Iñaki Bretal, primer estrella Michelin de Pontevedra: «Nun ano tan complicado, recibir isto é un gustazo»

Nieves D. Amil
NIeves D. Amil PONTEVEDRA / LA VOZ

SOCIEDAD

CAPOTILLO

El responsable de O Eirado da Leña es uno de los tres cocineros gallegos que se unen a la prestigiosa lista

15 dic 2020 . Actualizado a las 18:34 h.

«Dormín coma un pepe», admite Iñaki Bretal. Lo dice bien temprano, cuando regresa ya de la lonja para organizar el día. Lo hizo hoy, también ayer y espera seguir haciéndolo cada día. Porque si tiene claro algo el cocinero es que lo único que no puede perder la esencia es lo que cada día pone sobre la mesa de O Eirado da Leña, un local que siempre estuvo en las quinielas y que este lunes entró en el Olimpo junto a Silabario, de Vigo, al Miguel González, de Ourense y a la segunda estrella Michelín para Culler de Pau. «Nun ano tan complicado, se hai algo bo e isto, é un gustazo», asegura Bretal, que reconoce que Pontevedra es cada vez más un destino gastronómico. Y es que o Eirado da Leña se une a Casa Solla y Pepe Vieira, en Poio; a Yayo Daporta, en Cambados; a Culler de Pau, en O Grove, y al Maruja Limón, en Vigo.

Iñaki Bretal sabía que este año podía estar entre los escogidos, pero aunque «tiña un 99 %de seguridade de que sería porque sempre hai rumores antes de que se saiba, ata que leron o meu nome non o celebrei». Ayer tocó brindar con su familia de sangre y hoy al mediodía lo hizo con la de O Eirado da Leña. Javi, Dani, María e Raquel celebraron una estrella Michelín en el restaurante de la pontevedresa Praza da Leña. Bretal tiene además o Eirado Eventos, en Lugo. «Esta semana xa falabamos de que pasaría se recibíamos a estrella, pero nos seguiremos igual. Así imos ben e a clientela sae contenta, que o do que se trata», explica Bretal. Sabe que en los próximos meses su restaurante será un destino más dentro del turismo gastronómico, pero eso no le hará romper con el proyecto que inició hace 17 años. «Facemos o mesmo dende que abrimos, aínda que hai épocas nas que queres facer cousas raras e é fácil que ao final estragues un bo produto», recalca Iñaki Bretal. Para él «o peixiño ten que saber ao que é». Y en esa lucha por mantener el sabor de Galicia lleva muchos años. O Eirado está centrado en los productos del mar y seguirá por ese camino. No está en sus planes cambiar ni la forma ni el fondo de su «casa». Ante la posibilidad de que la lista de espera para comer en O Eirado se dispare, Iñaki Bretal es muy claro: «A lista de espera nós xa a temos na temporada alta, non de meses, pero está claro que se alguén vai querer vir un martes de febreiro, pois non haberá problema».

Una vida en la cocina

Con más de dos décadas en los fogones, fue hace 17 cuando abrió las puertas de O Eirado da Leña, en la popular plaza de la zona vieja de Pontevedra, donde cada casa tiene un negocio de hostelería en el bajo Bretal también es responsable de la Tapería Loaira, casi enfrente del restaurante estrella Michelín. La Leña y la plaza de la Verdura son los dos grandes puntos del ocio local, que la pandemia ha dejado desérticos. Pese a la situación crítica que vive el sector, Iñaki Bretal siempre ha intentado ver hacia delante, incluso ahora, a las puertas de una Navidad en la que la hostelería está atada de pies y manos por la pandemia.

El año más duro para Iñaki Bretal acaba de la mejor forma y le da impulso para coger fuerza de cara al 2021. Esta mañana ya habló bien temprano con sus padres para comentar el premio. Ellos tienen parte de culpa de que lo haya logrado. «Sempre me gustou, aínda que na familia non hai ninguén relacionado coa cociña. Me pai era mariñeiro e a miña nai, ama de casa. Iso si, gustáballe moito cociñar e dende que era neno había sempre un primeiro, un segundo e un postre», asegura Bretal, que profesionalizó esa pasión de la madre por los fogones y ese amor al mar de su padre.