El rápido aumento de los casos de covid-19 obliga a Johnson a retrasar la desescalada

juan francisco alonso LONDRES / E. LA VOZ

SOCIEDAD

FACUNDO ARRIZABALAGA

En el norte se prohíben las reuniones familiares en casas entre personas que no convivan juntas

01 ago 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Los británicos tendrán que esperar un poco más para volver a una discoteca, al cine, al teatro, para jugar en una bolera o un casino y para hacerse tratamientos faciales en salones de belleza. ¿La razón? El Gobierno anunció que retrasaba 15 días la cuarta fase de la desescalada, la cual incluía la reapertura hoy de estos comercios y establecimientos, debido al repunte en el número de casos de covid-19 registrado en los últimos días.

«Debemos pisar el pedal del freno (a la vuelta a la normalidad) para tener el virus bajo control», afirmó ayer el primer ministro Boris Johnson, durante una imprevista conferencia de prensa celebrada en el 10 de Downing Street, que se produjo menos de 24 horas después de que su administración anunciara las nuevas restricciones que impuso al norte de Inglaterra para frenar la temida segunda ola. «Hasta el 15 de agosto en los casinos, boleras, pistas de patinaje y los restantes servicios de contacto cercano deben permanecer cerrados. Las actuaciones en interiores no se reanudarán, los primeros ejercicios de reuniones de masas en recintos deportivos y centros de conferencias no tendrán lugar, y no se permitirán bodas de más de 30 personas», dijo, para luego agregar: «Sé que las medidas que estamos tomando son verdadero golpe para muchas personas (…) en realidad lo siento, pero no podemos arriesgarnos».

La Oficina Nacional de Estadísticas (ONS, por sus siglas en inglés) reveló que en los últimos días 4.900 personas se han contagiado diariamente con el coronavirus en el país, frente a 3.000 del 14 de julio y 2.000 a principios del mismo mes.

Por otra parte, las mascarillas terminarán formando parte de la vestimenta de los ciudadanos en el Reino Unido, tal y como viene ocurriendo en otros países, pues desde el 8 de agosto su uso será obligatorio en museos, galerías, cines, iglesias y demás recintos con mucho tránsito de gente. Desde principios de junio se deben utilizar en el transporte público y desde el pasado 24 de julio son imprescindibles para hacer compras en los supermercados y en todo tipo de comercio.

Prohibidas las visitas

Y mientras la cuarta fase de la desescalada se pospone, en ciudades como Mánchester y en otras localidades del norte de Inglaterra los ciudadanos ya no podrán reunirse con amigos y familiares dentro de sus casas y los encuentros sociales en pubs, restaurantes, cines y tiendas solo estarán permitidos entre miembros de una misma familia o amigos que vivan bajo el mismo techo.

Sin embargo, lo que no se retrasará más es el inicio de la vuelta a las oficinas. Así desde hoy las empresas deberían comenzar a llamar a sus empleados para regresar a sus puestos de trabajo, una instrucción que gigantes como Google ya anunciaron que no atenderán, porque permitirán a sus trabajadores seguir teletrabajando hasta 2021. Las nuevas medidas gubernamentales han provocado críticas por doquier. «Es un golpe para los negocios que estaban comenzando a ponerse en marcha», afirmaron desde la Cámara Británica de Comercio, mientras que desde oposición laborista y liberal demócrata acusaron a las autoridades de generar confusión entre la ciudadanía.