Cautela en el regreso, a pesar del teórico alivio de la fase 2

La Voz

SOCIEDAD

MARCOS MÍGUEZ

La hostelería aguarda al menos hasta el fin de semana y otras actividades acusan la incertidumbre y la falta de rentabilidad

26 may 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Galicia entró en la fase 2 con pies de plomo. Después de la intensidad con la que afrontó el ingreso en la fase 1, la hostelería ha hecho sus cuentas y ha sopesado los riesgos sanitarios y ha decidido, en su gran mayoría, esperar la evolución de los acontecimientos. Agotar el mes es una de las opciones elegidas por el grueso del sector, que todavía se considera lastrado por las condiciones de los ERTEs, que complican la viabilidad del negocio con un acceso restringido al 40 % del aforo interior (la Xunta plantea ampliar a la mitad la próxima semana) y al 50 % de mesas de terraza. Los alojamientos permanecen cerrados, a pesar de que ya pueden disponer de las zonas comunes, hasta que la movilidad, al menos interprovincial, les garantice un flujo sostenible de clientela.

La recomendación de la reserva previa y el veto normativo a la barra alteraron la dinámica habitual de funcionamiento de los establecimientos orientados al consumo de bebidas y alimentos en dosis reducidas, como pinchos y tapas. Los restaurantes optaron por aguardar, al menos, hasta el jueves, al arrancar la fase en un día que, por lo general, se establece para el descanso del personal.

Al margen de la hostelería, otras actividades regresaron con timidez, debido a la imposibilidad de adaptar a tiempo sus protocolos sanitarios a lo establecido en la orden SND/440/2020 publicada el sábado o las dudas generadas por las ambigüedades del texto.

Estos son algunos testimonios de los que decidieron ponerse en marcha ayer, tras la inactividad:

MARCOS MIGUEZ

JOSÉ GESTO. Cafetería Alcalá (A Coruña)

«En 50 años que llevo nunca vi algo como esto, pero hay que adaptarse»

José Gesto fue uno de los hosteleros coruñeses que después de empezar con la reapertura de la terraza de su local ayer hizo lo mismo con el interior y como todos se enfrenta a experiencias nuevas a pesar de su dilatada experiencia. «En 50 años que llevo nunca vi algo como esto, pero hay que adaptarse», asegura José, quien espera que la situación se normalice «en pocos meses» y se resigna ante el panorama que se presenta: «Hay que acostumbrarse a vivir con ello». Como en la mayoría de locales, la jornada fue «tranquila», con muchos cafés y cañas según la hora.

Santi M. Amil

 JAVIER GÓMEZ SOTO O Lar da Sabela (Ourense)

«La gente es reticente a entrar, si no tuviésemos terraza no abriríamos»

En el casco viejo de Ourense pocos han decidido abrir y los que sí, casi «a la aventura». Javier Gómez Soto es de estos últimos «La gente es reticente a entrar, si no tuviésemos terraza no abriríamos. Y eso que tenemos muchísimas medidas higiénicas», afirma. Uno de los principales problemas en Ourense es , afirma, el hecho de tener un horario restringido de apertura. «¿Quién va a querer venir a cenar si no sabe si vamos a tener que levantarle de la mesa?», se pregunta.

JOSÉ RAMÓN MARTÍ. Cervecería Manducka (Noia)

«Ata o mes de xullo non creo que abramos a cociña de novo»

El primer día de la fase 2 de la desescalada apenas trajo cambios para José Ramón Martí Patiño, Pato. Este hostelero del municipio coruñés de Noia explicaba que la afluencia en su establecimiento ayer fue similar a la de cualquier otro día de la fase 1: «Foi unha mañá normal, ata tivemos pouca xente dentro do local. Ao estar bo día moitos quedaron xa na terraza». Asegura que no sabe muy bien qué esperar de la nueva normalidad tras la crisis del covid-19, y asume que la recuperación será lenta: «A xente aínda non sae como saía antes. Hai que ir pouco, porque tampouco hai moito carto. Quen máis quen menos levou un pau con isto». La incorporación del personal que está en ERTE también será paulatina. De momento, Pato cuenta con un camarero a media jornada para que le eche una mano después de dos semanas trabajando 15 horas diarias: «Coa cociñeira xa falei e ata o mes de xullo non creo que abramos a cociña de novo, ata que se normalicen un pouco a cousas».

 

Miguel Villar

JOSÉ TRONCHONI. Coordinador de letrados

«El teletrabajo ha sido un éxito, pero esto sigue al ralentí»

Los juzgados de Vigo registraron ayer largas colas a primera hora de la mañana porque solo se puede entrar por turnos de una persona. El coordinador de los letrados de la Administración de Justicia de la provincia de Pontevedra, José Tronchoni, admitió ayer que la jornada en Vigo transcurrió ayer al «ralentí» pero que espera que este martes se incorpore ya entre el 60 y el 70 % de los funcionarios. Será la Xunta hoy la que dictamine cómo se realizará la desescalada y cuántos funcionarios tendrán que reincorporarse. Tronchoni, que refuerza Vigo durante varios días a la semana, indicó que ha funcionado «muy bien» el teletrabajo entre los letrados judiciales, ya que dos tercios de este cuerpo están en casa realizando tareas, y algunos funcionarios también se han acogido.

 MÓNICA PÉREZ. Asociación Provincial de Autoescuelas (Lugo)

«Nos adaptamos a marchar forzadas tras la desagradable sorpresa del BOE»

Las autoescuelas, como centros de formación, regresaron a la actividad con el paso cambiado, tras la inesperada reducción de aforo recogida en el BOE (del 40 % a un tercio). «Puede ser decisiva para que un curso sea rentable o no», explica Mónica Pérez, presidenta de la asociación provincial lucense. «No podemos entenderlo. Disponemos de protocolos y aulas homologadas con cuatro metros cuadrados por alumno. Esta jornada ha sido de formación interna y adecuación a marchas forzadas», añade. «Hay mucha gente pendiente del carné para acceder al mercado laboral. Y en el caso de los camiones, tampoco entendemos cómo siguen paralizados por la Xunta los exámenes del CAP, requisito imprescindible», concluye.

Regreso gradual de museos y bibliotecas

Los museos científicos, salas de exposiciones y bibliotecas se suman a la oferta cultural en plena desescalada y, aunque algunas modalidades ya podían estar en funcionamiento, han decidido esperar para adaptarse a los protocolos sanitarios (o a la espera de órdenes más concretas). Es el caso de la gran mayoría de los situados en A Coruña, mientras en otras zonas como Ribeira ya reanudaron la actividad la biblioteca y el museo municipal y el Museo do Gravado de Artes.

Información elaborada por Pablo Gómez, David García, Cándida Andaluz, Marta Gómez y E. V. Pita.