«La falta de contacto social daña tanto como 15 cigarros diarios»

Xavier Fonseca Blanco
xavier fonseca REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Meredith Nierman

Asesor de Joe Biden, Vivek Murthy ha publicado «Juntos»

31 ene 2021 . Actualizado a las 22:29 h.

Cuando el lector se enfrenta a Juntos (Crítica), del prestigioso cirujano Vivek Murthy, que acaba de ser nombrado otra vez como «médico de la nación» por el presidente de Estados Unidos Joe Biden, descubre un muro que la ciencia todavía tiene pendiente de derribar, el de las emociones. Algunos, como el propio Murthy, ya lo están intentando. Tal y como confiesa en el libro, durante su vida profesional se ha topado con un conflicto de salud sobre el que nunca había pensado cuando inició su carrera médica. Un asunto con el que muchas personas llegaban a la consulta y para el que su formación no le había preparado: la soledad. Tras varias experiencias duras con pacientes cuyas enfermedades empeoraban cuando su vida social era precaria, decidió iniciar una investigación sobre los efectos que produce la ausencia de contacto humano.

Murthy se encontró con un problema que amenaza con convertirse en otra pandemia global. Mirara donde mirara, las cifras eran abrumadoras. En Estados Unidos, por ejemplo, una encuesta realizada en el 2018 revela que el 22 % de la población adulta afirma sentirse solo o aislado, un porcentaje casi idéntico que mostraron otros estudios recientes elaborados en Australia y el Reino Unido.

El interés del cirujano norteamericano fue más de allá de conocer la estadística de un fenómeno que extiende por el planeta. Quiso entender los estudios que se están realizando sobre salud y conexiones sociales. Como médico se encontró con un hecho tan sorprendente como aterrador. La soledad no solo genera daños psicológicos, sino también físicos e incluso influye en la esperanza de vida de una persona.

Cuenta que en el 2009 conoció en Minnesota a la doctora Julianne Holt-Lunstad que le mostró los resultados de un trabajo científico que recopiló los 158 artículos más importantes sobre cómo afecta la vida social al bienestar físico de los humanos.

Entre las conclusiones destacaba que aquellas personas con «lazos sociales fuertes» tienen una probabilidad de morir prematuramente un 50 % menos que aquellas con una «vida social débil». Esta investigación también reveló que «la carencia de un contacto social equivale al riesgo de fumar quince cigarros al día, superior a los asociados con la obesidad, el consumo excesivo de alcohol y la falta de ejercicio físico».

Al principio, como era de esperar, la comunidad científica se mostró escéptica con todos esos datos. Pensaron que la relación tenía que ser algo casual. Es decir, si un hombre con diabetes que vive solo fallece, la causa es la enfermedad. El hecho de que no tuviese relaciones sociales se asume con una coincidencia. Pero tal y como explica en las páginas Vivek Murthy, su colega se anticipó a esta reacción y la conclusión seguía siendo que «el efecto protector de las conexiones humanas se mantuvo incluyendo un amplio espectro de factores de riesgo». Los artículos académicos que se han publicado posteriormente también han confirmado que la soledad favorece la muerte prematura.

La obra de Murthy se remonta hasta los albores de la humanidad para encontrar el origen de ese ansia por relacionarnos. El homo sapiens es un animal social y satisfacer esa necesidad resulta tan básico como comer y beber. Por ello, cuesta imaginar el daño que puede estar generando la pandemia entre los más vulnerables. El médico que asesora a Biden en la crisis del covid-19 ofrece una visión de la soledad que puede resultar útil para estos días de aislamiento forzado.