Sea como sea, al menos las películas permanecen intactas. No ocurre así, por ejemplo, con 1, 2, 3... Splash (1984). La comedia romántica protagonizada por Tom Hanks y Daryl Hannah contenía varias secuencias en las que Madison, la sirena a la que da vida Hannah, aparecía semidesnuda. En una de las más famosas, a la actriz se le intuía algo el trasero mientras corría desnuda hacia el mar. La plataforma decidió hacer aún más larga su melena con unos efectos especiales de andar por casa y tapar para siempre las nalgas de la actriz. Y todo por medio culo.