Feijoo pide cambios en la legislación sanitaria para regular la movilidad en caso de rebrotes

Juan María Capeáns Garrido
Juan Capeáns SANTIAGO / LA VOZ

SOCIEDAD

Cree que el Parlamento no debe irse de vacaciones sin aprobar un resorte legal, ya que la Xunta solo puede intervenir en determinadas zonas con permiso de los jueces

14 jun 2020 . Actualizado a las 15:22 h.

El presidente de la Xunta participó en la decimocuarta reunión dominical con Pedro Sánchez y con todos sus homólogos autonómicos, que también la última en su caso bajo el mando único que ampara el estado de alarma. Habrá otra reunión más, de carácter presencial, a finales de julio, pero antes de esa cita Alberto Núñez Feijoo quiso mostrar su agradecimiento al Ministerio de Sanidad por el trabajo realizado estos meses y por la «fructífera cooperación» con Galicia, pese a las «diferencias» que se evidenciaron en los últimos tres meses. Con un tono muy distinto al de otras comparecencias, el líder gallego concedió al Gobierno que siempre había intentado «acertar» en sus decisiones, aunque también detectó «erros» y, en ocasiones, algunas rectificaciones sobre la marcha a las peticiones que hacía Galicia. Llegados a este punto, Feijoo indicó que los gallegos tienen «o mérito de poder reunir as condicións para saír do estado de alarma, pero desde agora tamén teñen a responsabilidade» de preservar la seguridad de todos.

Por ello, el dirigente gallego centró su turno de intervención en lo que pueda ocurrir a partir del día 21, cuando se abran los movimientos entre provincias y comunidades, y también de las fronteras exteriores. Para Feijoo, es clave que España mantenga un criterio único para abordar los posibles rebrotes, pero para ello ve fundamental ampliar la legislación sanitaria, de forma que el Gobierno tenga potestad para limitar movimientos en concellos y comunidades sin necesidad de activar de nuevo el estado de alarma. La Xunta no tiene competencias para cerrar infraestructuras del Estado, ni siquiera la comunidad autónoma, y la única herramienta disponible sería acudir a un juez para actuar en zonas limitadas, un recurso legal que hará falta ante los más que posibles rebrotes en los próximos dos años en los que no habrá una vacuna contra el coronavirus. De ahí que Feijoo -y varios presidentes autonómicos- pidiese que el Congreso no se vaya de vacaciones sin ampliar las posibilidades de restricción de movimientos ante el regreso «máis pronto que tarde» de nuevos casos. Cuestionado sobre la reacción de Sánchez a tal petición, reconoció que «seguimos sen ter respostas. Sería imperdoable repetir a improvisación de principios da pandemia cando se reabra toda España», alertó. 

Fronteras

Sobre la recuperación de la movilidad y la apertura inminente de fronteras, con excepción de Portugal hasta el 1 de julio, el jefe del Ejecutivo gallego sostuvo que no era su intención «estigmatizar» a nadie por su lugar de procedencia. Al contrario, se mostró convencido de que Galicia no va a cambiar su carácter «aberto» por la crisis sanitaria, pero consideró lógico proteger la salud de los que vengan y de los que ya están, comportamiento que espera para los gallegos que viajen en los próximos meses. En Galicia, dijo Feijoo, entraron 1,8 millones de personas entre junio y septiembre del año pasado. «Este ano non entrará tanta xente, pero é inevitable reabrir a actividade turística», por eso pidió un único plan de rebrotes al que espera contribuir al continuar enviando datos actualizados epidemiológicos y diarios para que el Ministerio de Sanidad pueda seguir monitorizando la situación con una visión global.

Además, en clave interna, pidió al Gobierno que permita suspender las limitaciones en la tasa de reposición de trabajadores públicos de la sanidad y los servicios sociales. De obtener este permiso, la Xunta activaría una oposición con más de 3.500 plazas, una cifra que la consellería considera estratégica para abordar las reformas en atención primaria, los servicios pediátricos o la medicalización de las residencias de mayores.

En el ámbito educativo, el titular de la Xunta cree que al Ministerio de Educación le ha faltado concreción a la hora de establecer criterios para un retorno a las aulas seguro, y ante esta circunstancia propuso que se tomen como referencia las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud. Además, justificó el hecho de que a partir de mañana se vayan a abrir los parques infantiles públicos o que se celebren campamentos este verano y, sin embargo, se haya decidido no retomar la actividad de las escuelas infantiles hasta septiembre. Feijoo explicó que el criterio sanitario se ha conformado atendiendo a las actividades que se celebran al aire libre y las que son de interior, igual que ha ocurrido en otras actividades como la hostelería. Además, puntualizó que la demanda de asistencia a las guarderías era baja, según informaron los propios centros, y también destacó la diferencia que supone mantener protocolos de seguridad entre pequeños de 0 a 3 años o hacerlo con niños de más edad, que son los asistentes habituales a los campamentos. 

Para la remontada económica, Feijoo insistió en reducir el IVA de las mascarillas y ablandar los impuestos al sector turístico, además de recordarle a Sánchez la necesidad de una solución para la viabilidad de Alcoa, que a su juicio pasa por un precio estable y pactado de la electricidad, cuestión que depende del Gobierno. «No he tenido respuesta del presidente», lamentó el dirigente autonómico, que aunque se mostró comprensivo porque se trata de un tema específico de Galicia, también cree que la situación del país no está «para perder empleos. Es fundamental que no se cierre, y menos ahora», zanjó. 

Repartos de fondos

En el apartado de reivindicaciones, Feijoo volvió a poner de relieve el malestar de la Xunta por los criterios que está adoptando el Gobierno de España para repartir los fondos de la recuperación. De momento, Galicia desconoce cuál es el montante que le corresponde de los 16.000 millones de euros, aunque insinuó que, proporcionalmente, serían cerca de mil, pero se teme que la cifra se quedará muy lejos. La misma queja la refirió para el sector del vino, que representa a un 6 % de toda la producción de España y que solo va a percibir 300.000 euros de una inyección de 90 millones. Por último, y ante el inminente anuncio de medidas específicas para el sector de la automoción, el titular de la Xunta reclamó que las ayudas a la compra de coches no tengan en cuenta en exclusiva la apuesta por los modelos más ecológicos, pues solo beneficiarían, a su juicio, a las rentas más altas, que son las que pueden afrontar la diferencia de precio que todavía existe con los de motorizaciones tradicionales.