Oposición y comunidades no socialistas creen que Sánchez se está lavando las manos

La Voz

SOCIEDAD

Paco Rodríguez

La Xunta critica el «desentendimiento absoluto» del Gobierno y pide coordinación, mientras Casado acusa al presidente del Ejecutivo de dejación de funciones y de parapetarse tras autonomías. Arrimadas reclama una estrategia nacional y «y no 17», y Cataluña y el País Vasco consideran innecesario un estado de alarma por territorios

25 ago 2020 . Actualizado a las 19:07 h.

La reacción de la oposición y de las comunidades que no comparten siglas con Pedro Sánchez es bastante unánime: el presidente se está lavando las manos ante la evolución nada favorable de la pandemia del coronavirus. Además de ofrecer al Ejército para reforzar las labores de rastreo, el jefe del Ejecutivo puso este martes a disposición de las comunidades la posibilidad de solicitar un estado de alarma por territorios, total o parcial, y gestionarlo a su gusto. Los presidentes autonómicos, eso sí, deberán rendir cuentas en el Congreso. Las réplicas no se han hecho esperar: la Xunta de Galicia critica el «desentendimiento absoluto» del Gobierno, al tiempo que pide coordinación, y Pablo Casado señala que «España no tiene a nadie al timón», acusando a Sánchez de «dejación de funciones» y parapetarse tras un conflicto competencial para dejar toda la responsabilidad a las autonomías. También el País Vasco y Cataluña rechazan la propuesta de Moncloa. Ambas, como el PP, creen que no es necesario recurrir a esta herramienta en las comunidades.

El vicepresidente en funciones de la Xunta, Alfonso Rueda, apuntó este martes, tras la comparecencia de Sánchez, que el Gobierno gallego lleva «pidiendo desde hace muchísimo tiempo» al Ejecutivo central que se apueste por la cogobernanza frente al coronavirus, ya que se pasó «de la intervención absoluta, en donde las comunidades autónomas no tenían nada que decir, al desentendimiento y que todo se deje en manos de las comunidades». «Ni una cosa ni la otra», se quejó. Rueda reclamó al Gobierno «coordinación» para dar una respuesta «homogénea» a diferentes cuestiones como el inicio del curso escolar. «Al final esto no es operativo», advirtió, remarcando que las autonomías tienen sus «responsabilidades», pero tiene que ser «coordinados entre todos».

Emilio Naranjo | efe

El líder del PP, por su parte, criticó que Sánchez se esté escabullendo entre otras administraciones. Criticó Casado su «imprevisión e indolencia», advirtió de que hay una «ausencia absoluta de liderazgo», insistió en que dará todo su apoyo a las modificaciones legales necesarias para poder adoptar medidas frente a los rebrotes y apuntó que cree que el Ejecutivo está volviendo a cometer los mismos errores que en marzo con su «discurso triunfalista» sobre el covid. No está de acuerdo en que el estado de alarma sea necesario en «los Gobiernos que funcionan y cumplen su responsabilidad» al afrontar la situación con medidas adecuadas. Así, subrayó que las autonomías del PP «han ido por delante durante el verano» en la aplicación de medidas de contención de contagios, como limitar número de personas en reuniones, prohibir fumar en la calle o ejecución de test masivos.

Casado se pregunta si habrá que ir al Congreso para votar el estado de alarma para la comunidad correspondiente cada vez que haya un rebrote y pone en duda que esa medida vaya a contar con el apoyo parlamentario de la mayoría de Gobierno, tal como este martes comprometió Sánchez. «Si no le apoyan ni para la vuelta al colegio, cómo le van a apoyar en esta otras cuestiones», cuestionó,

Arrimadas reclama una estrategia nacional «y no 17»

Para la presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, hace falta más liderazgo y coordinación por parte del Gobierno, «una estrategia nacional frente a la segunda ola de la pandemia y no 17», indicó en su cuenta oficial de Twitter. «Para salvar vidas y empleos debemos huir de las luchas partidistas e ir todos a una, juntos frente al enemigo común», reflexionó.

Cataluña no quiere que algunas competencias pasen a formar parte del Estado

Los catalanes quieren gobernar, más que cogobernar. La consellera de Salut, Alba Vergés, rechazó este martes públicamente la propuesta de Sánchez al considerar que un estado de alarma por territorios, gestionado por los Gobiernos regionales, no es ni «imprescindible» ni tampoco «necesario».

La consellera de Salud, Alba Vergés
La consellera de Salud, Alba Vergés Alejandro García | efe

«No pedimos un cierre», señaló en una rueda de prensa en la que apuntó a los «inconvenientes» que, a su juicio, genera «la toma de decisiones» para las instituciones catalanas cuando se activa este instrumento, ya que algunas competencias pasan a formar parte del Estado. ¿Qué quiere Cataluña? Defiende firmemente el plan de emergencia elaborado por el Govern al principio de la pandemia. «Es una herramienta que ha sido muy útil para todos los sectores de nuestra sociedad», remarcó la consellera.

Tampoco el País Vasco ve necesario decretar nuevamente el estado de alarma. El lehendakari, Íñigo Urkullu, defendió este martes la actual coordinación y «comunicación permanente» entre ambos Ejecutivos para hacer frente a la segunda oleada de la pandemia y abordar sus consecuencias en distintos ámbitos «sin necesidad de otro tipo de figuras». «Hay una comunicación constante con el Gobierno español. Hay una colaboración, hay una disposición, desde la lealtad, a lo que es compartir las preocupaciones. Creo que es ejemplo suficiente de la coordinación que existe sin necesidad de otro tipo de figuras», insistió.

Los militares como rastreadores sí son bienvenidos

Sí celebró Vergés que Defensa haya puesto a disposición de las comunidades a 2.000 militares para que auxilien como «rastreadores» contra los casos de covid-19, a pesar de abogar por «centrarse» en los asuntos que requieren una respuesta más «eficaz y útil». También la Xunta aceptó de buena gana la oferta del Gobierno, tanto que ya ha solicitado este refuerzo. El pasado viernes las autonomías ya trataron este tema con el Ejecutivo. Quedan por concretar números y fechas de incorporación.