«No es solo ADN lo que transmitimos a los hijos, también nuestros hábitos»

a. laya REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Ana Belén Crujeiras, investigadora del Idis
Ana Belén Crujeiras, investigadora del Idis Xoán A. Soler

La bióloga e investigadora Ana Belén Crujeiras participa hoy en las mesas saludables on-line de La Voz, que se pueden seguir a través de la web y de Facebook

05 nov 2020 . Actualizado a las 17:49 h.

Teníamos claro que la alimentación o los hábitos de la madre influyen en el desarrollo del feto. Pero Ana Belén Crujeiras, bióloga, investigadora y directora del grupo de investigación Epigenómica en endocrinología y nutrición del Idis, va más allá y sostiene que los hábitos de la madre, y también los del padre, antes de concebir al futuro bebé pueden tener repercusiones sobre la futura salud de este. De estas cuestiones hablará en una nueva edición de las mesas saludables on-line, que patrocina Eroski. Bajo el título Dieta Atlántica: cómo mejorar la salud de nuestros hijos incluso antes de nacer, se podrá ver a partir de las 20.00 horas en la web de La Voz y su canal de Facebook.

-¿Cómo podemos mejorar la salud de nuestro hijo antes de que nazca?

-La idea es dar a conocer que es importante no solo lo que ya sabemos de que las mujeres embarazadas tienen que seguir hábitos saludables para favorecer la salud del bebé, sino que también es importante porque se le aportan al feto unas marcas epigenéticas que van a condicionar su susceptibilidad a padecer enfermedades a lo largo de su vida. Por eso es esencial que la futura madre, antes de pensar en quedarse embarazada, siga hábitos de vida saludables, porque esas marcas epigenéticas van a ir ya en los óvulos.

-¿Y eso afecta también a los padres o se limita a las madres?

-También es importante que los padres sigan hábitos de vida saludables, porque siempre parece que es la mujer la única que tiene que cuidarse. Hay estudios recientes que explican que los hábitos del padre también van a condicionar esa susceptibilidad a padecer enfermedades antes de la concepción del feto. No es solo el ADN lo que transmitimos a nuestros hijos, sino que también nuestros hábitos, y esta última es la parte en la que podemos incidir.

-¿Llevar hábitos de vida saludables también ayuda a prevenir la infertilidad?

-Hay estudios que evidencian que personas con obesidad, por ejemplo, tiene más problemas. En los hombres con obesidad la calidad del esperma es más reducido y en las mujeres la obesidad reduce su capacidad de quedarse embarazada. A lo largo de toda la gestación, la obesidad aporta condiciones que no son favorables para el embarazo.

-¿La dieta atlántica impulsa esos hábitos saludables?

-Es un ejemplo de una elección saludable porque contiene alimentos saludables, que van a ayudar a prevenir enfermedades, y favorece la actividad física, además de las comidas en familia. Es volver a las costumbres que tenían nuestros abuelos.