El sistema incorporó 8.500 defunciones de Cataluña que no se habían comunicado. La mortalidad creció un 55,2 % durante los meses del estado de alarma

M.Varela
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El coronavirus terminó con la vida, de forma directa e indirecta, de más de 43.000 personas en España. La actualización del Sistema de Monitorización de la Mortalidad diaria (MoMo), dependiente del Centro Nacional de Epidemiología del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), ha aflorado 13.250 decesos que aún no se habían incluido hasta ahora por los retrasos en los registros civiles durante los peores momentos de la pandemia. Así, entre el 13 de marzo y el 22 de mayo, período en el que España ya estaba bajo el estado de alarma, se registró un exceso de 43.034 defunciones por encima de las esperadas. En ese tiempo, el Ministerio de Sanidad rebajó el total de víctimas mortales por coronavirus a 26.995. El recuento oficial podría omitir de esta forma hasta 16.039 decesos por covid-19. 

El MoMo se obtiene a partir de 3.929 registros civiles informatizados del Ministerio de Justicia y se compara con la media de fallecimientos de los últimos once años. Así, para estos dos meses se estimaba la muerte de 77.817 personas. La crisis sanitaria del coronavirus supuso, según estos registros, la defunción de 120.851 españoles.

Buena parte de esos 13.000 registros que acaban de aflorar se produjeron tras el retraso en las notificaciones desde Cataluña. La comunidad comunicó, de golpe, 8.514 muertes al sistema que no se habían inscrito aún. En el último informe publicado por el ISCIII, que dejaba un exceso de mortalidad de 30.829 personas, se advertía sobre los retrasos desde el registro civil de Barcelona. «Teniendo en cuenta el período de exceso generalizado, se estima que se está infraestimando notablemente la mortalidad observada en este municipio y, por tanto, en su CCAA», advertía el pasado 25 de mayo. Según la actualización de este miércoles, el exceso de mortalidad durante la pandemia en Cataluña es del 96 %: se esperaban 12.195 fallecimientos y se han producido realmente 23.860. 

«Si contamos los fallecidos por coronavirus y lo comparamos con el exceso, todavía queda un número importante de fallecidos que podrían explicarse por otras razones», argumentó el director de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, durante su comparecencia diaria del miércoles sobre la evolución de la pandemia. El médico abrió la posibilidad a que en ese desfase existan personas que no pudiesen acudir a tiempo al hospital o pacientes con patologías «que pueden causar alta letalidad» y que no acudieron a tiempo a los centros sanitarios por temor a sufrir un contagio. «También habrá quien se lo haya pensado dos veces para no saturar los hospitales», continuó Simón.

Casi el triple en Madrid

En Castilla y León, el exceso observado es del 114 %. El MoMo estimaba que se iban a producir 3.164 pero se ha elevado a 6.759, más del doble. Aún mayor es ese desajuste en Castilla-La Mancha, donde el porcentaje se dispara al 206 %, con 5.114 muertes más de las esperadas, con 7.596 decesos notificados. Madrid muestra unas cifras similares: un 162 % más (14.104 personas), con 22.821 defunciones frente a las 8.716 esperadas. Como último ejemplo, Navarra tiene un exceso de 610 muertes (137% más), con 1.055 fallecimientos, en comparación con los 446 esperados.

El sistema apunta que los mayores retrasos de notificación por parte de los registros civiles en los últimos siete días se localizan ahora en Aragón y Cantabria, principalmente. Concretamente, los responsables del ISCIII entienden que hay una infranotificación superior al 36 % en Aragón durante la última semana y del 29 % en la comunidad cántabra. En Navarra es del 12 %.

En Galicia, el exceso observado entre el 21 de marzo y el 10 de abril fue del 23 %. La diferencia entre muertes registradas y esperadas para esta fecha fue de 429 personas. En este período, 306 gallegos perdieron la vida como consecuencia del covid-19 según los registros del Sergas, 123 menos de los que muestra el MoMo. La infranotificación en Galicia es del 7%, la sexta más alta del país.