«Cando vou de pesca esquézome de todo, sinto que entro noutro mundo»
El Gobierno rectifica y permite la actividad durante la fase 1, por lo que hoy es el primer día de la temporada
Graduada en Periodismo por la UCM y Máster en Periodismo Avanzado Multiplataforma de La Voz de Galicia. Yo escribo desde la delegación de Lugo, pero tú puedes escribirme a maria.guntin@lavoz.es
Eduardo Pacios Varela es un aficionado que lleva más de 20 años pescando. Esta es una de sus pasiones, pero le viene de herencia. Al río acude con sus padres y sus hermanos porque para él la pesca también es un momento de desconexión en familia. A la pregunta de si hay ganas de salir y echar la caña, Eduardo no escatima en decir lo mucho que ha echado de menos el madrugón de los días de pesca y hoy, al fin, se retoma la actividad tras varias semanas de incertidumbre.
Este joven se levantó a las seis de la mañana para ultimar detalles y, al fin, poder acudir al río Miño, en una zona cercana a la iglesia de Meilán. Ayer acudió al bar de Ombreiro para comprar el coto para poder salir a pescar. Además, espera encontrarse a más truchas en el río porque, cree que el parón ha favorecido la reproducción de muchas especies. Sin embargo, Eduardo ya asume que los lechos están llenos de maleza y que, por lo tanto, será difícil «atinar».
Pero Eduardo tiene claro que ahora empieza la temporada y que irá en busca de las truchas siempre que pueda y que el trabajo se lo permita. «Eu chego ao río e esquézome de todo, é como entrar noutro mundo diferente. Ademais, alí non hai cobertura», comenta este lucense entre risas. Eso sí, puede capturar como mucho cuatro peces y, aunque parezca un número pequeño a simple vista, Eduardo explica que es una cifra coherente y que, «pillar catro troitas xa leva o seu traballo e para iso xa fai falla andar».
Ayer en el bar de Ombreiro se vendieron más de 24 cotos. Y esa es la cifra facilitada por el local a media tarde, que esperaba una mayor afluencia de pescadores para solicitar su tique a última hora del día.
Un sector cambiante
Sin embargo, la pesca ha evolucionado mucho a lo largo de los años. Así lo explica otro pescador, muy crítico con la situación por la que pasa el sector en este momento y que prefiere permanecer en el anonimato. «Aquí eramos moitos os que coidabamos os ríos porque estabamos ao seu carón. Pero agora non nos deixan tocar a nada», explica este hombre de 65 años que lleva pescando desde los seis. Ayer, también compró su coto para poder salir hoy con su caña.
«Agora o que non é pescador xa non da pescado polo estado no que está o río», sentencia este experimentado pescador.