La Xunta debate si las reuniones navideñas deben ser de seis o de diez personas

Tamara Montero
Tamara Montero SANTIAGO / LA VOZ

SOCIEDAD

Feijoo plantea que los niños computen distinto para las celebraciones | Sanidade descarta por el momento un cierre perimetral de la comunidad, como sí ha anunciado Castilla y León, y se decanta por continuar con los cierres por municipios

25 nov 2020 . Actualizado a las 19:02 h.

«Aínda non temos posición clara sobre se seis ou dez». El conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, participa esta tarde en la reunión del Consejo Interterritorial en la que se cerrará el documento marco que regirá en las celebraciones navideñas y en el que se plantea, entre otras cuestiones, el número máximo de personas que podrán reunirse en esas fechas. La Xunta todavía debatía esta mañana sobre si la cifra adecuada era la de seis personas o la de diez. Lo que está claro es que se inclina por tener un documento conjunto, que funcione como un marco de referencia y que permita a las diferentes comunidades adaptarlo a sus peculiaridades.

Eso, y continuar con la estrategia de limitar la movilidad por municipios de ser necesario. No se ha planteado la posibilidad de un cierre perimetral de la comunidad, como sí ha anunciado Castilla y León. Además, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, ha puesto sobre la mesa que «el cómputo de niños sobre adultos debería de tener una metodología distinta». La Xunta también valora cómo atender a aquellas personas que están solas durante las fechas navideñas.

Cómo será la Navidad en pandemia ha centrado parte de la comparecencia de este miércoles para explicar la situación en la que se encuentra Galicia y los cambios en el mapa de restricciones que decidió el comité clínico a última hora del martes. Pedro Rascado, médico de críticos en Santiago insistió en que «tenemos que celebrar las Navidades protegiendo a los vulnerables» y ser extremadamente escrupulosos en el uso de la mascarilla y limitando todo lo posible las interacciones sociales.

Situación estable

Los preparativos navideños comienzan en una situación favorable en Galicia. La directora xeral de Saúde Pública, Carmen Durán, la ha calificado como «estable con cierta tendencia a descender». La incidencia acumulada a 14 día está en 275 casos por cien mil habitantes, cuando hace una semana era de 292. A siete días también se ve la tendencia descendente, con 135 casos por cien mil frente a los 143 de hace una semana.

La tasa de positividad está por debajo del 10 % y el número reproductivo básico , que mide los niveles de contagio, se sitúa ligeramente por debajo de 1. También la presión asistencial deja cifras esperanzadoras, tal y como lo definió el gerente del Sergas, José Flores, aun dentro de la prudencia. La ocupación de camas hospitalarias ha descendido alrededor del 11 % durante la última semana, y las ucis tienen en términos generales un 3 % menos de ocupación, pero se ha incrementado la presión en las áreas de A Coruña, Vigo y Lugo, aunque no de forma alarmante.

La mejoría es generalizada en las ciudades, con A Coruña, SantiagoOurense con una incidencia acumulada por debajo de 200 casos por cien mil habitantes en las dos últimas semanas, lo que ha sido calificado como «una buena noticia». Ferrol ha conseguido bajar de 300 casos por cien mil su incidencia y se sitúa en 258, y Vigo experimenta una mejoría pasando de 367 casos por cien mil a 303 a 14 días y de 166,6 a 136,8 a siete días.

La única excepción a esta mejoría en las áreas urbanas es Pontevedra, con las incidencias al alza. Han pasado de 326 casos por cien mil habitantes a 349 en los últimos 14 días y de 165 a 184 en los últimos 7 días. También la comarca de O Morrazo ha preocupado al comité, con un incremento de los contagios y de las incidencias acumuladas en los últimos días concentrado en dos ayuntamientos, los de Marín y Moaña, que desde este jueves pasa a tener restricciones duras que incluyen un cierre perimetral aislado, porque aunque limita con Cangas, las situaciones epidemiológicas son distintas: Cangas mejora y Moaña ha estado empeorando.

También han quedado bajo especial vigilancia varias comarcas, como Barbanza, con ascensos en las incidencias acumuladas. El foco está en Ribeira, porque aunque en los últimos días disminuye en el número de casos nuevos, es el que más tiene en el conjunto de la comarca.

Se incorpora también la comarca de Fisterra a las de especial seguimiento por los incrementos de casos. Dumbría y Muxía son las que arrojan mayor número de contagios. Sarria, por su parte, ha tenido una incidencia favorable. A siete días ha pasado de 172 a 135 casos por cien mil habitantes. Chantada ha mejorado y ha pasado de 517 a 281 casos por cien mil en los últimos 14 días y de 177 a 114 en siete días.

En cuanto a Valdeorras, A Rúa presenta 19 casos en 7 días y no experimenta una mejoría. Petín parece que ha disminuido el número de casos en las últimas jornadas, pero se ha incorporado a la vigilancia para ver si se confirma la tendencia. 

Con una situación en general estable, Sanidade ya pone sus esfuerzos en el documento de desescalada. Uno de los factores que se está manejando actualmente para suavizar las restricciones -hoy salen del modelo duro ocho municipios- es que haya una incidencia acumulada por debajo de los cien casos por cien mil de manera sostenida, aproximadamente durante siete días, aunque Carmen Durán ha vuelto a insistir en que todas las decisiones se toman teniendo en cuenta una serie de factores, no solo las incidencias.«Nos encontramos en una situación de estabilidad de la segunda ola, pero ahora más que nunca debemos continuar con medidas de protección» para evitar que se produzca una tercera, ha insistido Marina Varela, doctora del CHOP y miembro del comité clínico.

García Comesaña ha explicado que el documento para la desescalada todavía no está cerrado, pero que contempla las particularidades de los concellos grandes y los pequeños y las diferencias que se dan entre el ámbito rural y el urbano.

Un número que «non é pequeno» de brotes en hostelería

También se ha referido Comesaña al documento de desescalada que ha presentado el sector de la hostelería. El conselleiro ha explicado que «tratarán de incluir esas sensibilidades», haciéndolas compatibles con las valoraciones del comité clínico, porque Saúde Pública marcará la hoja de ruta. Aunque sea duro y son medidas que no se quieren tomar, las limitaciones de la hostelería «de momento está a verse que dan resultado»

Las autoridades sanitarias tienen cuantificado el número de brotes que están relacionados con la hostelería «e non é pequeno». Además, y según explicó el conselleiro, provoca un efecto tractor sobre la movilidad, generan contactos y además hay que quitarse la mascarilla para comer y beber. «Comprobámolo no Carballiño, Ourense en Santiago, estas medidas que son durísimas producen a diminución dos momentos nos que quitamos a máscara e nos contaxiamos».