Estilo de vida atlántico: dieta, deporte y reuniones familiares para vivir más

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

La bióloga, en la mesa saludable organizada por Vegalsa-Eroski
La bióloga, en la mesa saludable organizada por Vegalsa-Eroski VÍTOR MEJUTO

La bióloga Ana Belén Crujeiras explica cómo el ambiente influye en el ADN

09 jul 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

«Pensemos en cómo el ADN está compuesto por distintas letras unidas de forma secuencial que dan información sobre el libro de la vida». A ello invitó ayer la bióloga y directora del grupo de investigación Epigenómica en Endocrinología y Nutrición del IDUS-CHUS, Ana Belén Crujeiras, durante la mesa saludable organizada por Vegalsa-Eroski y la Fundación Dieta Atlántica y retransmitida a través de la web de La Voz de Galicia, su canal de Youtube y sus redes sociales.

Lo hizo para explicar que, para organizar ese libro de la vida, es necesario puntuar esas letras colocadas sin sentido: «La epigenética -explicó- es la ortografía y la puntuación que dan sentido al libro de la vida. El lápiz que va a realizar esa puntuación es el ambiente en el que vivimos, la dieta, el ejercicio, nuestro estado psicológico, las condiciones familiares... Cuando esa ortografía y esa puntuación no son correctas pueden dar lugar a la aparición de distintas enfermedades».

Basándose en esa metáfora, Crujeiras aludió a la urgencia de regresar a lo que, más que dieta atlántica, definió como estilo de vida atlántico. Esa forma de vivir, dijo, es una combinación de esa dieta basaba en el producto fresco y de proximidad en la que priman las verduras cocinadas a fuego lento, los pescados, los lácteos, las conservas o, aunque el consumo recomendable sea menor, la carne, con paseos en la naturaleza y con esas reuniones familiares propias de Galicia que tanto contribuyen al bienestar psicológico de las personas.

Todos esos elementos son los que explican, como recordó, que Galicia sea una de las comunidades con mayor número de centenarios, algo que podría cambiar en el caso de que no se vuelva a esa dieta atlántica que se priorizaba en las casas de los abuelos: «Lo que preocupa ahora es ese alejamiento del patrón de dieta atlántica porque puede que ello haga que nuestros hijos vivan menos que nuestros abuelos».

En este sentido, hizo hincapié en uno de los grandes problemas a los que se enfrenta la sociedad actual: la obesidad. «En estos momentos es, después del tabaco, la primera causa de cáncer prevenible, pero podría llegar a ser la primera», advirtió.

La velocidad con la que muchas personas enfrentan el día a día nos ha llevado a dejarnos seducir por alimentos ultraprocesados o preparados, apuntó, pero nunca es tarde para volver a ese consumo de producto fresco y de temporada. El beneficio está probado: aunque hayamos llevado hábitos no tan saludables, todo es reversible con un buen estilo de vida atlántico.