el depósito en vertederos y la incineración. Estas son las medidas principales. 

Plástico a domicilio

A partir del 1 de enero del 2023 se cobrará al cliente una tasa (0,45 euros el kilo) por consumo de cualquier recipiente de plástico para contener bebida y comida para llevar.

Bares y restaurantes

Se obligará a la hostelería a ofrecer a sus clientes la posibilidad de agua del grifo en lugar de envasada.

Plásticos de un solo uso

Quedará prohibida la introducción en el mercado de productos de plástico como pajitas, bastoncillos, cubiertos, platos y cualquier producto hecho con plástico oxodegradable así como las microesferas de plástico de menos de 5 milímetros.

Botellas

En el 2025 se deben recoger separadamente el 77 % en peso respecto al introducido en el mercado, aumentando al 90 % en el 2029. El texto también contempla requisitos de diseño como tapas y tapones que han de permanecer unidos al recipiente y deberán contener un 25 % de plástico reciclado a partir del 2025 y todas las botellas de bebidas y un 30 % en el 2030. Además, la comercialización ha de reducirse un 50 % en el 2026 con respecto al 2022 y un 70 % para el 2030 con respecto al mismo año.

Alimentos

Deberá rebajarse un 20 % las pérdidas de alimentos a lo largo de las cadenas de producción y suministro. También tendrá que reducirse el 50 % de los alimentos desechados per cápita a nivel de hogar. Además, se prohíbe destruir excedentes no vendidos de textiles, juguetes o aparatos eléctricos y la suelta intencionada de globos.

Residuos orgánicos

Los municipios de más de 5.000 habitantes deberán recoger los biorresiduos domésticos a partir del 2022 y a partir del 2024 el resto de municipios.

Materiales

Los residuos de construcción y demolición deberán clasificarse por materiales, preferentemente en el origen a partir del 2022 y la demolición deberá ser selectiva a partir del 2024.

Gestión municipal

La reutilización y el reciclado de residuos municipales deberá experimentar un incremento del 5 % cada cinco años hasta alcanzar el 65 % en el 2035. La tasa de reciclado municipal en el 2018 (último año disponible) se sitúa en torno al 35 %, lejos del 50 % comunitario para el 2020.

Vertidos

El texto incluye un impuesto a la incineración y al depósito de residuos en vertedero ( de 1,5 a 40 euros por tonelada vertida) y se obliga a las entidades locales en el plazo de 2 años de desarrollar una tasa asociada a los servicios de gestión de residuos que prestan.