Investigadores califican de histórico el hallazgo de ADN neandertal en un yacimiento de Atapuerca

La Voz REDACCIÓN

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Científicos trabajando en la Galería de las Estatuas, en Atapuerca.
Científicos trabajando en la Galería de las Estatuas, en Atapuerca. Javier Trueba

El ADN recuperado está datado en aproximadamente 110.000 años

15 abr 2021 . Actualizado a las 20:00 h.

José María Bermúdez de Castro, Adrián Pablos y Nohemi Sala, del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH) forman parte del grupo de investigación español que ha participado en un artículo que se publicó este jueves en la revista Science sobre la recuperación de ADN nuclear de varios individuos neandertales, a partir del sedimento de dos cuevas siberianas y de la Galería de las Estatuas, situada en la Cueva Mayor de la sierra de Atapuerca (Burgos).

Esta publicación puede sin lugar a dudas calificarse de histórica, porque abre de par en par la puerta a futuras investigaciones. «Ya no serán necesarios los fósiles humanos para identificar a los moradores de una cueva prehistórica», afirman los autores.

En las excavaciones que se realizan desde el 2008 en la Galería de las Estatuas se han recuperado restos de los animales y sus herramientas líticas, además de una falange de pie indiscutiblemente neandertal. Debido a su total aislamiento, los sedimentos de este yacimiento han mantenido constantes sus condiciones de humedad y de temperatura y no han sufrido ninguna alteración por agentes naturales o por intervenciones humanas modernas.

La temperatura es un factor de primer orden en la conservación de la molécula de ADN: a mayor temperatura, mayor degradación de la molécula. Por eso, cuanto más al norte esté el yacimiento, mejor será la conservación. Siberia es el lugar ideal para recuperar ADN antiguo pero, por sus especiales características, la Galería de las Estatuas ofrecía una oportunidad única de obtener ADN procedente del sedimento en una región situada en latitudes templadas.

En los sedimentos de la Galería de las Estatuas se ha recuperado tanto ADN nuclear como ADN mitocondrial de varios individuos. El ADN del individuo más antiguo perteneció a un varón neandertal de raigambre antigua. Está datado en aproximadamente 110.000 años, pero su estirpe se originó antes, hace unos 130.000 años. La fecha que se ha calculado para esa «radiación», es decir el conjunto de líneas que se separan de un antepasado común, coincide con el inicio del último período cálido entre dos glaciaciones. Puede que la radiación y la mejoría climática tengan algo que ver, porque los grandes cambios ambientales producen grandes cambios ecológicos, que afectan a la evolución de muchas especies.

Algunos miles de años después la población neandertal de la Galería de las Estatuas es genéticamente diferente, perteneciente a una segunda radiación. De estos neandertales nuevos que sustituyeron a los antiguos se han identificado a lo largo de la secuencia estratigráfica el ADN de al menos cuatro mujeres. Las más modernas se datan en unos 80.000 años. El clima había cambiado para entonces, porque ya ha empezado el último ciclo glaciar. De nuevo la relación entre clima y evolución humana es muy sugerente.

Los neandertales de la última glaciación se conocen informalmente como «clásicos». Son los más estudiados y los que presentan los rasgos más exagerados. Además hay una característica de estos neandertales que es muy importante: tuvieron los cerebros más grandes de toda la evolución humana, más grandes incluso que los nuestros.

ADN nuclear y mitocondrial

El ADN mitocondrial se encuentra en las mitocondrias, que son unos orgánulos que producen la energía de la célula. Es más fácil secuenciar completo el ADN mitocondrial que el ADN nuclear porque hay muchas mitocondrias en cada una de las células del cuerpo, y porque su longitud es de solo 16.000 pares de bases (las «letras» de la secuencia de ADN).

El ADN nuclear es el de los cromosomas. Solo se encuentra en el núcleo celular y es mucho más largo: 3.200 millones de pares de bases. El ADN mitocondrial se transmite solo por vía materna, mientras que el ADN nuclear se transmite por vía paterna y materna. Estas razones hacen que el ADN nuclear sea mucho más informativo que el mitocondrial, pero al mismo tiempo enormemente más difícil (y costoso) de secuenciar.