Los sanitarios infectados fueron en Galicia el factor de difusión del covid-19 más relevante

Elisa Álvarez González
Elisa Álvarez SANTIAGO / LA VOZ

SOCIEDAD

Enfermera del Chuac colocándose el equipo de protección durante la pandemia del coronavirus
Enfermera del Chuac colocándose el equipo de protección durante la pandemia del coronavirus MARCOS MÍGUEZ

La movilidad desde Madrid fue otra de las causas con más peso

23 jul 2020 . Actualizado a las 11:11 h.

El covid-19 tuvo una incidencia desigual en las distintas zonas de España tanto en intensidad como en velocidad. ¿Por qué? Eso es lo que estudian investigadores del Centro Nacional de Epidemiología y del Ciber de Salud Pública, que analizan los distintos factores que han contribuido a la difusión de la epidemia. Y los resultados son que durante el período de ascenso de la pandemia hubo cinco elementos relevantes: el mayor número de plazas en residencias para mayores de 70 años, la tasa de personal sanitario infectado, la movilidad interna, la movilidad externa desde Madrid y la del País Vasco.

Estos son para los investigadores los factores que más contribuyeron a la expansión inicial de la pandemia, por encima de otros como la densidad de población, el transporte o la salud de los ciudadanos. Sin embargo, en cada comunidad unas causas pesaron más que otras. Por ejemplo, en Madrid y en Cataluña la movilidad interna fue el factor más intenso, en Castilla y León el número de plazas en residencias, y en La Rioja la movilidad desde el País Vasco.

¿Y en Galicia? Las conclusiones del estudio recogen que el personal sanitario infectado ha sido el factor con mayor efecto, siendo este moderado alto: «El resto han tenido una intensidad menor en el ritmo de difusión de la epidemia». La influencia del porcentaje de sanitarios infectados en el ascenso de la curva puede deberse a dos motivos. Por un lado, ha sido uno de los colectivos más golpeados por el SARS-CoV-2, lo que incrementa directamente el número de casos y, por otro, ha sido un eslabón más en la cadena de transmisión del virus, «especialmente en los primeros días de la epidemia, cuando no se implementaban estrictas medidas de protección e higiene».

El informe analiza otros parámetros, como las fechas epidemiológicas claves, es decir, cuándo empezaron a dispararse los casos, cuándo llegó el pico y cuándo se estabilizó la pandemia. En Galicia la tasa de disparo arrancó el 7 de marzo: fue casi la última comunidad de España antes de Asturias, que empezó el 8. A partir de ahí hubo 13 jornadas de intensa subida hasta llegar al pico el 20 de marzo. Ese día representó el pico para otras ocho autonomías. Tras un período de descenso, el 7 de mayo es la fecha de la tasa de estabilización.