Galicia será una de las regiones del continente más afectadas ante cualquier cambio de esta naturaleza ya que se encuentra en el límite entre dos climas, oceánico y mediterráneo. «Lo que se va a mover no es el centro de una determinada zona climática, sino sus bordes. Y como la comunidad gallega se encuentra justo en la zona de transición entre un clima lluvioso y otro más seco, esta expansión del cinturón tropical le afectará con más intensidad. Nuestra comunidad ya tiene una estación seca, el verano, aunque no es tan acentuada como en otros sitios, como por ejemplo el sur de Portugal. Por tanto, la sequías estivales propias del clima mediterráneo se va a mover hacia el norte y va a afectar especialmente a Galicia», advierte Míguez.