Abascal: «gritar viva el 8M en este contexto es lo mismo que gritar viva la enfermedad y viva la muerte»

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

SOCIEDAD

Santiago Abascal, durante una sesión del Congreso celebrada el pasado abril
Santiago Abascal, durante una sesión del Congreso celebrada el pasado abril Sebastián Mariscal | Europa Press

Advierte a Sánchez de que tendrá que responder ante la Justicia y reivindica las caceroladas y las manifestaciones de ciudadanos acosados por «matones» del Gobierno

03 jun 2020 . Actualizado a las 16:35 h.

«Ha venido aquí a gritar ‘Viva el 8M', que en este contexto es lo mismo que gritar ‘Viva la enfermedad y viva la muerte'». El líder de Vox, Santiago Abascal comenzó su intervención culpabilizando al Gobierno de haber provocado miles de muertos y de haber arruinado a millones de españoles «por su negligencia» y de haber autorizado la manifestación del Día de la Mujer del 8 de marzo a sabiendas del riesgo de contagio que existía. Abascal se dirigió a los españoles para pedirles que «elijan el camino de la concordia nacional, la auténtica, no la impostada, y para que sigan ejerciendo sus derechos con civismo». Y reclamó a Sánchez que no utilice políticamente la bandera de España. «Bastaría con decirle a sus cómplices de investidura que no la quemen y no la arríen de los edificios oficiales», dijo. «Y de paso, anime a sus huestes, a sus militantes, a que la enarbolen en los mítines del PSOE y que lo hagan también los señores de Podemos», añadió.

Abascal cargó también contra el vicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias, ausente durante su intervención, al que acusó de haber llamado «terrorista» a todo el mundo, incluidos conocidos empresarios, y rasgarse las vestiduras cuando le hablan del pasado de su padre. Insistió en la tesis esgrimida por Cayetana Álvarez de Toledo y recordó que fue el propio Iglesias el que dijo que su padre militó en el grupo terrorista FRAP. «El guerracivilismo al que se refieren ustedes es solo para desviar la atención de sus responsabilidades», indicó el líder de Vox.

Aseguró que todo el Gobierno tendrá que responder tarde o temprano ante los tribunales por haber destituido ilegalmente la coronel Diego Pérez de los Cobos, por haber mentido en el número de víctimas del covid-19 y por haber instaurado un «estado de excepción encubierto». Abascal acusó al Gobierno de no haber pagado las ayudas prometidas a los españoles y sin embargo haber aprobado una renta mínima que equiparó a una «cartilla de racionamiento. «Una renta mínima universal y permanente no es más que un augurio de pobreza», advirtió, añadiendo que provocará «un brutal efecto llamada» ante «el maná que parece del cielo» a miles de extranjeros víctimas de las mafias de las pateras que llegarán para aprovecharse se es renta universal.

Abascal reivindicó las caceroladas en toda España y acusó al Gobierno de haber ordenado a las fuerzas del orden hostigar a quienes se manifestaban pacíficamente. «Los españoles les han perdido el miedo en las calles y los pocos incidentes los han hecho sus matones», indicó.

Y, frente a la advertencia de Sánchez contra la crispación y los insultos en el Congreso, recordó que desde el PSOE y Unidas Podemos se ha llamado a Vox «inmundicia, parásitos, apelación implícita a los crímenes del Frente Popular para decir que los diputados de Vox desapareceremos de esta Cámara, acusaciones de golpismo, de pretender la insubordinación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y de las Fuerzas Armadas». «Es decir, insultos, insultos, mentiras y mentiras», concluyo.