Estado de la Tierra en el 2020: los materiales fabricados por humanos ya superan toda la biomasa

SOCIEDAD

El puerto de Shanghái, en China, mueve cada año el mayor número de contenedores del planeta
El puerto de Shanghái, en China, mueve cada año el mayor número de contenedores del planeta iStock

Un artículo publicado en la revista «Nature» reconoce que las construcciones humanas ocupan el mismo espacio que el mundo natural

31 dic 2020 . Actualizado a las 08:54 h.

Todos estamos deseando que llegue el 2021. Dejamos atrás un año que ha sido trágico. Sin embargo, lo que ha ocurrido no debería pasar por nuestras vidas sin obligarnos a realizar una profunda reflexión, porque la verdad sobre el 2020 es que la naturaleza ha hablado y debemos preguntarnos si hemos captado su mensaje. La pandemia global generada por el covid-19 se veía venir desde hace tiempo. La comunidad científica lleva décadas alertando sobre los efectos que se producen cuando se altera de una manera tan devastadora el equilibrio del mundo natural. El ser humano se ha convertido en un verdadero especialista en reducir la biodiversidad, de la que depende la civilización, por muy sofisticada y tecnológica que parezca. Cuando la naturaleza se deteriora, aumenta de manera significativa la posibilidad de que un virus pase del reino animal a los humanos.

Naciones Unidas lanzó hace unos días un aviso claro en este sentido. «No es difícil imaginar un virus igual de contagioso que el covid-19, pero más letal», advertía el Secretario General de la ONU, António Guterres. Y añadió que «hacer las paces con la naturaleza es la tarea que definirá el siglo XXI. Esa debe ser la máxima prioridad para todos nosotros, dondequiera que estemos».

En este año tan crítico ha habido otros avisos. La Antártida, por ejemplo, registró la temperatura más alta desde que existen registros: 18,1 grados. Esta cifra, a la que estamos tan habituados por las latitudes medias, es una barbaridad en el extremo sur del planeta. Los polos se están calentando rápidamente. Este año el Ártico también ha sido noticia por la misma razón. Atrás queda un 2020 extremadamente cálido y una temporada de deshielo que ha sido más larga e intensa de lo habitual. Además, en este año tan difícil se ha registrado la temporada ciclónica más activa que se recuerda y el ascenso de la temperatura global va a situar al 2020 en el podio de los más cálidos. Todo ello con el fenómeno de La Niña desarrollándose, que lo que hace es justamente enfriar el planeta. 

Para terminar un dato sobre el mundo que estamos construyendo y que va justo en la dirección contraria. Hace unas semanas se publicó un artículo en la revista Nature que sostiene que la masa de todos los materiales producidos por el ser humano (hormigón, acero, asfalto) ha crecido hasta igualar la masa de toda la vida en el planeta. En el último siglo la humanidad se ha cuadriplicado, pero nuestras construcciones incluso nos han superado. Los autores apuntan que hoy, en promedio, por cada persona en el mundo, se produce una cantidad de masa antropogénica mayor que su peso corporal cada semana.«El estudio proporciona una especie de instantánea de panorama general del planeta en el 2020. Esta descripción proporciona una comprensión crucial de nuestro papel principal en la configuración de la faz de la Tierra en la era actual del Antropoceno. El mensaje tanto para los responsables políticos como para el público en general es que no podemos descartar nuestro papel como seres pequeños en comparación con la enorme Tierra. Ya somos un jugador importante y creo que eso conlleva una responsabilidad compartida», asegura el biólogo y autor del trabajo Ron Milo del Departamento de Ciencias Vegetales y Ambientales en Weizmann. El repunte se observa notablemente a partir de la década de 1950, igual que la emisión del dióxido de carbono o el ascenso de la temperatura media global.