Suiza sigue siendo un paraíso laboral: sube el paro, pero hay cantones con poco más del 1 %

Santiago Garrido Rial
S. G. Rial REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Clientes en un centro comercial de Ginebra
Clientes en un centro comercial de Ginebra SALVATORE DI NOLFI

El cantón de Ginebra es el que tiene la tasa más elevada del país, con apenas el 5 % de la población activa. La clave está en la reducción de horas en muchos sectores, con ayudas públicas importantes

22 may 2020 . Actualizado a las 12:38 h.

El cantón de Ginebra, uno de los 26 de Suiza, el más multicultural e internacional del país, en en el que llegó a haber cuatro centros gallegos a pleno rendimiento (y alguno más a menor ritmo) ya en los tiempos en los que el franco estaba incluso por debajo de las 14 pesetas (hoy equivale a 0,95 euros), tiene un paro del 5 % con los datos de abril, según los que acaba de hacer públicos el servicio federal de empleo, como siempre a principios de mes. Una cifra envidiable por buena parte de los países europeos agobiados por la crisis, y que ha crecido como también ocurre en casi todo el mundo, pero que curiosamente es la más elevada del país. Un mes más, y ya van muchos años seguidos, hay cantones con poco más del 1 % de desempleo en su población activa, como ocurre con Obwald, con el 1,4 %, o con su vecino Nidwald, en el 1,6, ambos en las proximidades de Lucerna, o también Schwytz, con esa misma cifra. Uri está en el 1,8, y el paradisíaco y muy despoblado Appenzell Rodas Interiores, en el 1,3. Los demás ya suben, pero la gran mayoría se sitúan entre el 2 y el 3. Poco, pero hace un año varios de ellos bajaban de 1 %, así que desde ese punto de vista el incremento sí ha sido notable.

«Nalgúns casos, o paro mandou aos traballadores de apoio aos sectores de alimentación e industria farmacéutica»

La clave para que las cifras se mantengan es el llamado desempleo parcial, la reducción de las horas de trabajo, que ha afectado nada menos que a un tercio de la población activa del país, según explica el portal Swissinfo, que ayuda además a comprenden el complejo sistema laboral y de prestaciones sociales suizas, que se alimentan de varios frentes, con mucho capital público. Y gracias a eso resisten las cifras y resisten los trabajadores, pese a que el virus también ha hecho mella en una de las economías más robustas del mundo. Y la movilidad también es clave: «Nalgúns casos, o paro mandou aos traballadores de apoio aos sectores de alimentación e industria farmacéutica», explica desde Lucerna una emigrante de la Costa da Morte que conoce bien la situación de las empresas. Un parado puede ser enviado a otra empresa para reforzarla, y así ha ocurrido. Numerosas compañías han reducido el ritmo, pero se mantiene. El país no se ha parado, ni siquiera ha habido confinamiento, y las escuelas se reabrieron ayer. 

A día de hoy, en Suiza, un país en el que residen algo más de 40.000 gallegos (la mitad, procedentes de la provincia de A Coruña, sobre todo de la Costa da Morte y su entorno), contabiliza 30.380 personas afectadas por coronavirus (muchas, ya curadas) y 1.845 fallecidos, cifras relevantes para una nación de 8,5 millones de habitantes y las fronteras cerradas en buena medida, salvo con Liechtenstein, con el que hay vía libre. El Principado, por cierto, no varía desde hace semanas, algo insólito: 82 afectados, la gran mayoría ya curados, y una fallecida, una nonagenaria de 95 años que estaba en una residencia y padecía otras enfermedades.