Úrsula Losada, trabajadora de la administración de lotería n.º 3 de Monforte: «Tras el confinamiento se formaron colas tremendas»

SOCIEDAD

CARLOS CORTÉS

04 oct 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Hace ya seis años de aquello, pero Monforte sigue sonando a localidad afortunada en los sorteos de lotería. El 6 de enero del 2014, la administración número 3 de Monforte vendía íntegramente el número 76.254, el premio gordo del sorteo del Niño. La lluvia de dinero fue intensa. Nada menos que 120 millones de euros cayeron aquel día en esta localidad de 20.000 habitantes y dejaron salpicaduras importantes en municipios próximos, como Sober y O Saviñao. Luis César Morais es uno de los propietarios de esa administración de loterías que este año sufre más o menos igual que todas las demás los problemas provocados por el coronavirus.

Ni él ni sus actuales socios estaban en el 2014 al frente de esta administración de loterías, que hoy, rebautizada como El Pleno, sigue siendo la única del popular barrio monfortino de la Estación, pero sabe que gracias a aquel premio esta administración recibió un empujón importante. Aquella fama y una gestión comercial muy activa en los últimos tiempos ha llevado a esta administración a escalar posiciones en el mercado local. Hace seis años era un despacho relativamente pequeño, pero sus dueños actuales dicen que ahora es «la administración de referencia en Monforte». En todo caso, ni siquiera la fama que todavía les reporta aquel gordo los ha librado de padecer la crisis de ventas provocada por el coronavirus.

Estos loteros de Monforte intentaron esquivar el primer golpe del año, el del confinamiento, con imaginación y wasap. Mediante esta aplicación de mensajería pusieron en marcha un sistema de apuestas, pero eso se acabó cuando llegó el mes y medio de suspensión de todos los sorteos.

Eso sí, la reapertura fue espectacular. «En la semana siguiente a la del confinamiento se formaban colas tremendas en la puerta de la administración, de treinta y de cuarenta personas», cuenta Luis César Morais. Parecía que la recuperación era posible, pero después llegó el segundo gran golpe: la cancelación de las fiestas populares. Eso les hizo perder el 70% de las ventas ligadas a las comisiones de fiestas. No sabían que les quedaba un tercer golpe, el del brote que en agosto contagió a más de 120 personas en Monforte. «Frenó en seco las ventas directas en la administración», explica Luis César Morais.

En estos momentos, tienen perdidos el 70% de los ingresos por la venta de lotería de recaudación de fondos para fiestas y un 40% de la venta directa en ventanilla. Está por ver qué pasa con el sorteo de Navidad, que representa una porción muy importante de sus ingresos habituales. En estos momentos, la caída de esta lotería es del 20%. «Pero lo fuerte para este sorteo empieza este mes —explican en esta administración—, veremos qué pasa».