El virus se expande en América y África mientras Europa trata de contenerlo

SOCIEDAD

Fernando Souza / ZUMA Wire / dpa

Estados Unidos y Brasil, que minimizaron el covid-19, son ahora los más afectados

05 jul 2020 . Actualizado a las 18:31 h.

Un millón de nuevos casos a la semana. Ese es el ritmo de contagio que ha alcanzado la pandemia en el mundo. Once millones de casos acumulados que se reparten de forma muy heterogénea entre los distintos países. El SARS-CoV-2 empezó su recorrido en China y causó estragos en países como Italia y España. Pero la situación ha cambiado mucho. América es ahora el principal foco de contagio y países como India y Pakistán preocupan sobre manera, teniendo en cuenta además la debilidad de sus sistemas de salud. Otros, como Corea del Sur o Nueva Zelanda, ejemplos de cómo afrontar el virus, experimentan pequeños repuntes.

Según los últimos datos publicados por el Ministerio de Sanidad, ahora mismo los países que más casos diarios están reportando se sitúan fuera de las fronteras europeas. Estados Unidos supera los 50.000 diarios y Brasil se acerca a esta cifra. La India, con 21.000, o Sudáfrica, con ocho mil casos diarios, están en plena curva ascendente del covid-19. Son países de magnitudes diferentes, por lo que si se analiza la tasa por cien mil habitantes, en estos momentos la pandemia es muy preocupante, además de en Estados Unidos y Brasil, en Catar (483 casos por cien mil); Chile (341); Arabia Saudí (160); Perú (159); y Sudáfrica (151).

Europa, pese a tener cifras alarmantes, no llega a estas tasas. Suecia, Rusia y Bielorrusia son los países en donde el covid-19 campa más a sus anchas, aunque no hay que olvidar la situación por la que atraviesa el Reino Unido o Portugal, un ejemplo en la contención del virus pero que ha visto como los rebrotes del entorno de Lisboa complican la situación del país luso.

El caso de Estados Unidos merece una explicación aparte. Sin medidas de confinamiento en un primer momento y con un presidente que sigue sin ponerse mascarilla y prefiere apostar por la economía, los casos acumulados superan los 2,7 millones y los diarios los 50.000 contagios. Nueva York se mantiene como el estado más golpeado pero los positivos repuntan en zonas del sur y el oeste como Florida, Texas, California, Arizona o Georgia. Tanto, que el epidemiólogo de la Casa Blanca, Anthony Fauci, asegura que el país puede llegar a los cien mil casos al día y un republicano aliado de Trump como es el gobernador de Texas, Greg Abbott, ha declarado el uso obligatorio de la mascarilla.

Otro de los países con un mandatario negacionista que sufre los peores embates del coronavirus es Brasil, cuyo presidente acaba de vetar algunas partes de un proyecto de ley que obligaba al uso de mascarillas. El país lleva un millón y medio de casos, con casi 50.000 diarios. Exceptuando casos contados como Uruguay -con menos de mil casos- el virus se expande por el continente americano. Perú, Chile, México o Colombia son solo algunos ejemplos. El covid-19 avanza sin freno en América y amenaza ya a muchos países africanos mientras que en Europa se mantiene una situación desigual.

Pero hay Estados por todo el mundo que pueden seguir presumiendo de haber logrado atajarlo. Nueva Zelanda, Taiwán, Corea del Sur e incluso Japón, así como algunos países nórdicos y eslavos. En el ránking de la John Hopkins, y salvando pequeños países e islas con poca población, destacan los casos de Taiwán, Vietnam, Nueva Zelanda, Eslovenia, Eslovaquia, Lituania, e incluso Grecia, con 3.500 casos acumulados para una población que supera los diez millones. Los nórdicos también afrontaron el virus con buenos resultados, salvo el caso de Suecia.

 

Suecia paga su política de ignorar el covid y no imponer confinamientos

El modelo sueco para enfrentarse al virus, que en un primer momento pudo despertar expectativas sobre cuál sería el resultado, ha demostrado ser un desastre. Sin confinamientos, sin uso obligatorio de mascarillas y dando la espalda a la pandemia, el país nórdico acumula más de 5.400 fallecidos y 71.500 casos según la Johns Hopkins. Y no es que estén descendiendo. En los últimos 14 días la incidencia acumulada es de casi 143 casos por cien mil habitantes -la más alta de Europa-, con más de 900 casos diarios.

Una situación muy distinta a la de sus vecinos nórdicos, que aplicaron restricciones desde el principio. Finlandia, con poco mas de siete mil casos, es el ejemplo más positivo. Su estrategia contra la pandemia ha elevado la popularidad de la primera ministra de un país en el que se aplicaron restricciones, pero combinándolas con la detección precoz al hacer test masivos y con el rastreo de los contagios para frenar la transmisión del coronavirus.

Sudáfrica y los países de Asia occidental, en plena escalada

El coronavirus llegó con mayor retraso a África pero se ha diseminado de forma peligrosa por ese continente. El caso más llamativo es Sudáfrica, que supera los 168.000 casos acumulados y las 2.800 muertes. Pero el problema no es tanto el cómputo global sino la tendencia que sigue este país, con 8.700 positivos más cada día según datos de Sanidad. No es el único país que preocupa: Egipto, Nigeria o Ghana tampoco son capaces de controlar sus focos. Lo mismo ocurre en el Asia occidental, con Arabia Saudí, Emiratos Árabes o Kuwait en plena escalada.

Y de esta radiografía del coronavirus no hay que olvidar los rebrotes que están experimentando algunos países. Israel ha tenido que frenar la desescalada al pasar de los mil casos; Corea del Sur tuvo que dar marcha atrás en sus medidas de desconfinamiento tras varios brotes a principios de junio e incluso Nueva Zelanda, que eliminó el virus, recibió dos casos importados a mediados de junio.