Madrid endurecerá las restricciones en cinco zonas cuando decaiga el estado de alarma

La Voz REDACCIÓN | EUROPA PRESS

SOCIEDAD

El viceconsejero de Salud Pública de Madrid y Plan Covid-19, Antonio Zapatero
El viceconsejero de Salud Pública de Madrid y Plan Covid-19, Antonio Zapatero C. de Luca. | Europa Press

Cataluña condiciona el toque de queda a los datos de la próxima semana y prepara un «decreto ley a la carta» para poder actuar rápido ante posibles brotes a partir del 9 de mayo

01 may 2021 . Actualizado a las 11:37 h.

La Comunidad de Madrid restringirá la movilidad y aumentará las restricciones en cinco zonas básicas de salud de la región con alta tasa de incidencia por la Covid-19 cuando decaiga el estado de alarma, el próximo día 9, para contener la propagación del virus.

El Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid (BOCM) publica este sábado la orden de la Consejería de Sanidad que recoge las limitaciones que estarán en vigor a las 00,00 horas del día 9, cuando decae el estado de alarma, hasta el 17 de mayo, cuando se revisará su posible continuidad en función de la situación epidemiológica.

En concreto, estas limitaciones afectarán en la capital a las zonas básicas de salud de Daroca, en Ciudad Lineal, y de Vicente Muzas, en Hortaleza, a las que se sumarán Las Ciudades, en la localidad de Getafe, Las Rozas, en el municipio de Las Rozas, y Reyes Católicos, en San Sebastián de los Reyes. Asimismo, la Consejería ha acordado dar traslado de esta decisión a la Abogacía de la Comunidad para que solicite la pertinente autorización judicial para la ratificación por parte del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad de Madrid, necesaria una vez que decae la declaración del estado de alarma.

La circulación por carretera y viales que transcurran o atraviesen los ámbitos territoriales que constituyen el objeto de la presente Orden estará permitida siempre y cuando tengan origen y destino fuera del mismo y se permite la circulación de personas residentes dentro de las zonas afectadas, siempre respetando las medidas de protección individual y colectiva establecidas por las autoridades sanitarias competentes, si bien se desaconseja a la población los desplazamientos y realización de actividades no imprescindibles. Asimismo, la asistencia a lugares de culto no podrá superar un tercio de su aforo y se deberá garantizar, en todo caso, la distancia mínima interpersonal de 1,5 metros y el uso de mascarilla; mientras que en el caso de los velatorios el máximo será de 15 personas en espacios al aire libre o diez en espacios cerrados, sean o no convivientes.

El cierre de establecimientos y locales comerciales no podrá superar las 22.00 horas, excepto os establecimientos farmacéuticos, médicos, veterinarios, de combustible para la automoción y otros considerados esenciales, mientras que en el caso de la hostelería se mantendrá el cierre a las 23.00 horas, con las actuales restricciones de aforo y prohibición de consumo en barra.

Pendientes del toque de queda en Cataluña

Por su parte, el consejero de Interior de la Generalitat de Cataluña, Miquel Sàmper, ha condicionado continuar, alargar o retirar el toque de queda a la evolución de los datos epidemiológicos y a la llegada de vacunas para la semana que viene.

En una entrevista de Rac1 recogida por Europa Press, ha dicho que el confinamiento nocturno ha demostrado ser eficaz, pero también que es una limitación de los derechos fundamentales, y que se debe «cambiar el paradigma y mirar hacia delante, porque ya hay vacuna». Preguntado por si desde el domingo 9 de mayo desaparecerá el confinamiento autonómico en Cataluña, respondido que «era una medida recogida por el estado de alarma, y todas ellas decaen», y ha asegurado que el próximo objetivo es ampliar los aforos.

Aun así, ha remarcado que el Govern está intentando dotarse de instrumentos jurídicos; concretamente, de «un decreto ley a la carta» que prevé que esté listo el próximo martes. De esta forma, el Govern tomar medidas «de forma rápida si fuera necesario» para proteger a la ciudadanía de un brote al caer el estado de alarma, con la vista puesta en el brote de coronavirus en India.

También están «explorando» la vía de la delegación competencial, que para él sería una solución cómoda y ágil para tomar decisiones, pero que sería solo para tenerla en el cajón, ha dicho textualmente. Ha añadido que, si el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) debe tomar decisiones que impliquen recortar derechos fundamentales a partir del final del estado de alarma, «se toman con tres o cuatro días de retraso».

Considera que el estado de alarma es un mecanismo ágil y rápido que permite decidir, pero que ya hay que dejar estas medidas tan restrictivas, que solo deberían estar en el cajón por si llega un brote muy importante, «que no debería llegar».

El riesgo que ve es que los tribunales no resolverán igual que en las primeras olas de contagios, porque ahora las administraciones cuentan con las vacunas y, antes de recortar derechos fundamentales, los tribunales pedirán que «aceleren» el proceso de vacunación. Además, teme que, una vez decaiga el estado de alarma, »determinados colectivos« impugnen ante el TSJC las decisiones que pueda tomar el Govern.