Barómetro del CIS: La gestión del Gobierno ante la crisis del coronavirus divide a los españoles
SOCIEDAD
La preocupación por el covid-19 desciende, pero aumenta la inquietud por el paro
y las consecuencias económicas de la pandemia
19 may 2020 . Actualizado a las 21:37 h.
La mitad de los españoles desaprueba la gestión que está haciendo el Gobierno durante la crisis del coronavirus. Según el barómetro de Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) correspondiente al mes de mayo, un 48,4 % de los encuestados asegura que la política que está siguiendo el Ejecutivo para luchar contra el covid-19 le merece poca o ninguna confianza. Una cifra superior al 46 % que asegura tener mucha o bastante confianza en la labor del Ejecutivo de Pedro Sánchez. La inmensa mayoría de los españoles, un 98,7 % cree que las consecuencias económicas y laborales de la pandemia serán graves o muy graves.
Las entrevistas de la encuesta se realizaron entre el 4 y el 13 de mayo, antes de que el Gobierno planteara la quinta prórroga del Estado de alarma. El CIS ya preguntaba entonces si era necesario «mantener durante más tiempo medidas estrictas de confinamiento de la población» o, por el contrario, habría que permitir más libertad de movimientos». Un 60,4 % se mostraba a favor de mantener medidas estrictas de confinamiento, frente a un 28,8 % que ya pensaba que era necesario rebajarlas.
Los datos indican que la preocupación por el coronavirus ha disminuido respecto al barómetro del mes anterior y que, por el contrario, ha aumentado la inquietud por el paro y los problemas económicos. El covid-19 es ahora el tercer mayor problema para los españoles, citado por un 38,8 % como una de sus tres mayores preocupaciones.
Por encima de la pandemia entre los quebraderos de cabeza de los españoles se sitúan el paro, con un 41,2 %, y la crisis económica y los problemas económicos, con un 38,9 % de las respuestas de los consultados en el sondeo. En el anterior sondeo, el coronavirus era la mayor preocupación para los ciudadanos, citado por un 41,9 % de los encuestados, seguido de los problemas económicos (34,9 %) y el paro (25,9 %).
«Al margen del covid-19»
En esta ocasión, y pese a lo que aseguró el director del CIS, el socialista José Félix Tezanos, no se pregunta a los encuestados si apoyan una censura en los medios de comunicación sobre el covid-19. Pero esta encuesta sí incluye otras cuestiones polémica al preguntar si, en las actuales circunstancias, la oposición debería «colaborar y apoyar al Gobierno, dejando sus críticas o discrepancias para otros momentos», o debe «continuar criticando y oponiéndose al actual Gobierno en todo lo que consideren». Un 74,9 % responde que hay que dejar las críticas para otro momento, mientras un 19,7 % cree que deben hacer las críticas que se crean oportunas. Y, al referirse a la economía, pregunta la opinión sobre la situación económica «al margen del covid-19», lo que permite que un sorprendente 47,6 % la juzgue como «buena» o «muy buena».
El CIS eleva la distancia del PSOE sobre el PP y otorga una fuerte subida a Cs
A pesar de que los que desconfían de la gestión del Gobierno superan a los que la apoyan, y de que a un 62,2 % de lo encuestados Pedro Sánchez les inspira poca o ninguna confianza frente un 37 % que confían en él, el CIS asegura que la labor del Ejecutivo durante la crisis del coronavirus no pasa factura al PSOE. Al contrario, pese a perder una décima en intención de voto respecto al mes anterior, los socialistas aumentarían su ventaja sobre el PP en una elecciones generales.
El PSOE lograría, según Tezanos, un 31,1 % mientras que el PP perdería casi un punto, quedándose en un 20.3 %, cuando en abril se le adjudicaba un 21,1 %. La distancia entre ambos partidos es ahora de 10,8 puntos, cuando en el sondeo anterior era de 10,1. En el caso de Pablo Casado, la desconfianza alcanza un 84,2 % frente a un 14,4 % que confían en él.
UP, a la baja pese a ser tercero
Unidas Podemos mantiene su caída, que en abril le hacía perder un punto, y se deja ahora otro medio punto, pasando del 12 % al 11,5 %. A pesar de ello, recupera la tercera plaza, ya que Vox, desciende del 13 % de hace un mes a un 11,3 %. Ciudadanos experimenta una fuerte subida que coincide con la llegada al liderazgo del partido de Inés Arrimadas, pasando del 7,6 % que lograba en el mes de abril a un 10,5 %. El partido naranja se situaría así a solo ocho décimas de Vox.
El BNG se mantiene en el 0,5 % del total nacional que alcanzaba en la encuesta anterior. Según estos datos, todos los partidos perderían apoyo respecto a los resultados obtenidos en las últimas elecciones generales excepto el PSOE, que subiría 3,1 puntos, y Ciudadanos, que ascendería 3,7 puntos respecto al 6,8 % logrado en las urnas en noviembre.
En esta ocasión, el CIS no incluye la estimación de voto por autonomías, lo que impide constatar la evolución de los apoyos en Galicia a poco más de un mes de los comicios autonómicos. En lo que afecta a la valoración de líderes, aunque todos suspenden, Pedro Sánchez continúa siendo el mejor valorado, con un 4,9 sobre diez, según el CIS. Le siguen Inés Arrimadas, con un 4,3, Pablo Casado con un 3,8, Pablo Iglesias, con un 3,6 y Santiago Abascal con solo un 2,6.
Los datos de la encuesta difieren notablemente de los publicados en diferentes medios el pasado fin de semana, en los que la tendencia era exactamente la contraria: un fuerte ascenso del PP y una bajada del PSOE. El sondeo de Celeste-Tel para eldiario.es otorgaba un 27,4 % al PSOE y un 22,2 % al PP. Y el de GAD3 para Abc daba a los socialistas un 28,7 % y a los populares un 27,1 %.
Tezanos pide no confiar en los sondeos porque «lo sorprendente es acertar»
«No confíen ustedes en las encuestas porque son un modelo de medición muy relativo». El presidente del CIS, José Félix Tezanos, desacreditó así ayer la labor que él mismo realiza al frente del instituto demoscópico público. «Lo sorprendente a veces es acertar», dijo, porque «adivinar lo que votará la gente que dice que no sabe lo que votará es de adivinos».
Tezanos compareció ante la Comisión Constitucional del Congreso y, ante las críticas de la oposición, mostró un tono burlón y defendió la pregunta introducida en el barómetro de abril en la que se preguntaba por la conveniencia de introducir la censura en los medios para que toda la información sobre el coronavirus se remita a «fuentes oficiales». «Se entendía y era clara», dijo.
Aunque admitió que su redacción era «muy mejorable», indicó que hacer preguntas largas es «un defecto de los sociólogos». Anunció que está preparando un libro que incluirá «un capítulo muy divertido» sobre esa pregunta, que es la que le forzó a comparecer, y explicó que «algunas personas que están aquí están citadas» en la obra. Defendió que el CIS contratara para hacer encuestas telefónicas a la empresa Intercampo, que ya hizo trabajos demoscópicos anteriores para la Fundación Sistema, que sigue presidiendo, diciendo que esa firma trabaja también para otros encuestadores.