La publicidad de apuestas, sin fútbol ni personajes famosos con la nueva ley

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El Gobierno una norma con multas que alcanzan un millón de euros

26 may 2021 . Actualizado a las 16:32 h.

El Consejo de Ministros aprobó ayer el Real Decreto de comunicaciones comerciales de las actividades del juego que regula la publicidad del sector de las apuestas y juegos de azar online en España y cuyo incumplimiento contempla multas de hasta un millón de euros y la suspensión de la actividad empresarial.

Según destacó el ministro de Consumo, Alberto Garzón, el Gobierno «pone fin a la ley de la selva» que ha regido el sector de la publicidad del juego hasta ahora. Además, ha hecho hincapié en que da «respuesta a una necesidad, a una alarma social que se había generado, durante los últimos años, de una manera justificada». El titular de la cartera de Consumo ha puesto de manifiesto que esta nueva norma «satisface» un punto recogido en el acuerdo de Gobierno de Coalición, y que ha añadido que el Ejecutivo ha sido «enormemente sensible» con el fenómeno de la «extensión de los juegos de azar y de apuestas sobre la población» y sus consecuencias.

El ministro ha reiterado que el objetivo de esta norma es la protección de la salud pública y a los más vulnerables de la sociedad, los menores, los jóvenes y aquellos que tienen determinadas conductas patológicas que se pueden producir «consecuencia de un uso intensivo» de estas actividades. Igualmente, ha argumentado que en los últimos años la inversión en publicidad de juegos de azar y apuestas «se ha disparado de manera extraordinaria, hasta el punto que han inundado la vida cotidiana y la de los medios de comunicación», lo que ha ido parejo al incremento de las consecuencias negativas que puede conllevar.

Nuevo horario

La norma aprobada prohíbe la publicidad audiovisual fuera del horario de 1.00 a 5.00 horas. Además, el nuevo texto ajusta el contenido de los mensajes publicitarios con la intención de proteger a los sectores más vulnerables e impide a los operadores del mercado del juego la emisión de bonos de captación de jugadores, entre otras medidas. Según ha destacado Consumo, con la nueva regulación, las empresas solo podrán dirigir sus ofertas a clientes registrados y verificados y, en ningún caso, a personas que hayan mostrado comportamientos patológicos en la actividad del juego.

Entre otras medidas, los clubes deportivos no podrán firmar contratos de patrocinio con casas de apuestas que implique llevar publicidad de juegos de azar en camisetas y equipaciones. Además, la publicidad de apuestas en estadios deportivos, cuando acojan eventos emitidos en directo, deberá ajustarse a los mismos horarios que al resto de soportes. Los clubes tampoco podrán realizar actividades de patrocinio que consistan en la utilización de la marca de un operador para identificar a una instalación deportiva.

El departamento de Garzón ha manifestado que, para mayor protección de los menores, se incluye el control parental a través mecanismos que identifiquen la categoría de juegos de azar. En cuanto al contenido del mensaje, en aquellos anuncios que se emitan en el horario permitido, no podrán aparecer personas o personajes, reales o ficticios, de relevancia o notoriedad pública.

La respuesta de Cejuego

Cejuego mostró su «disconformidad» con la medida. A juicio de la patronal del juego privado en España, el sector «es sometido de nuevo a un doble rasero a la hora de entender su actividad e impacto en la sociedad con una clara diferenciación entre la gestión pública y la privada», ya que el texto «excluye entre sus medidas más restrictivas» la publicidad de los juegos públicos.

«El propio sector fue el primero en detectar la necesidad de regular las comunicaciones comerciales. Sin embargo, entendemos que resulta igualmente sensible para un menor un anuncio un sábado a las 12 de la mañana de los cupones de la ONCE que de las apuestas deportivas», sostiene Alejandro Landaluce, director general de Cejuego. La patronal ha reconocido que la falta de regulación «durante muchos años ha llevado a una sobreexposición que afecta negativamente a la percepción social del juego». Sin embargo, el sector no entiende que «las estrictas medidas vayan encaminadas a proteger en pro del juego responsable, sino que a perjudicar el desarrollo comercial del sector privado».