Suecia registra su mayor número de muertos en 150 años

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En el primer semestre del 2020 murieron 51.405, una cifra que no se había alcanzado desde la hambruna del 1869

20 ago 2020 . Actualizado a las 17:57 h.

Suecia apostó por la inmunidad de grupo o de rebaño en su estrategia ante el covid-19 y descartó el cierre duro, con confinamiento y paralización de la economía, que llevaron a cabo otros gobiernos de todo el mundo para frenar los contagios. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recordó recientemente que los científicos todavía saben muy poco sobre los anticuerpos generados por el virus, por lo que es tremendamente arriesgado seguir esa teoría. Las últimas cifras aportadas por su Departamento Nacional de Estadísticas también ponen en entredicho la opción elegida. El país batió en la primera mitad del 2020 el récord de muertes de los últimos 150 años, con 51.405 fallecimientos, 5.800 registrados como víctimas del coronavirus. El número de víctimas por 100.000 habitantes sigue siendo inferior al de, por ejemplo, España o el Reino Unido, pero sí que es muy superior al registrado en otras naciones nórdicas con las que la comparación es más razonable teniendo en cuenta la población, el movimiento de extranjeros dentro de sus fronteras e incluso el tipo de relaciones sociales y el  clima.

Los suecos tienen que remontarse al año 1869 para encontrar una cifra más alta de muertos en seis meses. Durante la primera mitad de aquel año fallecieron 55.431 personas debido a la hambruna que castigó a todo el territorio, y en la primera mitad del 2020 perdieron al vida un total de 51.405 suecos. Hay que tener en cuenta que proporcionalmente hizo más daño el hambre del siglo XIX que el coronavirus, ya que entonces la población apenas superaba los cuatro millones de habitantes, frente a los 10,3 de la última actualización de datos.

Los que critican la gestión llevada a cabo por Suecia en esta crisis lanzan sus acusaciones contra Anders Tegnell, el epidemiólogo que lidera la estrategia sanitaria del Gobierno sueco durante la pandemia. Cuando en el mes de junio se disparó el número de fallecimientos en las residencias de mayores Tegnell admitió que los responsables de Sanidad del Ejecutivo no esperaban que el coronavirus pudiera ser tan letal en este tipo de centros y entre la población de avanzada edad.