«Science» reafirma la teoría gallega de los supercontagiadores

Jorge Casanova
jorge casanova REDACCION / LA VOZ

SOCIEDAD

Federico Martinón (izquierda) y Antonio Salas, investigadores de la USC
Federico Martinón (izquierda) y Antonio Salas, investigadores de la USC

El equipo de Antonio Salas y Federico Martinón incide en la hipótesis tras el estudio de más de 166.000 genomas del virus

04 feb 2021 . Actualizado a las 18:56 h.

Las nuevas cepas del SARS-CoV-2 son importantes, pero no son las responsables de los vaivenes de la pandemia. Al menos no las principales responsables. Tras los picos de la pandemia siguen los supercontagiadores. La teoría que pusieron de manifiesto hace varios meses los investigadores de la USC Antonio Salas y Federico Martinón acaba de ser ratificada por los dos científicos a través de una carta publicada en la revista Science, que recoge las conclusiones tras el estudio de más de 166.000 genomas completos de coronavirus: «Ya hay una literatura que empieza a ser abundante alrededor del fenómeno del supercontagio -explicaba ayer Antonio Salas-. Esto lo que hace es confirmar masivamente que el patrón se sigue manteniendo». 

La nueva publicación de los dos científicos de la Universidad de Santiago recoge el estudio de centenares de eventos sucedidos en diversos lugares del planeta durante la pandemia. Cruzados con la exploración de los genomas del virus, llegaron de nuevo a la conclusión de que la expansión se explicaba en muchos casos por el fenómeno de los supercontagiadores. De hecho, Science, recogió recientemente dos incidentes de supercontagios ocurridos en Boston durante la primera ola. Uno de ellos ya había sido incluido por los dos investigadores gallegos en su primer artículo: «Ahora que pudimos acceder a una base de datos mucho más amplia y empleando exactamente la misma metodología que usamos en mayo, sí lo detectamos, así como unos cuantos de cientos más»

¿Qué son los supercontagiadores? «Personas que tienen una mayor facilidad de contagiar. Son iniciadores perfectos, porque si el brote se inicia a través de una persona es mucho más fácil que se estabilice. El hecho de que haya alguna cepa o alguna variante que ayude lo único que hace es crear un cóctel magnífico».Los investigadores gallegos subrayan: «Responsabilizar a una cepa del caos que estamos viviendo es una enorme simplificación del algoritmo de la pandemia». Los autores del estudio apuntan que las mutaciones del virus y su predominancia en la pandemia era un fenómeno que ya se había observado a mediados del año pasado y que los ritmos de contagio están relacionados con la relajación de las medidas restrictivas de contacto social mucho más que con la aparición de nuevas variantes del virus.

Cómo afrontar el fenómeno de los supercontagiadores es una cuestión sin una respuesta original. La única solución es la que rige para todos: higiene, distancia, mascarillas. «Cualquier cepa, por peligrosa que sea, no se disemina si estamos bien protegidos», afirma Salas: «Una persona que usa mascarilla y mantiene la distancia social, previene el contagio, sea portador o no de una variante u otra. Por otro lado, un supercontagiador es un catalizador perfecto y puede originar grandes brotes y así convertir una mutación que surge en un único individuo, en una mutación predominante», concluye el científico.

La identidad, el perfil de los supercontagiadores sigue siendo para la ciencia un misterio: «Sabemos cero sobre él, igual que sabemos cero sobre muchos otros aspectos de la pandemia. Por ejemplo, la susceptibilidad del huésped al patógeno. Solo sabemos un poquito, pero que no explica por ejemplo cómo una persona que está sana, sin ningún tipo de comorbilidad, tenga una evolución de la enfermedad tan agresiva. Sabemos mucho más de lo que sabíamos en marzo, pero quedan muchísimas incógnitas todavía», concluye Salas.