Francia cambia de fase y París recupera sus terrazas

P. Rosas, M. O. COLPISA / LA VOZ

SOCIEDAD

BENOIT TESSIER| Reuters

El avance en la desescalada permite ya a la mayoría de los ciudadanos moverse a cualquier punto del país

02 jun 2020 . Actualizado a las 21:50 h.

Francia avanzó este martes a una nueva fase de la desescalada después un último puente -el lunes fue festivo en el país- aún con restricciones, y en el que los restauradores ultimaban los preparativos para volver a abrir sus establecimientos tras dos meses y medio de cierre. Bares y restaurantes pudieron abrir al completo en las zonas verdes y solo las terrazas en las naranjas. En París, donde solo pudieron abrir las terrazas, la alcaldesa Anne Hidalgo ha permitido que restaurantes y cafés utilicen parte del espacio público para ampliar sus terrazas o para instalar unas provisionales aquellos que no cuentan con una. Se permite un máximo de diez personas por mesa y se exige un metro de distancia entre cada grupo.

En el centro de la ciudad se podía ver de todo: algunos locales con las terrazas medio vacías y otros, clásicos, llenos hasta la bandera, sin distancia de seguridad ni mascarillas, que allí no son obligatorias, sino recomendadas.

Aunque no se puede hablar de vuelta a la normalidad, este martes fue un día importante en lo que se refiere al levantamiento de restricciones. Una de las principales novedades es que ya se pueden realizar desplazamientos a más de 100 kilómetros de distancia, a cualquier punto del país. Aún así, el primer ministro pidió a los franceses responsabilidad y que retrasen sus viajes lo máximo posible. De momento, las reuniones siguen estando limitadas a 10 personas. En la zona verde también pueden abrir los cámpings y alojamientos turísticos, mientras que en la naranja deberán esperar hasta el 22 de junio. Parques y jardines reabrieron al público después de dos meses, y las escuelas comienzan también a recuperar la normalidad, un objetivo de esta nueva fase, en la que han reabierto universidades, tanto en zonas verdes como naranjas. A medida que la epidemia remite, los franceses temen ahora más al paro que al coronavirus, como desvela el último sondeo. Un 79 % considera que la crisis económica es ahora mismo la mayor amenaza para el país, mientras que el 21 % cree que es el virus, según un sondeo de Ifop que recoge Le Parisien.

Desde el inicio de la desescalada el pasado 11 de mayo, en Francia se han detectado más de un centenar de focos de infección por el nuevo coronavirus, según reveló el epidemiólogo del Instituto Pasteur Arnaud Fontanet. El centro de investigación estima también que unos 4,5 millones de franceses se habrían visto afectados por el covid-19, muchos más de los declarados por los test, pero lejos de la inmunidad colectiva.

«Hay una bajada significativa de la epidemia de coronavirus en Francia», reconoció Fontanet, pero el hecho de que se hayan detectado más de cien focos en tres semanas revela que «el virus sigue ahí».