Más de doscientos mil gallegos se quedan sin los viajes del Imserso

Jorge Casanova
jorge casanova REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Vítor Mejuto

La suspensión de la temporada supone pérdidas de 350 millones

25 oct 2020 . Actualizado a las 18:32 h.

«Sería una insensatez que el Gobierno ponga a viajar a millones de personas mayores en este momento de pandemia». Lo dijo ayer Nacho Álvarez, secretario de Estado de Derechos Sociales, al anunciar la suspensión de la temporada de viajes del Imserso. El anuncio, de algún modo, era esperado dadas las dificultades que provocaron al inicio de la pandemia los viajes programados la temporada anterior. El programa había quedado hibernado a la espera de reactivarlo, pero la mala evolución de los contagios en todo el país ha decidido al Gobierno a posponerlo definitivamente. En cualquier caso, los responsables de la iniciativa han subrayado que lo que se cancela es la temporada, no el programa.

El anuncio supone otra mala noticia para el sector turístico, que tiene en estos viajes un refuerzo económico cuando el turismo extranjero abandona España. Este año no ha contado ni con los extranjeros ni podrá hacerlo con los jubilados: «Yo creo que todos imaginábamos que se iba a suspender. No ha sido una gran sorpresa», admite Natalia, de la agencia de viajes IAG7, de A Coruña. De hecho, según explica, el fin de semana pasado era tradicionalmente el primero en el que se vendían estos viajes: «Y muy poca gente llamó para interesarse». La posición corporativa ha sido sin embargo de rechazo a la medida adoptada por el Gobierno.

En Galicia, el año pasado solicitaron su participación en alguno de estos viajes 234.740 personas. De hecho, Galicia fue en 2019 la sexta comunidad autónoma en número de demandantes. En total, en España solicitaron algún viaje con el Imserso casi cuatro millones de personas, aunque solo un millón se beneficiaron.

Claves en la primera ola

Estos viajes estuvieron también vinculados al desarrollo de la primera ola de la pandemia en Galicia, cuando diferentes expediciones regresaron a la comunidad con usuarios contagiados que diseminaron el virus en sus lugares de residencia e incluso provocaron el fallecimiento de alguno de ellos. En total fueron algo más de treinta casos los que surgieron tras viajes a la costa catalana y de la Comunitat Valenciana. El impacto que tuvieron aquellos viajes ha condicionado que el interés por participar en esta nueva temporada, ahora suspendida, haya sido muy inferior al de otros años.

El propio Nacho Álvarez recordó ayer, al anunciar la medida, las graves dificultades que supuso organizar el retorno de unos 50.000 jubilados cuando ya se había declarado la pandemia y ellos se encontraban todavía disfrutando de algunos de estos viajes por la costa española.

Miguel Ángel Vázquez, presidente de la Sociedade Galega de Xerontoloxía, valoró ayer la medida adoptada por el Gobierno como muy positiva: «Me parece prudente y razonable», afirmó: «Los viajes del Imserso son muy importantes porque normalizaron el derecho a irse de vacaciones de las personas mayores, pero en este contexto, lo más razonable es que no se celebren». El doctor Vázquez apuesta también por la suspensión de los programas de turismo termal.

Al sector turístico, la noticia no le ha sentado bien: «Es un mensaje muy negativo, porque traslada una imagen de inseguridad», según un portavoz de la Federación de Asociaciones Territoriales de Agencias de Viaje de España (Fetave). Otra asociación del ramo, la Confederación Española de Agencias de Viaje, cuantificó ayer en 350 millones de euros las pérdidas que supondrá la cancelación de la temporada del Imserso.

Estos 350 millones son ingresos directos que dejarán de percibir hoteles y agencias por las casi 900.000 plazas del programa que han quedado sin vender, aunque los operadores de viajes apuntan que las pérdidas son mayores: «Normalmente, algunos de estos usuarios que contrataban los viajes del Imserso ya se convertían en clientes que podían contratar algún viaje más. Eso es negocio que también se pierde», señala una profesional del sector desde A Coruña.

Los directivos del sector señalan también que la decisión pone al borde de la desaparición a unos 90.000 empleos en hoteles y agencias de viaje, aunque el Gobierno ya manifestó que no es razonable poner en marcha el programa para salvar el sector turístico cuando sus usuarios son el sector más vulnerable a la pandemia.