La variante española del virus que los turistas propagaron por Europa

U.RODRÍGUEZ LA VOZ

SOCIEDAD

Rodrigo Jiménez | efe

Surgió a principios del verano en España y se ha extendido a varios países

29 oct 2020 . Actualizado a las 19:53 h.

20A.EU1: así han bautizado a la variante del virus que habría aparecido en España en el mes de junio y que, posteriormente, los turistas que viajaron al país propagaron por Europa. Es lo que cree un grupo de investigadores liderados por Emma Hodcroft, bióloga genetista de la Universidad de Basilea (Suiza), y del que froman parte Iñaki Comas y Fernando González Candelas, del consorcio SeqCovid-España del CSIC.

La nueva investigación ha sido publicada en MedRxiv y concluye, de forma preliminar, que una variante del SARS-CoV-2 surgió a principios del verano del 2020, presumiblemente en España, y desde entonces se ha extendido a varios países europeos. Según el estudio, las secuencias de este grupo (20A.EU1) difieren de las secuencias ancestrales en 6 o más posiciones. Además se muestra como la variante se exportó desde España a otros países europeos en múltiples ocasiones y que gran parte de la diversidad de este clúster en el país se observa en toda Europa. Los investigadores aseguran que todavía no está claro si esta variante se está propagando debido a una ventaja de transmisión del virus o si la alta incidencia en España seguida de la difusión a través de los turistas es suficiente para explicar el rápido aumento en varios países.

¿Cuándo y dónde surgió?

Las primeras secuencias identificadas datan del 20 de junio, cuando se muestrearon 7 secuencias españolas. Los datos epidemiológicos vinculados de España indican que las secuencias más tempranas del grupo están asociadas con dos brotes conocidos en el noreste del país. La variante de agrupamiento parece haberse extendido inicialmente entre los trabajadores agrícolas de Aragón y Cataluña, luego se trasladó a la población local, donde pudo viajar a la Comunidad Valenciana y luego al resto del país. Esta expansión inicial del clúster 20A.EU1 a través de un supuesto evento de superpropagación que se extendió a la población local y se trasladó por todo el país puede haber sido fundamental para aumentar la prevalencia del clúster en España justo antes de la reapertura de las fronteras.

¿Cómo se propagó?

Según esta investigación, el grupo 20A.EU1, fue dispersado por Europa por viajeros hacia y desde España y las importaciones repetidas podrían ser suficientes para explicar el rápido aumento de la frecuencia y el desplazamiento de otras variantes. Si estas introducciones ocurrieron en grupos demográficos que tenían más probabilidades de participar en comportamientos de riesgo en España y continúan participando en dicho comportamiento en sus países, los factores epidemiológicos por sí solos podrían explicar el aumento de la 20A.EU1.

La variante se observó por primera vez en nuestro país en junio, saltando inicialmente a alrededor del 60% de prevalencia en el plazo de un mes a partir de la detección de la primera secuencia. En el Reino Unido, Francia, Irlanda y Suiza se observa un aumento gradual a partir de mediados de julio. En Gales y Escocia, la variante era del 80% a mediados de septiembre, mientras que las frecuencias en Suiza e Inglaterra rondaban el 50% en ese momento.

Advertencia de los expertos

«Nuestro análisis destaca que los países deben considerar cuidadosamente su enfoque hacia los viajeros de áreas con alta incidencia de SARS-CoV-2 cuando se reanudan los viajes por Europa. Ya sea que el grupo 20A.EU1 identificado aquí se haya extendido rápidamente debido a una ventaja de transmisión o debido únicamente a factores epidemiológicos, su introducción observada y el aumento de la prevalencia en varios países implica que las pautas y restricciones de viajes de verano generalmente no fueron suficientes para prevenir la transmisión posterior», advierten los autores de la investigación. «Si bien las restricciones de viaje a largo plazo y los cierres de fronteras no son sostenibles o deseables, identificar mejores formas de reducir el riesgo de introducir variantes y garantizar que las que se introduzcan no se extiendan ampliamente, ayudará a los países a mantener un nivel bajo de transmisión del SARS-CoV-2», concluyen.