Seis concellos estarán este viernes en máximas restricciones

Tamara Montero
Tamara Montero SANTIAGO / LA VOZ

SOCIEDAD

XOAN A. SOLER

Se unen a Boborás, A Mezquita y A Pobra de Brollón los municipios de Pontecesures, Paradela y Vilardevós. Soutomaior pasa a nivel alto, en el que quedarán una docena de municipios y del que sale Ponteceso

10 mar 2021 . Actualizado a las 00:32 h.

Seis concellos estarán este viernes en restricciones máximas tras la reunión del comité clínico, que ha analizado la evolución del coronavirus en Galicia este martes. A los municipios de Boborás, A Pobra de Brollón y A Mezquita se unirán Paradela, Pontecesures y Vilardevós ante incidencias acumuladas a siete días que indican un crecimiento de la transmisión acelerado. En los tres casos, la incidencia acumulada a siete días está por encima del rango de los 250 casos por cien mil habitantes, lo que indica un crecimiento acelerado en la transmisión.

El viernes, cuando entrarán en vigor estas medidas, la hostelería deberá cerrar en los tres municipios y solo podrá servir a domicilio y para recoger. Las reuniones solo podrán ser entre personas convivientes y además pasarán a tener un cierre perimetral individual, es decir, solo se podrá entrar y salir del municipio para actividades justificadas, como laborales, sanitarias o educativas.

Sale de esta situación el concello de Soutomaior, que pasa a tener restricciones de nivel alto, lo que significa que la hostelería reabrirá aunque solo podrá servir en terrazas y con un aforo máximo del 50  % y que las reuniones pasarán a ser de un máximo de 4 personas no convivientes.

Soutomaior también dejará de tener cierre perimetral, con lo que su movilidad estará restringida a partir del viernes a los concellos que están en su mismo nivel de restricciones. Se mantiene en esta situación el concello de Arteixo, así como Miño y Sobrado, los tres en el área sanitaria de A Coruña. En nivel alto de restricciones continuarán también Ponte Caldelas, Vilanova de Arousa y Cambados, los tres, junto con Soutomaior, en el área sanitaria de Pontevedra, así como Mos, en el área sanitaria de Vigo; Cariño y Mugardos en la de Ferrol, y Guitiriz y Lourenzá en la de Lugo, a la que se incorpora ahora Chantada, con una incidencia a siete días superior a 125 casos por cien mil.

El resto de municipios estarán en nivel medio de restricciones, entre ellos el de Ponteceso, que abandonará el viernes el nivel alto de restricciones, lo que permite movilidad entre ellos. La hostelería podrá funcionar con un aforo del 30 % en el interior y 50 % en la terraza y se permiten las reuniones de hasta cuatro personas no convivientes. 

Este miércoles, el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, comparecerá con su equipo para dar más datos sobre la evolución epidemiológica de la comunidad y sobre las nuevas restricciones. 

Las hospitalizaciones por coronavirus en Galicia regresan a niveles de enero

Con 77 pacientes en críticos, es la menor cifra desde el día 13 de enero. En planta hay 292 ingresados, el número más bajo desde principios de año

Tamara Montero

Es el último peldaño que hay que bajar en la desescalada y la presión asistencial comienza a ceder. La actualización de datos del Sergas sobre el coronavirus deja, después del repunte que suele darse los lunes (ya que los fines de semana se dan pocas altas) las cifras más bajas de ingresos desde el mes de enero. Hay 292 personas en plantas covid, 27 menos que en el balance anterior, una cifra que no era tan baja desde principios de año.

Cede la carga asistencial principalmente en las plantas, mientras que en críticos la desescalada está siendo más lenta. Hay 77 personas ingresadas en cuidados intensivos, dos menos, lo que retrotrae los niveles a mediados de enero. No había una cifra tan baja de pacientes en las ucis desde el informe del 13 de enero.

Si las hospitalizaciones están volviendo a niveles de enero, la transmisión cae hasta cifras de agosto. Hay 3.422 personas pasando la infección en Galicia, el menor número desde el 29 de agosto. De hecho, la incidencia a 14 días cayó por primera vez por debajo de cien casos por cien mil desde agosto, y lo hace en un momento en el que la tasa de contagio a 7 días también tiende a la baja, por lo que la transmisión sigue reduciéndose ininterrumpidamente desde el 29 de enero. 

El mapa de incidencia municipal que publica diariamente el Sergas muestra que cuatro concellos (Paradela, Boborás, A Mezquita y a Pobra de Brollón) mantienen incidencias a 14 días por encima de los 500 casos por cien mil habitantes, mientras que otros trece municipios tienen tasas consideradas de alto riesgo, por encima de los 250 casos por cien mil. Se trata de Aranga, Arteixo, Miño y Sobrado, en el área sanitaria de A Coruña; Moeche y Cariño en la de Ferrol; Guitiriz y Lourenzá en el área sanitaria de Lugo; Leiro y Vilardevós, en la de Ourense; Pontecesures en el área sanitaria de Santiago, y Ponte Caldelas y Soutomaior en la de Pontevedra.

Para actualizar el mapa de la desescalada, algo que se producirá en la reunión del comité clínico de esta tarde, no solo se tiene en cuenta la incidencia a 14 días. La tasa de contagio a 7 días está sirviendo para tomar medidas de manera adelantada cuando se observan incrementos en la transmisión y la presión asistencial, así como una amplia batería de indicadores epidemiológicos, se analizan concello a concello para tomar decisiones. 

Lo que sí repunta ligeramente es el número de nuevos casos, 152 contagios entre las 18 horas del domingo y las 18 horas del lunes, aunque es un incremento normal, pues los lunes la cifra de positivos suele reducirse por el efecto del fin de semana en la estadística y de hecho, está en valores similares a los que se dieron la semana pasada.

La tasa de positividad también continúa en niveles óptimos. Hasta las 18 horas del lunes el 2 % de las PCR realizadas fueron positivas, con lo que Galicia se mantiene por debajo de la tasa ideal del 3 % para mantener la transmisión bajo control. La semana pasada, el promedio de positividad, según los datos que publica diariamente el Ministerio de Sanidad, fue en Galicia del 1,87 %.

El balance de fallecidos sigue aumentando. El Sergas comunicó a última hora del martes cinco fallecimientos más, con lo que desde el inicio de la pandemia han muerto en Galicia 2.283 personas. Las tres muertes corresponden las jornadas del 8 de marzo (cuatro fallecimientos) y del 9 de marzo (un fallecimiento).

El covid devuelve a Galicia a agosto, pero A Coruña sigue en enero

El área sanitaria sigue concentrando prácticamente el 40 % de los casos críticos, los hospitalizados y los nuevos contagios de toda la comunidad gallega

R.D.

El covid-19 va a otro ritmo en el área sanitaria de A Coruña y Cee, la más castigada de Galicia. Tras la concesión de 107 altas médicas, en la demarcación bajan despacio los casos activos, este martes 1.211, solo 36 menos que ayer. Tras dos días de ligeros repuntes, disminuye levemente el número total de personas hospitalizadas, que ha pasado de 143 a 139, pero en las ucis del área sanitarias siguen ingresadas 30 personas en estado crítico.

Así, los datos sitúan a la demarcación coruñesa, donde están cuatro de cada diez enfermos críticos de la comunidad y el 37 % de los hospitalizados, todavía en las cifras que se registraban hacia el 13 de enero, mientras que en el conjunto de Galicia el panorama es similar al del mes de agosto, anterior a la tercera ola. 

De los 139 enfermos hospitalizados, 132 están en el Chuac (3 menos), que tiene a 26 en la uci (1 menos) y 106 en planta (2 menos). En el HM Modelo tienen hoy a una persona más en cuidados intensivos, y son ya 3, mientras que en planta están la mitad que ayer, 2. En el Quirón no se han producido cambios, continúan con 1 en uci y 1 en planta. En sus casas siguen 1.072 afectados, 32 menos que en la jornada anterior. 

Ha empeorado también con respecto al lunes el número de nuevos contagios diarios, que hoy son prácticamente el doble, 71. De ellos, 45, el 38 % de las detectados en Galicia, fueron diagnosticados en las 1.654 pruebas PCR practicadas en 24 horas en el área sanitaria. El  índice de positividad sube algo más de un punto y se sitúa en el 2,7 %, aunque sigue siendo prácticamente la mitad del umbral que marca la OMS para comenzar a dar por controlada la pandemia.

El 6,4 % de los pacientes ingresados en el CHUS son por covid

En el área sanitaria de Santiago se descubrieron 13 positivos en 24 horas y se dieron 20 altas a personas curadas de la nueva enfermedad

 

El CHUS (Complexo Hospitalario Universitario de Santiago) inició la jornada con 791 pacientes ingresados, informa la gerencia del área sanitaria. El 6,4 % de sus camas están ocupadas por 51 pacientes con covid-19, una cifra superior a la media indicada ayer por el Ministerio de Sanidad para los hospitales gallegos. Es la cifra de pacientes internados con la nueva enfermedad más baja de este año, pues en febrero tuvo hasta 194 camas ocupadas para su asistencia. La evolución favorable de la situación permite continuar con el incremento de la actividad quirúrgica, iniciada días pasados: hoy están programadas 172 intervenciones en los quirófanos del CHUS, y a mayores las operaciones urgentes, según datos de la gerencia. El Sergas (Servizo Galego de Saúde) indica que el Hospital Clínico de Santiago tiene 7 pacientes ingresados en su uci covid; y 44 más en otras unidades de hospitalización convencional. En HM Rosaleda hay otro paciente ingresado más.

En la última jornada, en los 46 municipios del área sanitaria compostelana se descubrieron 13 nuevos positivos y se dieron 20 altas a personas curadas de covid-19. Así, una jornada más, y van 34 consecutivas, hay más personas recuperadas que nuevas infectadas. En la última jornada se han efectuado 619 pruebas PCR y 305 serológicas para buscar nuevos casos asintomáticos.

 Descienden los nuevos contagios

Los nuevos contagios detectados por pruebas diagnósticas mantienen la tendencia descendente en los 25 municipios del área metropolitana de Santiago; aunque la capital el Sergas facilita hoy las cifras de 59 nuevos casos descubiertos en los últimos 14 días y 23 en la última semana, ligeramente superiores a los indicados ayer (58 y 20, respectivamente).

Los municipios de Boqueixón, Dodro, Frades, Toques y Santiso llevan dos semanas o más libres de covid-19. Además, llevan también al menos una semana sin nuevos casos detectados en A Baña, Negreira, Oroso, Rois, Trazo y Val do Dubra. La excepción es O Pino, que ayer no tenía casos nuevos en los últimos 7 días y hoy el Sergas apunta que se han descubierto entre 1 y 9; en esas cifras inferiores a no concreta el dato exacto. Teo, Ordes y Padrón mantienen el descenso de casos; y en Ames se indican ahora 16 nuevos casos la última semana, uno más que ayer, pero su incidencia se sitúa entre los municipios con 25 y 75 nuevos casos por 100.000 habitantes, entre los más bajos.

Ocho municipios de A Mariña llevan «libres» de coronavirus al menos dos semanas

La incidencia acumulada desciende en Viveiro, donde continúan activos entre 1 y 9 casos

Lucía Rey

Ocho municipios de A Mariña llevan al menos dos semanas sin registrar nuevos casos de coronavirus. Se trata de O Vicedo, OurolXove, Cervo, Foz, Barreiros, Alfoz y Trabada. Y hay otros tres, Ribadeo, O Valadouro y Mondoñedo, que están «libres» de covid-19 desde hace al menos siete días. Estas son dos de las afirmaciones que se extraen del mapa covid-19 actualizado a primera hora de este martes por el Servizo Galego de Saúde en función de los datos registrados el lunes a las seis de la tarde.

El boletín da cuenta de que en Lourenzá se han diagnosticado casos nuevos en las últimas horas, y ahora vuelve a tener activos entre 1 y 9. Esa circunstancia ha provocado un nuevo incremento de la Incidencia Acumulada (IA), es decir, de la proyección del número de casos por cada cien mil habitantes. En el municipio laurentino la IA a 14 días se sitúa de nuevo entre 250 y 500 (el lunes había bajado a 150-250). 

Según el Sergas, la IA sí desciende en Viveiro, donde entre 1 y 9 vecinos tienen todavía activa la enfermedad del coronavirus. A siete días, la tasa está entre 10 y 25, y a 14, entre 25 y 50. Datos sensiblemente mejores a los de jornadas anteriores. Idénticas estadísticas tiene en este momento Burela

A Pontenova apenas sufre variaciones en las últimas 24 horas, con entre 1 y 9 casos activos, y una IA de entre 25 y 75 a 7 días, y de entre 25 a 50 a 14 días. 

Los datos hospitalarios tampoco sufren cambios, y en el Hospital Público da Mariña, en Burela, reciben actualmente asistencia en la planta covid dos pacientes. En el Hospital Universitario Lucus Augusti (HULA), la situación mejora tanto en la unidad de cuidados intensivos, que baja de 8 a 6 pacientes con coronavirus, como en planta, que pasa de 16 a 14. El hospital de Monforte también contabiliza un ingreso menos, al bajar de 7 a 6.

Desde el inicio de la pandemia, según datos del Sergas, en la área sanitaria de Lugo, A Mariña y Monforte han contraído el coronavirus un total de 11.803 personas. De ellas, 282 tienen la enfermedad activa, 22 están hospitalizadas y 6 en la uci. Han fallecido debido al covid-19 un total de 208 personas. Y en las últimas 24 horas han sido diagnosticados mediante PCR 13 nuevos casos. 

Los positivos en escuelas infantiles bajan a niveles similares al mes de septiembre

La semana cerró con solo ocho casos activos en centros de atención a niños de cero a tres años

M. P. V.

La bajada de la incidencia del covid-19 en los centros educativos de Galicia se está notando especialmente en los que atienden a los pequeños de cero a tres años. Y es que las cifras de casos activos en las escuelas infantiles gallegas se sitúan en niveles similares a los del inicio del curso. La semana terminó con ocho personas infectadas en este ámbito. Hay que remontarse al 16 de septiembre para encontrar una jornada con menos casos activos.

La reducción ha sido rápida en los últimos días. A finales de febrero, el número de contagiados entre el alumnado y el personal de las escuelas infantiles alcanzaba los 42. Esa cifra se ha reducido a una sexta parte en apenas una semana.

La caída también es considerable si se toma como referencia el pico de esta tercera ola de contagios, que en el caso de los centros infantiles, y según datos de la Consellería de Política Social, se registró a finales de enero, en una jornada con 101 positivos, 30 aulas en cuarentena y nueve centros cerrados.

Al cierre de esta semana, sin embargo, no había ninguna escuela clausurada y solo estaban sin actividad cuatro aulas. Además, no había ningún caso activo en centros de las áreas sanitarias de Lugo, Ourense y Ferrol.

La hostelería de Galicia plantea que los bares cierren a las ocho y los restaurantes a las nueve y media

Hoy hubo una nueva reunión entre los representantes del sector y la Xunta y se abordó qué ocurrirá en Semana Santa

María Hermida

El sector hostelero gallego y la Xunta volvieron a sentarse a hablar hoy. Lo hicieron con dos asuntos primordiales sobre la mesa: la necesidad de avanzar en la desescalada de forma inminente y, también, lo que va a pasar con el sector hostelero en una de sus antiguas fechas claves, la Semana Santa. A la mesa de diálogo se sumaron, por parte del Gobierno autonómico, la conselleira de Emprego, María Jesús Lorenzana, el titular de Sanidade, Julio García Comesaña y Alfonso Rueda, vicepresidente primero y conselleiro de Turismo. Por parte del sector, hubo representantes del clúster y de las asociaciones de hoteleros y hosteleros de las distintas provincias.

El sector puso sobre la mesa la necesidad de ampliar los horarios de cierre de bares y restaurantes. Se planteó que los bares puedan estar abiertos hasta las 20.00 horas y que los restaurantes puedan atender hasta las 21.30, ya que ahora solamente pueden trabajar hasta las 18.00 horas en toda la comunidad (salvo en los municipios donde la hostelería sigue cerrada al público) y con un plan de seguridad que incluye numerosos requisitos. ¿Por qué esta diferencia entre unos y otros? Según explicaron desde el sector, porque se considera que en la restauración es más fácil controlar los aforos, ya que casi siempre funciona con reservas. Aún así, los hosteleros quedaron de pulir la propuesta y pasarla luego a la Xunta. Representantes de las asociaciones señalan que lo ideal sería incluso ir más allá de ese horario, pero que de momento lo ven complicado porque, aunque la situación epidemiológica evoluciona favorablemente, no percibieron que las autoridades autonómicas estén dispuestas a ir deprisa en la desescalada. 

¿Cuándo se podrían ampliar los horarios hosteleros? Al sector le gustaría que fuese cuanto antes, porque sigue sin parecerle razonable que solo se pueda trabajar hasta las 18.00 horas. Pero falta que desde el Gobierno autonómico opinen lo mismo. De momento, no se concretan fechas. «Ojalá sea cuanto antes y cuanto más tiempo mejor. Ojo, con sensatez y cumpliendo las normas, pero queremos trabajar. ¿Si podemos hacerlo hasta las 18.00, por qué no a partir de esa hora?», opina César Ballesteros, que representa a los hosteleros de la provincia de la provincia de Pontevedra. 

La Semana Santa

¿Qué pasa con la Semana Santa? En este caso, todo está a expensas de las normas de aplicación estatal que se acaben ratificando. Los hosteleros coinciden con la Xunta en que lo mejor sería esperar a fechas más cercanas a esa semana para tomar decisiones con mayor certeza. Aún así, hoy el sector planteó la posibilidad de que en esos días se pudiese trabajar hasta más tarde. Incluso se aventuró con la idea de que la hostelería pudiese funcionar más allá de las 22.00 horas en unas fechas tan señaladas, pero el propio sector reconoce que la Xunta no lo ve viable, debido al toque de queda y a que hay que seguir en vilo por la situación epidemiológica. Nadie quiere «hacer un efecto llamada y que la situación empeore», señalan los hosteleros. Mañana es un día clave, dado que se celebra la interterritorial en la que se ratificará lo que harán las comunidades en Semana Santa. Y el objetivo de los hosteleros gallegos es que, tras la reunión de hoy, la Xunta tenga claras cuáles son sus prioridades e inquietudes. 

El sector turístico gallego asume una Semana Santa sin reservas ni ingresos

Piden no repetir medidas como las de Navidad para evitar nuevos cierres. Galicia no alcanzó los dos millones de viajeros en todo el año 2020

mónica p. vilar

El sector turístico gallego mira hacia la próxima Semana Santa con más miedo que esperanza. Las celebraciones que este año arrancarán el 28 de marzo con el Domingo de Ramos y se cerrarán el 5 de abril con el Lunes de Pascua tienen todas las papeletas para parecerse más a las del año pasado, en pleno confinamiento domiciliario de la población, que al motor económico que suponen en condiciones normales. Por lo general, la principal incertidumbre es si las previsiones meteorológicas llevarán en volandas al sector, permitiendo niveles de ocupación entre el 85 y el 95 %, como ocurrió en el año 2019 cuando el tiempo seco y soleado, mejor que en el resto de España, espoleó las reservas de última hora, o si, por el contrario, lastrarán los resultados, como sucedió en el 2018 cuando la suma de nieve, lluvias, una borrasca profunda y hasta una ciclogénesis explosiva dejó niveles de ocupación de entre el 65 y el 80 %.

Esas cifras, consideradas en cualquier otro momento por debajo de las expectativas, serían este año un auténtico éxito, tras meses de crisis turística por las restricciones impuestas por la pandemia de coronavirus. Sin embargo, en el sector prefieren ser cautos. «A miña esperanza non é a Semana Santa, a miña esperanza é que se liberen as ucis. Quixera ser positivo, oxalá no mes e medio que queda muden as cousas, pero aínda estamos nunha situación anómala», analiza el presidente del Clúster Turismo de Galicia, Cesáreo Pardal. La mente del sector al que representa, dice, está puesta en trabajar «a un 80, 90 ou incluso a un 100 %» en el verano. «De que nos vale poder saír en Semana Santa se se repite o que sucedeu en Nadal? De que nos vale saír tres días se logo temos que volver pechar meses?», se pregunta Pardal, para quien los esfuerzos deben concentrarse en mantener vivo el tejido empresarial turístico en los meses que quedan hasta la temporada de verano, reclamando a las administraciones más ayudas y que no compitan entre ellas.

El temor a un aumento de contagios como el derivado de la flexibilización de restricciones de Navidad se repite en boca de otros representantes del mundo turístico. «Que pasa, que non escarmentamos?» dice el más vehemente, Cheché Real, presidente de los hosteleros de Lugo. «Non hai nada que celebrar esta Semana Santa. O que hai que facer é poñerse a cuberto. Logo os primeiros que temos que pechar somos nós», afirma.

Francisco Almuíña, presidente de la Federación Galega de Turismo Rural (Fegatur), reconoce que le haría ilusión que para entonces estuviese permitida la movilidad al menos para los gallegos dentro de la comunidad, pero también aboga por la prudencia. «Facer as cousas atropeladamente non dá bo resultado. É mellor ser cautos, esperar un pouco, e non estragar por Semana Santa o resto do ano. Se duro é esperar, máis duro é ter que volver levantarse», reflexiona.

«Traballar na Semana Santa sería un auténtico milagre», apunta Juan Rivadulla, presidente de la Asociación Gallega de Agencias de Viajes (Agavi), uno de los negocios turísticos que peor lo han pasado desde que explotó la pandemia. «Cada vez que chegaba un punto álxido, todos a pensar en salvar que se a Semana Santa, que se o verán, que se o Nadal... e de cada vez foi peor, onda tras onda», estima, asegurando que todos en el sector tienen asumido que la primera mitad del año será «catastrófica». «Como moito, poderá empezar a haber un repunte de peregrinacións para a primavera, se o ritmo de vacinación vai ben en Europa en xeral», vaticina.

Otro de los colectivos más golpeados por la crisis, el de los guías turísticos, también ha borrado la Semana Santa de sus previsiones. «Para nós o primeiro semestre do ano está cancelado, e iso que a nosa tempada alta non é xullo e agosto, senón a primavera e o outono, co turismo de grupos, os cruceiros, o imserso... Pero espero que non se repita a mesma barbaridade que en Nadal. É mellor esperar, saír desta e empezar de cero, que intentar parchear e cargarnos a tempada de verán e de outono», afirma Tommi Alvarellos, presidente de la Asociación Profesional de Guías de Turismo de Galicia.

De superar los cinco millones de viajeros en el 2019 a no alcanzar los dos millones en el 2020

Un año para olvidar. Así fue el 2020, también en lo que toca a las cifras del turismo. Según la encuesta de ocupación hotelera y extrahotelera del Instituto Nacional de Estadística (INE), los alojamientos gallegos sumaron 4,7 millones de pernoctaciones. El año anterior se habían superado los 10,9. Con todo, la caída en Galicia, del 57 %, es menor que en el conjunto de España, donde el desplome fue del 69 %.

Agosto fue el mes con mejores registros, alcanzando 1.417.717 pernoctas, un 36,4 % menos que en el mismo mes del 2019.

Según los mismos datos del INE, los hoteles gallegos recibieron a casi 1.652.000 viajeros. Los apartamentos turísticos (no se computan aquí las viviendas de uso turístico) acogieron a casi 89.500; los alojamientos de turismo rural, a más de 77.500; y los cámpings a algo más de 173.000. En total, estas cuatro modalidades de alojamiento sumaron poco más de 1.992.000 viajeros en doce meses. En el 2019, entre las cuatro habían superado los cinco millones (5.095.679), lo que supone una reducción del 61 %.

El dato positivo viene de la mano de la estancia media, que subió ligeramente. Así, quienes escogieron alojarse establecimientos de turismo gallegos en el 2020 permanecieron una media de 2,46 días, frente a los 2,32 del 2019 (un 6,03 % más).

Las cifras de peregrinos tampoco fueron alentadoras. A espera del informe oficial del 2020 de la Oficina del Peregrino, la suma de los datos mensuales indica que llegaron a Santiago 53.903 peregrinos, frente a los casi 347.600 del año anterior, lo que representa un descenso del 84,5 %.

 

El Ministerio de Sanidad pedirá a las comunidades cerrar durante el puente de San José y Semana Santa

Ayuso se abre ahora a aceptar el cierre perimetral de Madrid para buscar el consenso en el consejo interterritorial de este miércoles. Vota y opina: ¿Debe imponer Sánchez a Ayuso el cierre de Madrid?

Álvaro Soto

El Ministerio de Sanidad pedirá a las comunidades «no bajar el nivel de alerta» desde las dos semanas previas a Semana Santa, lo que incluiría, por tanto, el cierre durante el puente de San José, que comienza el viernes 19 de marzo e incluye el fin de semana del 20 y el 21. El Gobierno central llevará esta propuesta al consejo interterritorial que se celebrará este miércoles. El consenso sobre las restricciones para todos estos festivos parece estar más cerca. La comunidad más reacia a establecer un plan común, Madrid, se ha abierto a asumir las recomendaciones que se adopten en el cónclave. Eso sí, si acaba aceptando, no lo hará de buena gana. «Yo cumplo escrupulosamente las normas establecidas y la ley porque no soy ni independentista ni arribista, pero me repugna cerrar por cerrar sin informes sanitarios. Eso es un abuso de poder», ha asegurado la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, en La Sexta.

Madrid se ha quedado prácticamente sola en su postura de defender la apertura total de las comunidades durante la Semana Santa. Comunidades socialistas, nacionalistas y también populares ya manifestaron en el consejo interterritorial del pasado miércoles, y lo han seguido haciendo durante esta semana, su predisposición a dar por bueno el plan del Ministerio de Sanidad, que implica cerrar las autonomías y evitar los viajes innecesarios. Son las dos medidas más importantes que propondrá a los consejeros la ministra Carolina Darias, toda vez que Sanidad quiere que el acuerdo sea de mínimos y que las comunidades tengan cierto margen para decidir, por ejemplo, si permiten o no la movilidad dentro de sus territorios.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha insistido este martes en que el cierre debe ser «la última opción a tomar después de haberlo intentado todo» y ha pedido que antes de hacerlo se demuestre por qué es acertado hacerlo. «La pandemia lo que ha hecho es demostrar que hay dos maneras de gestionar. Una es el atropello sistemático de derechos y libertades fundamentales, el cierre de regiones enteras sin informes sanitarios y la clausura por decreto de miles de negocios», ha declarado en su intervención al recibir el premio Sociedad Civil de la Fundación Civismo en la Real Casa de Correos. Para Ayuso, se ha promovido una «madrileñofobia nunca vista hasta el momento» de forma «desleal e injusta». A su parecer, siempre han puesto el foco durante toda la crisis en Madrid y en los madrileños y han desconfiado de sus cifras «cuando las cosas iban bien».

 

 

El Gobierno de Ayuso jugará su última baza en el consejo interterritorial para tratar de convencer al resto de las autonomías. «Madrid puede seguir operando con las normas que le están funcionando relativamente bien y siempre llamando a la prudencia porque es algo que no hemos dejado de hacer en ningún momento», ha afirmado la presidenta. El resto de las autonomías, más allá de algunas quejas (como la de la Xunta de Galicia o la del Gobierno Andalucía) por el modo en que el ministerio está llevando la negociación, incluida la filtración de un acuerdo que no era tal el pasado jueves, trabajan con la idea de un cierre perimetral durante los próximos períodos festivos, San José y Semana Santa. Cataluña, la Comunidad Valenciana, Murcia, Aragón, Baleares, Castilla-La Mancha o La Rioja se han pronunciado tajantemente en esta dirección. Y en la práctica, si todas las comunidades acuerdan que no se pueda abandonar su territorio, la decisión de Madrid de mantener abierto su territorio sería solo simbólica. Ahora mismo, solo están abiertas Madrid, Extremadura, Canarias y Baleares.

Darias ha pedido en los últimos días un acuerdo de mínimos entre las regiones cuanto antes para que los ciudadanos sepan a qué atenerse en las próximas festividades. También ha argumentado que las decisiones del Consejo Interterritorial son de obligado cumplimiento, aunque en realidad, son únicamente recomendaciones. «Voy a luchar que haya consenso también en la Comunidad de Madrid. Es necesario que en el próximo Consejo Interterritorial [este miércoles] lleguemos a consensos. Lo que se apruebe en el Consejo es de obligado cumplimiento y es una continuación del decreto de alarma. Espero y deseo que el consenso sea posible», dijo la ministra el martes.

Feijoo invoca una conferencia de presidentes para ver cómo gestionar la pandemia tras el estado de alarma

Alberto Núñez Feijoo, en el pleno del Parlamento
Alberto Núñez Feijoo, en el pleno del Parlamento Sandra Alonso

El presidente de la Xunta supedita la reunión con los líderes de la oposición a que primero se perfilen en el Parlamento los acuerdos en materia de reactivación

Domingos Sampedro

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, invocó este martes la conveniencia de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, convoque una conferencia de presidentes con los representantes autonómicos para «concretar e administrar» la gestión de la pandemia de coronavirus cuando dentro de unas semanas, dijo, decaiga la declaración del estado de alarma, vigente hasta el próximo 9 de mayo. En vísperas de su viaje a Madrid, donde tiene previsto reunirse con el ministro de Transportes, José Luis Ábalos, Feijoo consideró «razoable» solicitar un encuentro del órgano que agrupa al Gobierno con los mandatario autonómicos para analizar cómo se puede trabajar «fóra do estado de alarma e sen vacinas suficientes para a inmunidade grupal».

El jefe del Gobierno gallego lanzó esta propuesta en la sesión de control del Parlamento, adelantada a este martes debido a su viaje a Madrid, tras ser emplazado por el secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero, a reunirse a las fuerzas de la oposición. El dirigente socialista reprochó que en los seis meses que van de legislatura Feijoo no mantuvo «nin unha soa chamada nin unha soa reunión» con el dirigente socialista y lo emplazó a hacer un gesto de este tipo para perfilar un gran acuerdo para la reconstrucción económica de Galicia.

El número uno del PPdeG mantuvo viva la posibilidad de la reunión con los representantes de la oposición para abordar los efectos de la pandemia, pero la condicionó a que primero se trabaje en el seno de la comisión especial de reactivación económica creada en el Parlamento para valorar las diferentes propuestas y verificar que si es posible que PP, BNG y PSdeG perfilen algún tipo de acuerdo. Es más, Feijoo también recordó que solo recibió una carta de la portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, solicitando dicho encuentro. «De vostede non», dijo, tras remarcar que Caballero sí hizo declaraciones de prensa apelando al diálogo o a la representación de la oposición, así que le recomendó al PSdeG y al BNG que lo mejor sería ponerse de acuerdo antes en el momento y «no formato oportuno» para mantener la reunión.

«Doulle a posibilidade de elixir o día, o formato e o lugar», replicó Caballero, para la cita con la oposición, si bien Feijoo tiró de ironía para matizar que esto no era una película del Oeste para elegir día, hora y lugar para batirse en duelo, sino que ya está constituida una comisión parlamentaria de reactivación económica, que celebró 24 sesiones y por la que desfilaron 49 comparecientes, en la que se puede canalizar el diálogo político con la oposición. El jefe del Ejecutivo insistió en que «parece razoable avanzar en nesa comisión para ver si é posible chegar a algún acordo», y cerrarlo después en una reunión con los líderes políticos.

Por tanto, Feijoo no cerró la puerta a la cita con la oposición, pero sí le puso condiciones, lo que desató una crítica incisiva de Caballero contra el Gobierno gallego, al que acusó de haber fracasado en la estrategia de «salvar o Nadal» que agravó la tercera ola, de mantener el «escurantismo» sobre los 108 proyectos que promueve la Xunta a los fondos europeos, a los que se refirió como «fake news», y de estar más preocupado por la estrategia de Pablo Casado o por los papeles de Bárcenas que por la reactivación.

«Está claro que quer tender a man ao PP», respondió Feijoo con sarcasmo, en medio de sonora carcajada en las filas populares, antes de reparar en el «alto grao de autoestima» del que hacía gala el líder del PSdeG, al observar que el PP es el partido que está en crisis en Galicia, mientras ve al PSdeG «mellor que nunca». Y acto seguido volvió al inicio, llamando a tomarse el Parlamento como un «paripé» y a dejar que concluyan sus trabajos la comisión constituida por voluntad de todos, por la que pasaron medio centenar de expertos a hacer propuestas, y que está pendiente de elevar al pleno un dictamen de conclusiones.