«Con un buen diagnóstico, rastreo y sanciones no hay que llegar a confinar»

Tamara Montero
tamara montero SANTIAGO / LA VOZ

SOCIEDAD

OSCAR CELA

Sergio Vázquez, oncólogo y miembro del comité clínico de seguimiento de la pandemia, considera que «Galicia es la comunidad peninsular que mejor está, pero va algo lenta»

22 nov 2020 . Actualizado a las 17:34 h.

Sergio Vázquez, oncólogo en el hospital Lucus Augusti y miembro del comité clínico de seguimiento de la pandemia, llama a la cautela y a la responsabilidad de la población, en la que ve una cierta «relajación».

-O Carballiño ha regresado a la nueva normalidad y trabajan ya en criterios de desescalada.

-Nos guiamos por muchos factores. En el modelo que estamos siguiendo ahora, y que probablemente se modifique, tiene que haber incidencias acumuladas por debajo de cien a 14 días, aparte de otros factores relacionados con la presión asistencial, y tienen que ser cifras sostenidas en el tiempo. No es lo mismo que en una semana baje de 200 a 80 que llevemos un par de semanas viendo una evolución muy clara hacia esa bajada.

-Feijoo insiste en que ahora no toca levantar restricciones.

-Hay que ser muy cautos en todo esto. Tenemos que pensar que el virus sigue ahí, pero hay cierto espíritu de relajación y se nota una ausencia de sanciones en determinados ayuntamientos, porque si tomas medidas restrictivas pero no hay sanciones la gente pasa más.

-El horizonte es principios de diciembre...

-Se han decretado un mes, pero no quiere decir que si las cosas no van bien no se extiendan.

-Pero justo después de ese momento viene un puente.

-Los puentes dan miedo. Hay mucha movilidad, se juntan las familias… Sabemos que esto es difícil, que son medidas muy largas en el tiempo, que acabamos cansados y desilusionados. Hemos conseguido que se hayan estabilizado las hospitalizaciones y los ingresos en uci y eso es lo más importante, sobre todo en sitios que estaban muy afectados, como Ourense y Ferrol. Debemos ser conscientes de lo que significa que la sanidad se sature.

-¿Es probable que se mantengan hasta el puente?

-Estamos individualizando, ahora se ha analizado O Carballiño, se vio que iba muy bien durante bastante tiempo y se decidió una bajada al nivel 2. El martes nos volvemos a reunir, probablemente se analizará lo que está pasando en otras poblaciones y se puede valorar rebajar restricciones. Y si siguen mal zonas como A Rúa o Ribeira quizá haya que poner restricciones tipo O Carballiño. Pero no por tener una incidencia por debajo de cien hay que abrir, porque puede haber otros datos que nos indiquen que hay que ser cautos.

-Limitar la atención ordinaria en los hospitales tiene efectos en áreas como la suya, la oncología.

-Sí, eso lo vimos todos. Tenemos que analizarlo, pero está claro que están llegando enfermedades más avanzadas, diagnósticos más tardíos. También está cardiología, los infartos, algunas infecciones… Es posible que esto en un par de años se note en una reducción en dos puntos de la supervivencia. Ahora está todo normalizado, no hay ningún problema.

-La hostelería insiste en que se la está criminalizando.

-Es cierto que hay una relación clara entre los espacios cerrados y la transmisión por aerosoles del virus, que se mantienen hasta cinco horas en el aire. O cambiamos nuestra cultura por un mayor uso de espacios exteriores o la mejoría de la ventilación, o mientras no tengamos una vacuna, el uso de espacios donde haya mucha gente va a ser difícil.

-¿La mejoría tarda?

-Galicia es la comunidad peninsular que mejor está en este momento, con una incidencia en torno a los 270 casos en 14 días y está bajando la curva. La idea era que bajase más rápido con las medidas. Vamos un poco lentos.

-¿Pero por incumplimientos?

-Hay un poco de todo. Hay unas normas, pero no se cumplen, en parte porque la población está muy cansada. Llevamos nueve meses con esto y yo lo entiendo. O bien hacemos un confinamiento, que nadie lo desea, o tenemos que aprender a vivir con estas restricciones durante un tiempo.

-Si la situación sigue deteriorándose, ¿qué medidas quedan que no sea el confinamiento?

-Lo que hay que hacer es ir a la base. Si se hace un buen diagnóstico, un buen rastreo y unas sanciones efectivas, creo que no hay necesidad de llegar a un confinamiento.

«La vacuna no es un problema de libertad individual, es de salud pública»

El Consejo de Ministros del próximo martes analiza el plan de vacunación.

-Me parece bien que nos adelantemos, se vaya planificando todo y tener la logística preparada, pero hay que ser cautos. Muchas veces los resultados que se tienen al principio [con los ensayos de las vacunas] no tienen nada que ver con lo que ocurre después.

-El CIS demuestra que la población española tiene ciertas reticencias a vacunarse.

-Es surrealista. Todo el mundo está esperando la vacuna, pero un 47 % de la población dice que no se quiere vacunar. Si la vacuna se demuestra eficaz y segura, creo que no es un problema de libertad individual o de autonomía, sino fundamentalmente de salud pública. Tienes no solo que protegerte a ti mismo, sino a los demás, que es lo más importante. Puedo entender que como es nueva y se ha desarrollado tan rápido haya cierto miedo en el subconsciente de la población, pero, una vez se comercialice, podemos estar tranquilos y vacunarnos.

-Cataluña ha presentado su plan de test de antígenos a realizar en farmacias.

-Hay mucha controversia. Es un test que es válido en personas con alta carga viral, porque no depende de microbiología, y te permite tomar decisiones rápidas, pero no detecta bien asintomáticos con baja carga. Es lo que se está discutiendo y se protocolizará en Galicia para ver en un futuro el lugar que puede ocupar.