«Moi ben» casi general en la primera semana de terraceo en A Mariña

s. serantes VIVEIRO / LA VOZ

SOCIEDAD

A los contados locales que regresaron desde el lunes se sumó este sábado el Urban de Viveiro
A los contados locales que regresaron desde el lunes se sumó este sábado el Urban de Viveiro Pepa Losada

Desigual valoración sobre la rentabilidad de un regreso en el que locales y clientes procuran protegerse contra el coronavirus

17 may 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Solo reabrieron contadas terrazas, y con la mitad de su capacidad habitual, en esta primera semana de la desescalada por la pandemia en la hostelería. Proteger a los clientes y a los empleados del coronavirus ha impuesto medidas de seguridad inéditas. Tras la euforia del primer día, camareros y clientes mantienen distancias de seguridad, se protegen con mascarillas y geles hidroalcohólicos, van al baño de uno en uno y solo si es imprescindible, ocupan mesas y sillas desinfectadas tras cada uso. Ya no hay servilleteros, palilleros o bandejas de pinchos, y las cartas tradicionales han sido sustituidas por otras de no tocar o por aplicaciones que permiten consultarlas desde el teléfono móvil leyendo códigos QR.

El terraceo comenzó en A Mariña generando preocupación porque el pasado lunes, en esta inédita «nueva realidad», se vivieron momentos de descontrol en algunos establecimientos. Con buen tiempo hasta media tarde, ese día hubo llenos a las horas del café y de los vinos. De lunes a viernes, restaron afluencia viento, lluvia y frío que sorprendieron en la segunda quincena de mayo. Para varios hosteleros mariñanos consultados ha valido la pena económicamente, pero para otros no. Ese «moi ben» casi general es unánime porque, según cuenta, con el paso de los días comprueban como los clientes se adaptan a unas normas de seguridad frente al covid-19. La mayoría las cumple, aseguran. Controlados por las autoridades sanitarias, con inspecciones incluidas, y por las fuerzas de seguridad, comprobando que respetan las pautas, empresarios y empleados asumen con convicción su papel de vigilantes en la lucha contra el coronavirus que los obligó a cerrar casi dos meses.

Una de las terrazas del Louzao el día del reinicio de la actividad
Una de las terrazas del Louzao el día del reinicio de la actividad Pepa Losada

Xoiña: «Volvemos para que a xente colla confianza, non para ganar»

De diez de la mañana a cinco de la tarde, con una terraza para comidas y otra para bebidas, desde el lunes el Restaurante Xoiña de Foz atiende de nuevo a sus clientes. «Moi ben» le ha ido en esta primera semana el negocio propiedad de José Fernández. Él subraya que reabrieron «para dar servizo, para que a xente colla confianza e se sinta segura acostumándose a esta nova vida, non para ganar cartos».

Porque entre el martes y el sábado «o tempo non axudou», y por las propias características de su negocio, han servido más comidas que bebidas, y con las primeras incluso tienen reservas. Tanto el local como su clientela «cumpren todas as normas» de protección contra la pandemia.

La terraza del Contraste este sábado pasado el mediodía
La terraza del Contraste este sábado pasado el mediodía R.P.

Contraste: «O luns había ansias de tomar algo, agora vai mellor»

Contraste Food and Drinks volvió con su clientela el lunes, un día soleado hasta media tarde en el que «había ansias de tomar algo» y hábitos anteriores al estado de alarma que desde el martes «foron cambiando; agora vai mellor e o comportamento da gran maioría da xente é exemplar». Rubén Pinín, propietario de ese céntrico local hostelero de Burela, constata que entre los trabajadores obligados a comer fuera de casa «hai demanda de racións e bocadillos despois de case dous meses sen poder sentarse a unha mesa». Califica con un «ben» el balance de la reapertura parcial del Contraste, operativo de 6.30 a 24.00 horas, «con todas as medidas de seguridade» frente al coronavirus.

La terraza de La Lira este sábado a la hora de los vinos
La terraza de La Lira este sábado a la hora de los vinos J.A.

La Lira: «Abrín para probar, pero nestas condicións non é rendible»

A Toni Fernández, titular de la Cafetería A Lira de Ribadeo, la reapertura solo con la mitad de la terraza le salió peor de lo esperado: «Abrín para probar, pero nestas condicións non é rendible porque para atender só sete mesas fan falta un mínimo de tres persoas». Como los demás, han extremado la limpieza para protegerse contra el covid-19, lo que ha reducido el rendimiento por camarero «nun 30 %». Sus clientes cumplen las normas, pero para algunos «é difícil acostumarse, recórdalas cando se relaxan».

La terraza de Vinoteca Aquitania este viernes
La terraza de Vinoteca Aquitania este viernes Pepa Losada

Aquitania: «A xente busca seguridade, o seu comportamento é moi exemplar»

Abilio Golpe retomó el martes la actividad en Vinoteca Aquitania, uno de sus tres locales hosteleros de Covas (Viveiro). «Moi ben en bebidas, pouco a pouco nas comidas», explica un hostelero que estos días ha comprobado que sus clientes «buscan seguridade» frente al coronavirus: «O seu comportamento é moi exemplar, e para nós a mellor publicidade é cumprir todos protocolos de protección». En este reinicio «a nosa clientela consume máis do habitual e quédase máis tempo na nosa terraza».

Una de las terrazas de A Dékada este viernes
Una de las terrazas de A Dékada este viernes Pepa Losada

Galipizza y Dékada: «Dá perdas, confío en recuperar despois»

Galipizza Viveiro no ha parado de servir comidas a domicilio en todo el estado de alarma. Este miércoles reabrió la terraza de A Dékada y al día siguiente la de Galipizza. En A Dékada preveía más mesas, pero el pasillo inicial de dos metros de ancho en el Parquemar lo subieron a cuatro «e cos empregados xa recuperados do ERTE e con só sete mesas, dá perdas; se o sei, non abro», explica el propietario José Manuel Vázquez, Leman. En la terraza del Galipizza, frente a la playa de Covas, «mal, non había quen parara co vento do nordeste». Confía en recuperar «na segunda fase» de la desescalada y constata que casi todos los clientes «cumpren» las normas de seguridad; y si no, se las recuerdan.

Una de las terrazas del Louzao el día del reinicio de la actividad
Una de las terrazas del Louzao el día del reinicio de la actividad Pepa Losada

Restaurante Louzao: «Perfecta, moi animada e moi controlada»

Desde el lunes a mediodía ha vuelto con sus clientes el Restaurante Louzao, en Area (Viveiro). Aunque notoriamente distinta a antes del estado de alarma, la reapertura parcial de sus terrazas y jardines le ha deparado «unha semana perfecta, moi animada e moi controlada», resume el propietario Suso Louzao. Contextualiza su opinión en este período de la transición hostelera a la llamada «nueva normalidad». Tras dar los primeros pasos, «vaise medio normalizando», tanto en la demanda de bebidas como de comidas. «Excepto os desbocados», la clientela cumple las normas de seguridad frente al coronavirus, que él mismo y su plantilla han extremado «cumprindo os protocolos e máis».