La primera vez que La Voz habló de... veraneo: «Bienvenidos, bañistas»

Jesús Flores Lojo
Jesus Flores REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Un turista madrileño en A Coruña, en verano del 66
ALBERTO MARTI VILLARDEFRANCOS

[...] l Un lector de Astorga nos pregunta si hay cólera en La Coruña. Los habitantes del interior deben tener presente al elegir playas para el veraneo nuestros datos tan satisfactorios [...]. Hace 135 años Galicia también abría las puertas de sus meses de calor en medio de una epidemia, con inquietudes muy similares a las presentes: el maná de los turistas y el miedo al contagio. Todo tan parecido que, si buscamos la primera vez que el periódico usó la palabra vacaciones, ésta aparece con un apellido: «parlamentarias».

10 jun 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

«La salud de esta capital no puede ser más satisfactoria, y esto contribuirá seguramente a que un buen número de bañistas tomen esta población como punto de veraneo». Si somos rigurosos, la primera vez que en La Voz se empleó el término veraneo no fue esta del 7 de junio de 1885 que pretendía promocionar a Galicia como lo que hoy llamaríamos «destino turístico seguro», sino un titular de agosto de 1883 para recordarle a los lectores que la actividad política se había tomado unos días de asueto. «Los políticos, de veraneo». Lo mismo sucede si buscamos en el archivo hemerográfico de La Voz la palabra vacaciones: se estrena en las páginas del periódico con el apellido «...parlamentarias». Pero esa es otra historia más previsible y menos curiosa que esta otra.

Entre 1854 y 1885 —año al que pertenece el extracto de La Voz que publicamos unas líneas más arriba— murieron en España unas 250.000 personas por el cólera, la fiebre amarilla y la viruela. En las páginas del periódico de aquellos días se puede comprobar el gran impacto que estas epidemias tuvieron en la vida cotidiana de una época en la que estas infecciones aún se trataban con sangrados o el elixir Rob Lechaux «a base de berros y zarzaparrilla roja», como explica la publicidad en las mismas páginas en las que se anuncian «coronas y angelitos para cementerios» y «cruces para colocar sobre las sepulturas, a precios arreglados».

La nueva normalidad de 1885

El mundo no se paró entonces, quizás por esta coexistencia pacífica entre la vida y la muerte que se desprende de estos textos publicitarios, quizás también en buena medida porque la globalización era de juguete, pero en la nueva normalidad de 1884-1885 los accesos marítimos y las fronteras terrestres con Galicia vieron establecerse lazaretos y controles para evitar la posibilidad de contagio a causa de los movimientos de población, como el de los segadores que regresaban de Castilla.

Y con la llegada del verano también se planteó un debate muy parecido al que asistimos estos días en torno a la conveniencia de la llegada de turistas, aunque con la balanza muy inclinada hacia estos últimos. La Voz tenía entonces a su propio Fernando Simón, en este caso un redactor anónimo que iba dando cuenta de los progresos en la salud de la población y animaba a los posibles turistas: «Total de fallecidos, varones y hembras, 26. Resulta de estos datos un aumento de población de 12 individuos en diez días», comenzaba una de las frecuentes comparecencias escritas de nuestro decimonónico colega, que apostillaba como si de una respuesta a una cuestión en rueda de prensa se tratase: «Esto es lo mejor que puedo contestarle a Pedro Mato, de Astorga, que pregunta si hay cólera en Coruña y esto es lo que deben tener presente los habitantes del interior al elegir playas para el veraneo. Es posible que no muchas capitales de España puedan presentar unos datos sanitarios tan satisfactorios como los nuestros». Sin duda, una buena noticia para el emprendedor que solo unas páginas más adelante de aquel ejemplar veraniego de 1885 anunciaba el alquiler de «una preciosa casa de campo, amueblada con todo lo necesario, con buenas aguas dentro de la misma huerta». Seguro que en aquella época alguien también dijo eso de «después de esto nada, será igual».

CON TU SUSCRIPCIÓN PUEDES ACCEDER A TODAS LAS NOTICIAS PUBLICADAS EN LA VOZ DE GALICIA, DESDE 1882 HASTA HOY, BUSCANDO POR PALABRA CLAVE