La inmunidad ante el coronavirus solo duraría unos meses

La Voz / Colpisa

SOCIEDAD

Pruebas serológicas (comprueban la presencia de anticuerpos) a alumnos de la UDC
Pruebas serológicas (comprueban la presencia de anticuerpos) a alumnos de la UDC MARCOS MÍGUEZ

Un nuevo estudio revela que un cuarto de los pacientes observados perdió anticuerpos en tres meses

27 oct 2020 . Actualizado a las 16:30 h.

Los anticuerpos que el organismo genera para protegerse frente al coronavirus tienen una esperanza de vida corta, mucho más de la deseada, según un estudio de un equipo de investigadores británicos que analizó las muestras de sangre extraídas de la yema de un dedo de más de 365.000 personas entre el 20 de junio y el 28 de septiembre. Los resultados detectaron un descenso del 26,5 % entre los positivos.

La Evaluación en Tiempo Real de la Transmisión en la Comunidad (REACT), en la que colaboraron especialistas de la universidad Imperial College de Londres y la empresa de encuestas Ipsos-Mori, reveló que la generación de anticuerpos por parte de personas infectadas duraría poco tiempo -un cuarto de los pacientes observados los perdió en tres meses-, lo que explicaría la emergencia reciente de casos de reinfección.

El estudio demuestra que esto sucede en todos los rangos de población, más rápido entre los mayores de 75 años. El mayor nivel de prevalencia se da entre los profesionales sanitarios y, dentro de la geografía del Reino Unido, en Londres, con un 9 % de positivos en el test de inmunidad.

El cuerpo reacciona a la infección generando anticuerpos- proteínas generadas tras la detección de sustancias dañinas- y células T, linfocitos producidos en la médula ósea. Wendy Barclay, una de las investigadoras, ha aclarado a la BBC que «analizando el conjunto de la evidencia, yo diría que la inmunidad se reduce en la misma proporción que los anticuerpos».

El resultado de este trabajo, que ya ha sido publicado y está pendiente del análisis de otros científicos antes de su divulgación en revistas especializadas, coincide con el anuncio por parte de los responsables de la vacuna de Oxford de que provoca una respuesta «fuerte» en personas mayores de 70 años, a las que se les inyectó en la tercera fase de los ensayos. «Esto es un hito clave y nos tranquiliza sobre el uso de la vacuna y su capacidad de inducir respuestas fuertes en ambas partes del sistema inmune y en todos los grupos adultos», valoró Andrew Pollard, de la Universidad de Oxford, al diario The Times. Suele ser habitual que los organismos de personas de mayor edad tengan una reacción más débil a las vacunas que cuerpos más jóvenes.

Los resultados de la investigación tienen además efecto en el potencial protector de las vacunas, al sugerir que la reacción del sistema inmune es de corta duración y que, por tanto, las inyecciones podrían provocar una respuesta más intensa.