Las personas con problemas de memoria y de pensamiento son proclives a tener apnea obstructiva

La Voz REDACCIÓN

SOCIEDAD

BTI BIOTECHNOLOGY INSTITUTE

Un estudio de la Academia Americana de Neurología indica que más de la mitad de personas con deterioro cognitivo la padecen

01 mar 2021 . Actualizado a las 18:09 h.

La apnea obstructiva del sueño se produce cuando la respiración se interrumpe repetidamente durante el sueño y se ha demostrado que las personas con este trastorno tienen un mayor riesgo de desarrollar deterioro cognitivo y enfermedad de Alzheimer, aunque es tratable.  Tal y como informa Europa Press, un estudio preliminar presentado en la 73a Reunión Anual de la Academia Estadounidense de Neurología ha encontrado que este trastorno del sueño es común en personas con deterioro cognitivo.

El deterioro cognitivo incluye problemas de memoria y pensamiento que afectan la concentración, la toma de decisiones y el aprendizaje de cosas nuevas. El riesgo de deterioro cognitivo aumenta con la edad. «Dormir mejor es beneficioso para el cerebro y puede mejorar las habilidades cognitivas. Sin embargo, en nuestro estudio, encontramos que más de la mitad de las personas con deterioro cognitivo tenían apnea obstructiva del sueño», explica el autor del estudio Mark I. Boulos, de la Universidad de Toronto, en Canadá, y miembro de la Academia Americana de Neurología.

«También encontramos que las personas con trastornos del sueño tenían puntuaciones más bajas en las pruebas de pensamiento y memoria -prosigue-. Es importante comprender completamente cómo la apnea obstructiva del sueño afecta a esta población porque con el tratamiento, existe el potencial de mejorar las habilidades de pensamiento y memoria, así como la calidad de vida en general».

El estudio involucró a 67 personas con una edad media de 73 años que tenían deterioro cognitivo. Los participantes completaron cuestionarios sobre el sueño, la cognición y el estado de ánimo. También realizaron una evaluación cognitiva de 30 puntos para determinar su nivel de deterioro cognitivo. Las preguntas incluían identificar la fecha y la ciudad en la que se encontraban y repetir las palabras que se les había pedido que recordaran anteriormente en la prueba. Las puntuaciones en la prueba van de cero a 30. Una puntuación de 26 o más se considera normal, 18-25 significa deterioro cognitivo leve y 17 o menos significa deterioro cognitivo moderado a severo.

A los participantes se les realizaron pruebas de apnea del sueño en casa para determinar si tenían apnea obstructiva del sueño. La prueba en el hogar utiliza un monitor para rastrear los patrones de respiración y los niveles de oxígeno durante el sueño. Los investigadores encontraron que el 52 % de los participantes del estudio tenían apnea obstructiva del sueño. Las personas con el trastorno del sueño tenían un 60 % más de probabilidades de obtener una puntuación más baja en la prueba cognitiva que las personas que no tenían apnea del sueño. Las personas con el trastorno obtuvieron una puntuación media de 20,5 en comparación con una puntuación media de 23,6 para las personas sin el trastorno del sueño.

Además, los investigadores encontraron que la gravedad de la apnea obstructiva del sueño se correspondía con el grado de deterioro cognitivo, así como con la calidad del sueño de los participantes, incluido el tiempo de sueño, la rapidez con la que se dormían, la eficiencia de su sueño y la frecuencia con la que se despertaban por la noche.

«Las personas con deterioro cognitivo deben ser evaluadas en busca de apnea obstructiva del sueño porque se puede tratar mediante el uso de una máquina de presión positiva continua en las vías respiratorias (CPAP) que ayuda a mantener las vías respiratorias abiertas durante la noche», apunta Boulos. «Sin embargo, no todos los que prueban la CPAP eligen usar la terapia con regularidad, y esto puede ser un desafío mayor para las personas con problemas de pensamiento y memoria -continúa-. Las investigaciones futuras deben dirigirse a determinar formas de diagnosticar y controlar la enfermedad que sean eficientes y fáciles de uso en personas con deterioro cognitivo».