300 científicos piden una estrategia común europea para reducir radicalmente los contagios

La Voz REDACCIÓN

SOCIEDAD

Agostiño Iglesias

El manifiesto, que se publicará en «The Lancet», propone mantener restricciones fuertes hasta llegar a una incidencia diaria de 10 nuevas infecciones por cada millón de habitantes

19 dic 2020 . Actualizado a las 17:30 h.

Un grupo de 300 científicos europeos ha pedido, en un manifiesto que difundirá la revista The Lancet, una estrategia europea coordinada para reducir de forma drástica las cifras de contagios de coronavirus. El manifiesto está firmado por virólogos, como Christan Drosten o Melania Brinkmann, pero también por economistas como el director del Instituto de Estudios Económicos Ifo de Múnich, Clemens Fuest, o politólogas como la austríaca Bárbara Dreisach. La iniciativa surgió de Viola Priesemann, física del Insituto Max Planck que se ha especializado en simular la difusión de virus con modelos matemáticos. «Es como si fuera un gigantesco partido de fútbol en el que cada vez que el equipo del virus marca un gol puede contar con tres jugadores más», dijo al presentar esta declaración en un acto virtual. «Con ello, la defensa del equipo contrario -el sistema sanitario- queda en inferioridad numérica, se producen más goles y el equipo del virus siguen reforzándose con nuevos jugadores. Con cifras de contagios como ahora no se podrá reducir el número de muertos», sentenció.

La estrategia que proponen es mantener restricciones fuertes hasta que se llegue a una incidencia diaria de 10 nuevas infecciones por un millón de habitantes en Europa. Eso implicaría, por ejemplo, para Alemania un máximo de 830 nuevos contagios diarios, cifras que no se ven desde el verano. Desde entonces, este país ha experimentado un repunte, paulatino primero y a partir de octubre claro y exponencial, y actualmente se encuentra por encima de los 30.000 nuevos casos diarios.

Los científicos defienden que aunque un país logren bajar los contagios, estos pueden tener un repunte fuerte en cualquier momento debido a las fronteras abiertas, por lo que la estrategia debe de ser común. «En cuatro semanas podemos alcanzar la meta. Pero para ello el virus se tiene que combatir en todas partes consecuentemente a través de reducción de contactos, en los lugares de trabajo, en el transporte, en los colegios», indicó Priesemann, que considera que actualmente se permiten demasiadas excepciones.