Vilanova habilita el pabellón para aislar a posibles positivos de covid

Bea Costa
bea costa VILANOVA / LA VOZ

SOCIEDAD

Rosa Estévez

La llegada de peregrinos con fiebre hizo saltar las alarmas, aunque dieron negativo. La alcaldesa de Meis, indignada con la actitud de la Xunta ante otra sospecha de contagio

18 jul 2020 . Actualizado a las 11:16 h.

El Concello de Vilanova ha tomado medidas inmediatas ante el mínimo temor de que pueda haber algún caso de coronavirus en el municipio. En la pista deportiva del pabellón multiusos no rodará ningún balón este verano y en su lugar se han dispuesto colchones por el suelo. El motivo es que este local se ha habilitado como zona de aislamiento ante cualquier sospecha de un positivo por covid. Ya se hizo el martes por la tarde y se volverá a hacer siempre que sea preciso.

Anteayer saltaron todas las alarmas en Vilanova. Varios peregrinos de un grupo de quince personas procedentes de Portugal que están haciendo la Variante Espiritual del Camino de Santiago presentaban fiebre al llegar al albergue de la localidad, más de 37 grados y en algún caso hasta 38,5, lo que llevó al Concello a tomar medidas urgentes. El propio alcalde, Gonzalo Durán, se puso al frente del dispositivo -es médico de profesión- y el primer paso fue aislar al grupo en la pista deportiva. Según informó el regidor, se siguieron todos los protocolos de seguridad y hasta el punto se desplazó personal del Punto de Atención Continuada (PAC) de Vilagarcía, que realizaron pruebas PCR.

«Antes das 23 horas, determinouse nunha primeira valoración que eran todas negativas para coronavirus, validándose dito resultado á primeira hora», según informa el Sergas. Tras pasar la noche en el pabellón, los peregrinos se desplazaron ayer a Armenteira para reanudar la marcha. El alcalde de Vilanova considera que fueron víctimas de una insolación.

La alcaldesa de Meis, indignada por que «a Xunta deixounos tirados» ante un posible contagio

«Unha vez mais, os protocolos e a comunicación entre os diferentes niveis asistenciais para a detección de posibles casos covid funcionaron de forma correcta na área sanitaria de Pontevedra e O Salnés», indicaban ayer desde el Sergas en alusión al episodio vivido en Vilanova, aunque no todo el mundo comparte esta opinión.

La alcaldesa de Meis, Marta Giráldez, expresaba ayer al mediodía su indignación por que, según informó, «a Xunta deixounos tirados» ante la sospecha de un positivo en el albergue de peregrinos de Armenteira. Una vez que trascendió que un grupo de peregrinos llegados a Vilanova presentaban fiebre, se comprobó que una mujer alemana, de unos sesenta años, había dormido con este mismo grupo la noche anterior en el albergue de Pontevedra. Ella no presentaba síntomas, pero el Concello decidió dar aviso a la consellería para que se hiciese cargo de la situación. «Desde ás 20.30 ás 23.30 horas estiveron mareándonos dun teléfono a outro para ao final dicirnos que tiñamos que illala baixo a nosa responsabilidade, que a mandáramos a un hotel, dixéronos», explicaba ayer la alcaldesa visiblemente molesta.

Tras movilizar al personal municipal y dotarlo de equipos de protección (EPI), la solución que se adoptó finalmente fue aislar a la mujer en el local social situado en la planta superior del albergue, donde se la acomodó en un colchón. Por la mañana llegaron por fin los resultados de la prueba PCR y, ya libre de sospecha, la peregrina pudo salir de su confinamiento. El desayuno se lo tuvieron que servir dos concejales a primera hora, dejando una bandeja tras la puerta.